Rajoy, como Maduro pero más soft
Que en esto que analistas “independientes” como Graciano Palomo denomina “El Mundo Libre” el poder siempre intenta controlarnos, de forma más sutil, pero controlarnos a fin de cuentas no es nada nuevo. Pero los niveles a los que está llegando el partido que nos gobierna resultan (y así nos debiera resultar a los ciudadanos que creamos en un sistema de libertades real y donde cada cual se pueda expresar como desee guste más o menos según cada cual) inaceptables e intolerables.
Hoy no me voy a referir a la aprobación de la nueva Ley de Seguridad Ciudadana (que para muchos es una ley “mordaza” que que trata de evitar que los ciudadanos expresen su descontento ante la difícil situación que atraviesa una gran parte de la población).
Esta semana el gobierno no ha dudado en provocar la caída de Jesús Cintora sencillamente porque no es de su cuerda. Cintora (aunque no haya visto mucho su programa) es cierto que no actúa como un moderador imparcial, pero si eso es causa para eliminar una voz crítica de los medios primero debieran empezar por cerrar 13TV desde las 00:00 hasta las 23:59 horas de cada día, aunque no creo que este gobierno lo haga. Que nadie entienda con esto que solicito el cierre de esa cadena, por barbaridades que digan los defendería igualmente. Hasta periodistas nada sospechosos de rojos como Pedro J. Ramírez han calificado esta actuación como atentado contra la libertad de expresión. Vergüenza ajena me ha causado que un periodista como Javier Ruíz (que me merecía respeto) aceptara sustituirlo y lo hiciera el mismo viernes. Javier Ruíz no creo que sea un jornalero que se tenga que humillar ante el señorito para poder alimentar a sus churumbeles (aunque quizá sea difícil renunciar a los trajes caros y los buenos restaurantes a los acostumbrados a ello). Este enlace es sumamente interesante:
Si este partido cree que sus corruptelas, arbitrariedades, insensibilidad con los que sufren, connivencias con los poderosos, etc. las van a acallar eliminando a las voces que no les gusten sencillamente todavía no se han enterado de la película y a los hechos me remito.
Canal Nou tuvieron que cerrarlo porque su nivel de manipulación llegaba a unos extremos que las audiencias eran pírricas. TeleMadrid era la televisión autonómica con menos audiencia hasta que la superó por lo bajo Castilla-La Mancha TV (allí pasó a gobernar Cospedal, ¿no?).
Al frente de Canal 24 Horas pusieron al rastrero Sergio Martín que ha conseguido el “éxito” de hundir aún más la audiencia de “La noche en 24 Horas”. En ese programa un periodista catalán se atrevió a defender tímidamente el derecho a decidir de los catalanes. Cuando lo dijo le advertí una risita nerviosa de arrepentimiento que delataba las consecuencias que temía que aquello le acarrearía (ya no le he vuelto a ver el pelo por allí). Pablo Iglesias, antes de entrar en política acudió una vez como tertuliano. No lo volvieron a invitar hasta que acudió como político para que le hicieran una entrevista (por las presiones de los propios trabajadores de RTVE) y volvió a dejar en evidencia a los contertulios. El que tenga curiosidad que escuche este vídeo (es cortito y merece realmente la pena) y saque sus conclusiones:
https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=TTVAWp388d4
La entrevista que le realizó a la Supervice fue propia de un ser servil que no sé de quien copiaría para aprobar la carrera (al menos la asignatura de deontología profesional). El que tenga curiosidad aquí la tiene:
Aunque no aparezca, censuraron hasta los tweets críticos que suelen poner abajo en pantalla en ese programa. Una diferencia si hubo, la de Iglesias tuvo un gran éxito de audiencia (para esa cadena), la de la Supervice los cuatro gatos de siempre.
En una ocasión María Casado tuvo el atrevimiento de solicitarle en tono de broma a Curri Valenzuela (otra afín a este democrático partido), que dejara de hablar y permitiera a los demás que también intervinieran. Que le dirían por el pinganillo que tuvo que pedirle disculpas llorando.
Las presiones gubernamentales a los responsables de cadenas como Cuatro y La Sexta ruborizarían a cualquiera. Estos señores del PP solo gustan de los medios afines. Rajoy no tiene valor de conceder una entrevista a periodistas que no le bailen el agua. Le teme a una rueda de prensa más que un niño al aceite de ricino. Y cuando en alguna una pregunta no le gusta la ignora y se enfada. En una ocasión, haciendo las Américas, una periodista norteamericana le preguntó por su amigo Bárcenas y se escapó como pudo. Los medios afines (como los tertulianos del amigo Sergio) criticaron a la periodista norteamericana por hacerle preguntas fuera de guión. Me parece que los periodistas de aquel país tienen otro concepto de esta profesión. La espantada de Esperanzita en el programa de Évole fue realmente cómica. Si los madrileños la votan el espectáculo, al menos, lo tienen garantizado.
El periodista Pedro Piqueras (Telecinco) entrevistó en el mismo horario a Pedro Sánchez (3,1 millones de audiencia), Mariano Rajoy (3,6 millones) y Pablo Iglesias (4,2 millones). Que cada cual saque sus consecuencias.
Quieren hacernos creer que el ascenso de partidos críticos (como Podemos o ahora Ciudadanos) se debe a que los medios los promocionan. Si es así se equivocan de medio a medio. No son los medios los que promueven alternativas, son muchos ciudadanos los que eligen medios que permitan expresarse a opiniones diferentes, que no es lo mismo.
De todas formas, como sigamos por estos derroteros y acaben con todas las voces críticas, conseguirán su propósito en buena medida. Preferirían que todos viéramos cadenas como Telecinco donde nos quieren anestesiar con quienes comercian contando sus propias miserias. A fin de cuentas es la cadena líder de audiencia.
Estoy “seguro” que esta noche el amigo Carlos Cuesta en su programa “La Marimorena” no dudará en apoyar a Cintora y criticar a los que han eliminado una voz discrepante. Él es un firme defensor de la libertad de expresión que demoniza a Venezuela por la persecución a los medios y nos amenaza con que Iglesias haría lo mismo.
Al menos en Venezuela sabe uno lo que hay, son claros. Aquí Rajoy procura hacer lo mismo, pero con más delicadeza, es más “demócrata”, más “plural”. ¿Alguien lo duda? Carlitos te veré esta noche con atención, seguro que no defraudarás , ¿pero a mí o a tu amo?