El problema ha sido, que la interpretación de la naturaleza de las cuentas omnibus, ha sido distinta de la originalmente indicada por la CNMV, quien obligaba a denominar este tipo de cuentas como "saldos de clientes", precisamente para diferenciarla del resto de cuentas de las sociedades de valores. Con esa interpretación, esas cuentas no están cubiertas por el FGD, y por tanto cualquier Broker que trabaje con un banco, y éste quiebre, se verá arrastrado a el concurso de acreedores si la dimensión del saldo depositado en ese banco, es lo suficientemente elevada como para impedir que el Broker pueda cumplir con sus obligaciones de restituir los saldos demandados por sus clientes. A pesar de ello, los clientes estarán cubiertos hasta 100.000 euros por el FOGAIN, como así se ha demostrado para el caso de Interdin, pero el broker tiene que quebrar.
La solución más inmediata, pasaría por individualizar los saldos de los clientes del broker a nivel entidad bancario, lo que implicaría abrir una cuenta corriente por cada cliente en el banco depositario, lo que dispararía los costes administrativos del Broker. Este procedimiento sería factible para aquellas entidades que son Broker y Banco a la vez, pero aún así los costes son notablemente superiores, lo que ha de ser repercutido a nivel de tarifas. Por ejemplo, Bankinter tiene 9,50 euros para Futuro de Ibex vs. 3,75 euros de interdin, u 8 euros para el futuro del EuroStoxx, vs. 3.5 euros de interdin.
Es complicado sacarle rentabilidad a una operativa intradía, con costes de transacción 3 veces superiores, por lo que la utilización de las cuentas omnibus va a seguir siendo necesaria. En mi opinión cualquier broker competitivo, que quisiera minimizar el riesgo de quiebra de su banco depositario, debería implementar las siguientes medidas:
1º) Estar sujeto a la cobertura del Fogain. En ese caso si lo peor volviese a acontecer, los clientes estarán cubiertos hasta 100.000 euros por cuenta por el FOGAIN, como ha ocurrido en la situación anterior. En este sentido, no sería recomendable, abrir cuentas con un saldo superior a 100.000 euros.
2º) Diversificar el saldo de sus clientes en al menos 3 bancos con Riesgo Sistémico, esto es, con el tamaño suficientemente grande, como para ser rescatados en caso de que éstos tengan problemas. Desgraciadamente, Banco Madrid, no entraba dentro de esa categoría, pero antes del precedente sentado por la interpretación de la naturaleza de las cuentas omnibus, eso no era un problema.
3º) Sería recomendable que los clientes pudieran conocer de forma transparente, qué porcentaje de su saldo está depositado en cada una de estas entidades en cada momento.
Estoy seguro que el equipo de interdin, habrá tomado cuidadosa nota de lo acontecido, y en ese sentido, estará "vacunado" en su nueva andadura, y por tanto soportará menos riesgos que la media del resto de brokers nacionales.