Tienes toda la razón en cuanto al problema de dilución para los accionistas, que puede ser similar en los dos casos. A lo que me refiero es que el popular me parece un banco que ha demostrado una sólida trayectoria, un buen modelo de negocio, pero que la cagó, como muchos otros, con la burbuja inmobiliaria y que, bien por orgullo o estupidez de la anterior cúpula directiva, no pidió las ayudas al gobierno que otros sí pidieron. Actualmente está plagado de cortos, es como un perro lleno de pulgas, pero es un banco que puede funcionar si se sanea adecuadamente. En cambio abengoa no me gusta. Cuando estaba tan de moda y todo el mundo le tiraba flores, la estudié un poco con la intención de entrar y lo que vi me tiró para atrás. Creo que han creado un gigante alrededor de tecnologías de biocombustibles, energía termosolar y demás historias que son más propias del proyecto de final de carrera de un ingeniero o de una pequeña empresa de soñadores. Y ojo, estoy muy a favor de las renovables, pero no todas son iguales, en el mismo saco de las renovables se meten tecnologías muy diferentes y no todas son igual de competitivas. Creo que el negocio de abengoa sí alguna vez ha funcionado ha sido gracias a las subvenciones, los amiguismos y los contratos estatales con dinero público. Y si a día de hoy no han cerrado diría que es porque
http://www.eleconomista.es/economia/noticias/7608760/06/16/La-Junta-de-Andalucia-hara-todo-lo-posible-por-ayudar-a-que-Abengoa-salve-su-situacion.html.
A quien quiera invertir en renovables que mire hacia Gamesa, una empresa que ha crecido, y mucho, en los últimos años, sin recibir ni un solo contrato en España. Simplemente porque tiene unos molinos muy eficientes, que compiten y ya superan en €/MW a otras energías convencionales.
Y sí, vivo en Terrassa, aunque soy del Prat. Si vuelves por aquí algún día, avisa y echamos una cervecita.