Está terminando 2012 y toca hacer balance del año. A principios de 2012 algunos analistas pronosticaban que los riesgos cambiarios durante este año serían más bien moderador esperando que la TRM tuviese una apreciación nula, quedando en un promedio de $1.850/dólar. Sin embargo, la TRM está promediando los $1.800/dólar en 2012, lo que significa una apreciación nominal cercana a 3% anual.
A esto, hay que sumarle el diferencial de inflaciones que juega en contra de Colombia en un 1% frente a EUA, una apreciación real adicional del orden de 4%, con lo cual se acentúa la disparidad cambiaria a niveles cercanos a 15% respecto al dólar.
Son expresiones importantes ya que en función de los valores que tome el subyacente en un momento determinado del tiempo y del precio de ejercicio, nos interesará ejercer o no las opciones.
At the money se refiere a que el precio del subyacente es igual al precio de ejercicio, en este caso no nos convendría ejercer ya que así si ejerciésemos no obtendríamos ganancia pero sí pagaríamos algunas comisiones
In the money se utiliza cuando la opción tiene valor intrínseco. Para una call es cuando el valor del subyacente es superior al de ejercicio, mientras que en la put es cuando el valor del subyacente es inferior al precio de ejercicio
Out of the money se da cuando el valor intrínseco es nulo. En las opciones call se da cuando el precio del subyacente está por debajo del precio de ejercicio y en las opciones put cuando el valor del subyacente está por encima del precio de ejercicio
Un saludo.
La política cambiara es uno de los aspectos más complejos e importantes de la economía de un país. Está íntimamente ligada a la política monetaria, ya que la política cambiaria debe ser coherente con la inflación objetivo. Busca controlar el tipo de cambio ideal de una divisa, puesto que este tiene efecto directo sobre el manejo de la inflación, las exportaciones e importaciones, lo que a su vez afecta al empleo y al crecimiento económico. La Ley 31 de banca central le atribuye al Banco de la República la función de diseñar y determinar el manejo de la política de la tasa de cambio junto con el Ministerio de Hacienda y Crédito Público. En definitiva, la escasez de dólares eleva su precio lo que beneficia la exportación y esto obliga al gobierno a sacar dólares a circulación. Cuando hay exceso de dólares en circulación, por el contrario, se beneficia a los importadores que compran dólares para comprar productos del extranjero. En este caso, el gobierno debería retirar dólares de circulación para equilibrar el tipo de cambio. En Colombia la estrategia de política monetaria se ha implantado dentro de un régimen de flexibilidad cambiaria, con los siguientes objetivos: Mantener un nivel de reservas internacionales que hagan que la economía sea lo menos vulnerable posible frente a choques externos Que en el corto plazo la tasa de cambio no sea excesivamente volatil Moderar apreciaciones o depreciaciones excesivas de la moneda que puedan poner en peligro el logro del objetivo de inflación futura, y la estabilidad externa y financiera de la economía Para lograr estos objetivos el Banco de la República cuenta con diversos instrumentos: Subasta automática de opciones de compra o venta de divisas al Banco, en caso de que la tasa de cambio se encuentre 4% o más por debajo o por encima de su promedio móvil de los últimos 20 días hábiles Subastas discrecionales de opciones de venta de divisas al Banco, para acumular reservas internacionales, y de opciones de compra para desacumular reservas internacionales Intervención discrecional a través de compras o ventas de divisas del Banco en el mercado cambiario Intervención mediante subastas competitivas de compra de dólares en el mercado cambiario
Las cifras, además de en los sectores mencionados, también son positivas en electricidad, gas y agua, y comercios, restaurantes y hoteles, entre otros. Influye en estos datos el tamaño del mercado, ya que Colombia es la segunda nación más poblada de Suramérica, el volumen de reservas de materias primas de origen minero y energético, y la calificación que las agencias de riesgo Fitch Ratings, Moody’s y Standard & Poor’s le dieron al país el año pasado.
A pesar de esto, cada día vemos como un alto crecimiento no siempre va acompañado de una menor desigualdad y en Colombia la clase media todavía es muy escasa.