De un tiempo a esta parte no paramos de recibir señales que nos indican lo necesarios que son los emprendedores en este país, que hay que ser valiente y emprender para salir de la crisis, que si Ley de emprendedores. Realmente cuando recibimos todos estos mensajes, ¿se refieren a emprendedores o a empresarios?
Da la sensación de que se está abusando del término emprendedores y se está abandonando el de empresarios. Esto puede estar motivado por las connotaciones negativas que comúnmente estás asociadas al término empresario, en España, en muchos casos se tiene la idea de que el empresario es un explotador, que no tiene ningún tipo de sentimiento por sus trabajadores, que sólo busca sacar su máximo beneficio aprovechándose de los demás. En algunos casos puede ser cierto, pero no es real en la mayoría de los casos. Por otro lado, abusar del término emprendedores puede ocasionar que el propio término se desgaste, ya que se tiene la idea de que los emprendedores "van a salvar el mundo", realmente esto no depende solamente de ellos, pero si las cosas van mal serán los primeros a los que se culpe.
Así pues, definamos correctamente los términos empresario y emprendedor.
¿Qué es un empresario?
Se entiende comúnmente como empresario a la persona que tiene un negocio en marcha, es propietario de él (total o parcialmente), lo gerencia directamente o por medio de otra persona que no es necesariamente accionista. El empresario, de forma individual o colectiva, fija los objetivos y toma las decisiones estratégicas para alcanzar los resultados deseados. Administra, planifica, organiza, dirige, coordina y dirige las empresas.
Pero además existen otras definiciones más específicas de empresario. Este es el caso de la teoría del empresario-riesgo de Knight: para Knight, el empresario es aquella persona que arriesga su capital sin saber el resultado final de la actividad que está llevando a cabo. Además, define el beneficio empresarial como la recompensa por asumir dicho riesgo.
¿Qué es un emprendedor?
Se considera emprendedor a aquella persona que identifica una oportunidad y organiza los recursos necesarios para ponerla en marcha. Normalmente se emplea este término para definir a una «persona que crea una empresa» o que encuentra una oportunidad de negocio, o a alguien quien empieza un proyecto por su propio entusiasmo.
También podemos encontrar diferentes teorías que hablan del término emprendedor, pero una de las más llamativas es la teoría del empresario-innovador de Schumpeter, un economista que vivió durante el final del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX. Él entendía que la función principal del empresario era innovar, con lo que debía aplicar las invenciones tecnológicas a usos comerciales e industriales, lo que le otorgaría el empresario innovador una situación de monopolio temporal con beneficios extraordinarios, hasta que otros empresarios atraídos por las ganancias le imitasen, con lo que el mercado volvería a la situación de equilibrio. Este proceso se convertiría en el motor del desarrollo económico.
Resulta muy llamativo observar como hace más de 50 años ya había alguien que definía al empresario de la misma manera en la que, comúnmente, se describe al emprendedor hoy en día; alguien que tiene que desarrollar nuevas ideas y ponerlas en funcionamiento, es decir, innovar, para hacer que la economía fluya. Esto puede debería hacer que nos planteemos si hemos avanzado mucho en esta materia desde, desde principios del siglo XX.
Diferencias entre empresario y emprendedor
La principal diferencia entre empresario y emprendedor sería que el empresario es la persona que gestiona y administra una empresa, mientras que el emprendedor la persona que intenta resolver un problema a partir de una idea y su desarrollo inicial. Por tanto podemos llegar a la conclusión de que en este ámbito existen 4 tipos de individuos:
- El empresario emprendedor: a partir de la gestión de la empresa, descubre o desarrolla la capacidad de innovar para satisfacer necesidades.
- El emprendedor empresario: tiene una capacidad innovadora nata y la plasma a través de la puesta en funcionamiento de una empresa.
- El empresario no emprendedor: únicamente dirige la empresa, no tiene capacidad innovadora.
- El emprendedor no empresario: tiene la capacidad de crear e innovar, pero no la de dirigir y administrar una empresa.
Las 3 diferencias básicas que podemos encontrar entre los dos términos son las siguientes:
Empresario | Emprendedor |
Se mueve por la razón | Se mueve por la emoción |
Le sobra aptitud | Desarrolla la aptitud |
Desarrolla la actitud | Le sobra actitud |
Cabe esperar que la figura del empresario que no se preocupa por sus trabajadores ni por la evolución del negocio vaya desapareciendo poco a poco. La formación de empresarios y emprendedores puede ser la clave para que ambos colectivos desarrollen las aptitudes del otro y esto fomente el desarrollo del mercado económico mediante el desarrollo de ideas que más tarde sean ejecutadas.
Podemos encontrar una gran cantidad de ejemplos de empresarios innovadores actuales que han conseguido arrasar en el mercado gracias a sus innovadores productos:
- Steve Jobs, fundador de Apple.
- Jeff Bezos, presidente de Amazon.
- Mark Zuckerberg, creador de Facebook.
- Sergei Brin y Larry Page, fundadores de Google.
- Ren Zhengfei, creador de Huawei.
- Reed Hastings y Marc Randolph, creadores de Netflix.
Así que aquellos que se escudan en que "está todo inventado", tal vez sea porque no tienen esa capacidad innovadora que caracteriza a los emprendedores.