Fuera de entrar a valorar el por qué puedes llegar a hacer una afirmación así, quiero puntualizar un par de detalles de tu post.
1º Comparar un seguro de decesos con uno de vida o un plan de jubilación como alternativas, no tiene sentido: El perfil de una persona que quiere ahorrar hace que su enfoque sea el de un producto de ahorro o inversión. El de una persona que lo que le preocupa es el futuro de sus hijos o de su familia si a él le ocurre algo (que va a ser que ocurre, por desgracia no todos vivimos hasta los 90 años) es el de un seguro de vida, en el que en caso de supervivencia también puedes realizar un rescate si contratas un producto que lo permita. Y el perfil de una persona que pretende evitarse los costes (a menudo hinchados por las propias funerarias, vaya idea la de dejar la gestión en sus manos...) y los problemas administrativos que supone, y además no tiene suficiente dinero (O NO QUIERE INVERTIRLO EN ESO) para contratar un producto de ahorro o de vida, tiene el seguro de decesos. Sin olvidar que para cuando cobres las prestaciones del seguro de vida, todos los gastos funerarios han tenido que ser abonados con antelación.
Para eso están las necesidades de cada uno, y la misión de un buen mediador es entender lo que necesita y colocar su producto si se ajusta a sus necesidades, y si no enfocarle para que lo consiga en otro sitio. Colocarle un producto que no quiere o no necesita porque tú (erróneamente por otro lado) consideras que eso es mejor para él sin pararte a analizar las necesidades y posibilidades de una persona.
2º ¿De verdad a una persona que quiere un seguro de decesos le intentas convencer de que invierta dinero en fondos o en planes de jubilación? (por lo menos has hecho referencia a que fueran garantizados, es decir, de renta fija, y no inversiones con riesgo) cuando lo que quiere es cubrir una eventualidad que puede ocurrir en cualquier momento ( y contra el argumento de "no creo yo que me muera mañana" acude a las tablas de mortalidad, también fallece gente joven y no me apetece ponerme a contar ejemplos de este tipo) y con la que quiere evitarse el desembolso del sepelio, ni más ni menos. Si se plantea ahorrar que ahorre, si quiere invertir en fondos que invierta, pero si lo que busca y por su perfil ecónomico quizá necesite es un seguro de decesos, ¿por qué denostarlo?
3º Respecto a "pagar para nada", las aseguradoras se dedican a cubrir el riesgo de los demás, a transportarlo de tu patrimonio al suyo a cambio del cobro de una prima. Si tienes un seguro de hogar y no te pasa absolutamente nada, puede que al cabo de los años digas "lo que podría haberme ahorrado de este invento". Eso sí, el día que se provoque un incendio (y maduremos: lo de "a mí eso por qué me va a pasar" ya es de educaciones más limitadas y épocas muy antiguas que las de un país como el nuestro) y pierdas 50.000 € de tu vivienda, los 1.500 € que has pagado periódicamente a lo largo de 10 años te van a parecer insignificantes. Y si por desgracia se necesita hacer uso de una póliza como la de decesos, piensa que a quien le evitas problemas patrimoniales y económicas no es a ti (como dices, qué más da, si ya...), sino a las personas a quien cargas ese peso económico. Unos podrán asumirlo...y otros no.
4º Por lo que cuestan hoy en día los seguros de decesos, tendrías que estar más de 40 años pagándolo para que te costara más el seguro de esos años que el entierro...menudo timo el seguro de decesos...
5º Los planes de pensiones tienen beneficios fiscales para las aportaciones periódicas que se hacen, pero ten en cuenta que a la hora de rescatar si lo haces en forma de capital para disponer del dinero para una eventualidad como un fallecimiento de un familiar, tributarán SOBRE EL TOTAL DEL CAPITAL RESCATADO, y dependiendo del tipo impositivo al que se ajuste la persona en cuestión pueden quitarle una auténtica salvajada de dinero. No digo que sea malo o bueno, sólo digo que no es precisamente ideal para solventar un fallecimiento. En caso de cobertura del fallecimiento del titular del plan, pasaría lo mismo que con un seguro de vida.
Así que en resumen no puedo estar de acuerdo contigo en que cualquiera de esas opciones es mejor que un seguro de decesos, ya que todas son cosas completamente diferentes y cada persona necesita un tipo determinado de riesgos que cubrir.