Totalmente de acuerdo con Ankaser, a mi me parece perfecto que con mis impuestos se ayude a quien lo necesite, pero la cruda realidad es que hay mucho listillo/a suelto que está cobrando ayudas/subsidios de toda índole usando diversas triquiñuelas legales.
Aquí en España por desgracia sobran listillos y faltan listos de verdad.
Hay mucho más margen del que se cree, y se podrían vender vehículos considerablemente más baratos de lo que se venden, lo que ocurre es que en el reparto del pastel, el concesionario no es ni de lejos el que se lleva la mayor parte.
La del automóvil ha sido y todavía es una de las industrias base en el crecimiento del sistema capitalista, pero dudo que su nivel de participación en dicho crecimiento sea sostenible, tocará reconversión en un futuro no muy lejano.