Se dejan caer a algunos bancos por aquello de crear incertidumbre para paliar en parte lo que llaman riesgo moral, pero el sistema es el que es y si hubiesen dejado caer a todos aquellos bancos que lo han hecho rematadamente mal, ahora mismo dudo mucho que quedará algún banco en pie, detrás de Lemanh se hubiese ido una buena parte del sistema financiero mundial, ya sabemos lo que pasó con RBS, Merill Lynch, Lloyds, ING y muchos otros más, quizás unos pocos, los mejor gestionados, hubiesen sobrevivido a esta primera oleada de quiebras, pero no a la segunda, ya que la desconfianza hunde cualquier banco por sano que este y el hundimiento más absoluto de la economía mundial hubiese hecho el resto. De hecho, es la segunda oleada (aunque atenuada) lo que tenemos en ciernes y aún no esta claro si se podrá evitar, lo cierto es que si el mismo nivel de provisiones que se esta exigiendo a la banca española se exige al resto de la banca mundial veríamos que muchos son insolventes.
En términos puramente económicos hubiese sido mucho más rentable rescatar a Lemanh que dejarlo caer. Ah, y los rescates no implican que los inversores se tengan que ir de rositas (aunque muchas veces haya sido así), lo que implican es que no perderán todo su dinero, que no es exactamente lo mismo.