Las cuentas de la Seguridad Social apuntan a un déficit récord en 2016
La Seguridad Social camina en 2016 hacia el déficit más abultado de su historia. Solo se conocen sus cuentas de los cinco primeros meses del año, pero lo ya visto apunta que los números rojos de este año superarán a los de 2015. En julio ha hecho falta sacar 8.700 millones del hucha de las pensiones para pagar la extra. Días antes el Ministerio de Empleo informó de que el saldo del sistema hasta mayo empeoraba sobre 2015. El grupo de investigación en pensiones de la Universitat de València calcula que en 12 meses los gastos superan a los ingresos en más 17.350 millones, 750 millones más que al cierre del año pasado. Los 8.700 millones que ha retirado el Gobierno de la hucha de las pensiones, la mayor retirada hasta ahora de una sola vez, supera de largo los 6.530 millones que hicieron falta hace un año. Este es un claro síntoma de que las cuentas de la Seguridad Social están empeorando respecto a 2015, un ejercicio que ya fue malísimo. La ejecución presupuestaria en los cinco primeros meses del año avalan el síntoma. En ese tiempo los ingresos superaban a los gastos por 2.855 millones, 700 millones menos que hace 12 meses (el saldo positivo a esas alturas del año se debe a que aún no recoge la paga de la extra de verano). De continuar así, el déficit de la Seguridad Social (el referente al sistema de pensiones, no el que en contabilidad nacional incluye en este punto al Fogasa y la protección contra el desempleo) este año superará al de 2015, cuando se marcó un récord negativo. Entonces el desfase entre ingresos y gastos llegó a 16.707 millones, el pasado mayo ya iba por 17.357 millones, según un cálculo anualizado (sobre los últimos 12 meses) del grupo de actuarios del Instituto de Investigación de Políticas de Bienestar Social de la Universitat de València. Si la progresión se mantiene hasta diciembre, el desfase superará los 18.000 millones. Esta cifra ya se ha superado en el cálculo, también anualizado, de los mismos investigadores que excluye de los ingresos las transferencias de Hacienda y de los gastos no contributivos como los complementos a mínimos: 18.048 millones, un 1,65% del PIB. Que el agujero de la Seguridad Social crezca y añada así dificultades al objetivo de reducir el déficit del Estado, contrasta con la recuperación de la afiliación, que en mayo crecía a un ritmo anual del 2,6%. Los ingresos por cuotas en ese mes incluso crecían más, al 2,8%, y más que lo hubieran hecho de no ser porque las cuotas de los desempleados se hundían, al 8%. Pero todo esto resulta insuficiente. Solo el gasto en pensiones sube un 3,3%. Esto se debe a la opción del Gobierno de estimular la contratación con reducciones directas de cotizaciones, lo que este año restará 2.500 millones a las arcas del instituto previsor. También está el hecho de que los salarios de los nuevos empleos tienen menores bases cotización, mientras que los nuevos pensionistas que entran en el sistema tienen prestaciones más altas. En 2015 el salario medio de los nuevos contratos era de 1.250 euros mensuales; la pensión de los nuevos jubilados, 1.342 euros. Esta situación llevó a UGT y CC OO en la noche del viernes, cuando el Gobierno hizo pública la disposición del Fondo de Reserva, reclamar al nuevo Gobierno y a los partidos políticos que incrementen la financiación de la Seguridad Social para fortalecer el sistema de pensiones. Todavía falta la liquidación del IRPF Los 8.700 millones de euros que la Seguridad Social ha sacado de la hucha de las pensiones en julio han servido para pagar la nómina ordinaria de ese mes y la extraordinaria de verano. Pero la Tesorería del instituto previsor todavía tiene que afrontar otro reto este mes: la liquidación el 20 de julio del IRPF de los pensionistas, unos mil millones más. ...http://economia.elpais.com/economia/2016/07/02/actualidad/1467472606_634804.html