El economista Tomás Iglesias en su post La tontería del “como si fuese” señala que un gobierno no funciona como una familia ni como una empresa. En este post vamos a analizar las razones por las cuales lo que dice Tomás es cierto.
Una familia
Una familia típica a como la entienden muchos está compuesta por una trinidad llamada padre, madre e hijo. Si tomamos los roles tradicionales (para efectos de simplificar la explicación), el padre tiene un empleo que provee los ingresos, la madre hace el trabajo doméstico, y el hijo depende de ellos y juega y estudia. Padre y madre toman decisiones acerca del futuro de su hijo, y también sobre las finanzas de la familia. Si en algún momento el ingreso del padre se ve reducido, deben apretarse el cinturón, deben reducir gastos, entrar en austeridad. Sin embargo el deber del padre y madre es siempre velar por el bienestar de su hijo, y para eso si no alcanza, ellos se sacrifican, y si es necesario, no comen para dar de comer a su hijo.
El gobierno los altos jerarcas toman decisiones acerca del futuro de los ciudadanos (empleados públicos y del sector privado), y también sobre las finanzas del país. Sin embargo, como malos padres, cuando hay escasez, los políticos no se sacrifican ellos, como padres de la patria, sino que sacrifican a los ciudadanos, a los hijos, que sean los hijos los que sufran hambre.
Lo interesante es que los ingresos del gobierno vienen de los impuestos, de modo que en lugar de hacer que el hijo tenga hambre, si realmente el gobierno funciona como una familia, entonces el gobierno debe cobrar más impuestos para aumentar sus ingresos. Entonces vienen los ideólogos a los que no les gusta perder y dicen que en realidad no son los ingresos fiscales los que equivalen a los ingresos del padre, sino el PIB que tiene que en teoría (y no en la realidad) ver con la producción, porque no se produce y no se vende los suficiente para que el país pueda alimentar al hijo. Resulta que la producción se puede vender en otros países o dentro del país, y como sabemos, si no hay clientes no hay ventas. Esto implicaría que el país debería vender más afuera del país (exportar) y hacer que los ciudadanos (los hijos) compren más. Lo que pasa es que en realidad los ciudadanos compran menos porque no tienen empleo y por ende no tienen dinero. Y por eso sufren hambre. Es decir, papá no gana lo suficiente porque el hijo no puede comprar porque papá no le da dinero, y como el hijo no compra lo que produce papá, entonces por eso es que papá no tiene dinero y no le puede dar de comer al hijo. Es decir, el hijo no compra y por eso tiene hambre, ¿es culpa del hijo? No. Es que papá no le da dinero al hijo y por eso papá no recibe el dinero. Entonces la solución es que el gobierno le regale dinero a los ciudadanos para que compren.
Desafortunadamente el gobierno español le ha dado dinero a los bancos que son barriles sin fondo que enriquecen a los banqueros, y a empresas que no contratan sino que despiden. Definitivamente España no funciona como una familia.
Una empresa
Sabemos que una empresa es un ente compuesto por un gerente y empleados, y existe para generar beneficios, que luego se distribuirán entre accionistas. Normalmente la empresa trata de tener los menores gastos, y el máximo de ingresos. Hay dos tipos de empresas.
Están las productivas, que toman un insumo inútil y barato (por ejemplo caucho y metal) y lo transforman físicamente en algo útil (por ejemplo un coche) y de esa diferencia surge el valor agregado que permite que haya utilidades. Esas empresas aumentan sus ingresos produciendo y vendiendo más, y tratando de mantener los gastos bajo control, para que los gastos no se coman la ganancia que viene del valor agregado, de la transformación física que hace más útil (y por lo tanto sube el precio en virtud de su utilidad).
Por otra parte está otro tipo de empresa que no produce nada, y lo que gana es porque se lo quita a otros o porque se inventa dinero en libros contables. Las empresas de seguro, por ejemplo, cobran a muchos asegurados y lo que pagan en seguros es menor que lo que cobran, y de allí sacan la ganancia. En realidad la aseguradora mantiene deudas para con los asegurados, que no se pueden hacer efectivas sino hasta que suceda determinada cosa. El truco es encontrar la manera de que el evento determinado que causa los pagos de deuda para con los asegurados no supere los ingresos.
Los bancos en cambio, mediante el sistema de Reserva Fraccional, tienen derecho a inventar dinero en sus balances contables en una proporción determinada después de una cantidad dada de transacciones que involucran depósitos. Si por alguna razón ese dinero inventado (que es dinero falso) se vuelve incobrable, se convierte en un "activo tóxico" y el banco necesita un rescate para compensar ese dinero que está en libros, pero que el banco no tiene ni tendrá por la vía convencional.
En ambos casos, tratan de aumentar ingresos y minimizar gastos, lo que significa generar ganancias en un estado de resultados, para darle ganancias a los accionistas que invirtieron en él.
Un gobierno no produce nada, de modo que no tiene sentido hablar de valor agregado. De este modo uno pensaría que debe parecerse más a un ente financiero. Entonces lo que habría que hacer es maximizar ingresos y reducir gastos, lo cual significa que el gobierno debería tener superavit, cobrar tantos impuestos como sea posible, y tener tan pocos gastos como sea posible. Resulta que los ideólogos que impulsan la idea de que un gobierno funcione como una empresa, generalmente no les gusta que les suban los impuestos a ellos, más bien buscan que se los bajen. Estos ideólogos hablan de un ideal de un "Estado pequeño" que sería como hablar de una "empresa pequeña" que debe lograr más con menos recursos. ¿Será que una PYME logra hacer más que una multinacional? Entre los estados pequeños están Somalia y Haití.
Curiosamente, mientras que la empresa debe maximizar sus ingresos (lo que recibe) y reducir sus gastos (lo que entrega), al gobierno se le pide que maximice lo que entrega y minimice lo que recibe (impuestos).
Resulta que cuando un gobierno se endeuda, los banqueros e inversionistas compran los bonos de deuda que pagan una tasa de interés. Como el gobierno no produce nada, si el gobierno no puede imprimir dinero (España no puede imprimir Euros), debe quitarle el dinero a alguien. Entre los candidatos para que les quiten el dinero están las empresas o las personas, y las personas se ganan el premio, porque las empresas no quieren pagar. Al final el gobierno termina funcionando como una empresa donde los bancos e inversionistas reciben una ganancia, y donde los ciudadanos trabajan duro para que ellos ganen dinero. De esta manera los ciudadanos son los empleados y los acreedores son los accionistas del país. Y como una empresa puede deshacerse de un empleado, así el gobierno se puede deshacer del ciudadano.
Este enfoque tiene un problema, porque la empresa reparte dividendos a accionistas cuando tiene ganancias, no cuando tiene deudas. Y también se supone que los accionistas del país son los ciudadanos, que son a los que el gobierno debe beneficiar. Es que si el gobierno no existe para beneficiar al ciudadano, ¿cuál es su función? Algunos dirán que beneficiar a la economía. ¿Quién es la economía? ¿Es sólo un sistema abstracto que existe para beneficiarse a sí mismo, o hay personas que se benefician?
En mi post anterior ¿Como sería todo si el Estado se manejara como una empresa privada? se puede ver lo que sería el "manejo empresarial" en un gobierno. Y en mi post anterior ¿Cuáles serían las quejas si el gobierno funcionara como empresa privada? podríamos darnos cuenta de las quejas que tendríamos si así funcionara.
El gobierno
El problema como vemos es que una familia y una empresa son distintos de un gobierno. La existencia del gobierno está justificada por varias funciones:
- Es una válvula de liquidez en la economía.
- Es un ente redistribuidor de la riqueza (quitar a los ricos para dar a los pobres... o al revés)
- Administrar el ecosistema de la economíapara traer bienestar al ciudadano.
Imaginemos que el gobierno es un sistema circulatorio por el cual fluyen unas aguas que llamaremos dinero. En el siguiente diagrama las flechas indican dirección en que fluye el dinero y podemos pensar que esas flechas son en realidad tuberías.
Así funciona este sistema:
- Consumidor (personas): En una economía el consumidor recibe una paga por su trabajo. El consumidor trabaja para bancos, sector productivo y gobierno. Los consumidores son el mercado, son los clientes, y sin clientes las empresas no pueden existir.
- El sector productivo: Produce lo que ocupa el consumidor, el gobierno, los bancos y el sector externo.
- El sector financiero (bancos): No produce nada. Gana al inventarse dinero o quitárselo a otros.
- Gobierno: Tienen ingresos que vienen de impuestos y gastos donde redistribuye la riqueza. Lo lógico sería que para una buena redistribución se cobre a los ricos para darle a los pobres para ayudarles a ser ricos, y no al revés.
Resulta que si recortamos el gasto estatal despidiendo empleados públicos pasa esto:
- Los consumidores que trabajan para el gobierno ya no pueden ser clientes.
- Entonces las empresas (sector productivo y financiero) tienen problemas para obtener ganancias, y despiden personas, consumidores, lo que hace más grande el problema.
- A eso se suma el miedo al desempleo que reduce la cantidad de dinero que los consumidores gastan.
El resultado final es que cada vez pasa menos dinero por las tuberías, porque cada sector reacciona ante la reducción de la cantidad de agua que recibe, y el sistema completo empieza a secarse, lo cual nos hace pensar en un problema de liquidez. Al final la austeridad termina secando el sistema completo. ¿Acaso este ecosistema se parece a una familia o a una empresa? Véase mi post Entendiendo la economia de un país en forma simple. Al final, el gasto público termina siendo una válvula de liquidez para la economía en tanto el dinero se dirija hacia el pago de salarios. Cosa distinta sería cuando el gasto se usa para pagar privilegios, como subsidios a empresas que no las necesitan, rescates a los malos gestores, o el exagerado pago que reciben algunos políticos. Si se reducen estos gastos suntuosos, realmente no hay gran impacto, porque los ricos no gastan tanto, sino que ahorran y no van a pasar hambre ni van a gastar mucho menos si les recortan un poco sus ingresos.
La diferencia es que las familias y empresas no reciben un efecto de rebote o "recoil" (el efecto de retroceso de un arma de fuego) mientras que en una economía sí hay un proceso de retroalimentación, un rebote, un recoil. En este sistema, el consumidor es el motor de la economía, y eso lo podemos ver en China, que es el taller de fabricación del planeta, donde al entrar el mundo en recesión ellos venden menos. La idea de que darle dinero a las empresas va a levantar la economía (que era lo que Zapatero sostenía y Rajoy también) sería como pensar que regalándole dinero a China se levanta la economía mundial.
Como el consumidor (y no la empresa) es el motor de la economía, si quieres levantar la economía, lo que necesitas es convertir a los pobres en consumidores. Más clientes con más dinero, benefician a las empresas. Por eso es que la pobreza conduce a un estado subóptimo del capitalismo. Si quisieras ponerte tu propia empresa hace 10 años, ¿adonde la pondrías? ¿En Siberia o en los EUA? Pues obviamente en los EUA, porque allí había más clientes con más dinero. El empresario prospera cuando está rodeado de muchos clientes con mucho dinero.
Izquierdismo vs derechismo
Resulta irónico que al entender el ecosistema económico, que no es otra cosa que macroeconomía, se entiende que si los izquierdistas de corazón (no los del PSOE) ganan y la gente le va bien, en realidad eso crea una buena cantidad de clientes que ayuda a las empresas, y así los derechistas que quieren lo mejor para las empresas, ganan. Por el contrario, cuando cerramos el grifo del dinero hacia los consumidores, las empresas sufren.
¿Por qué entonces hay tanta disputa ideológica entre izquierda y derecha? Es que los de derecha no ven a las personas como clientes, como una fuente de ingresos, sino que los ven como trabajadores, como una fuente de gastos. Esa visión asume que el mercado de clientes es una veta infinita de consumidores, mientras que la empresa debe tener la mínima cantidad de trabajadores y a un costo mínimo, una idea guiada por la avaricia. Esto evidentemente es una visión angosta, completamente microeconómica, centrada en una empresa en particular, y no en el sistema.
El efecto rebote
El problema es que si todas las empresas de portan de esa manera, crean un efecto sistémico, un efecto rebote. Y si no entienden el ecosistema como sistema circulatorio, entonces el resultado final es una recesión causada por la avaricia, de modo que al querer ganar más dinero, sacrificando al sistema, el sistema devuelve la piedra y golpea al avaro (Véase mi post Avaricia: La cultura del vago y el pedigüeño).
Este efecto de rebote hacia el avaro ha sido minimizado al asumir el gobierno la ideología de que debe protegerse al avaro a expensas de todos los demás, y por eso los banqueros que no producen nada, no pierden dinero, pero eso es porque hay una distorsión legal en el mercado que empuja a que el dinero fluya del pobre hacia el rico, y se disimule el efecto de rebote, al menos temporalmente.
Una de las propiedades de los sistemas interconectados donde un componente reacciona ante lo que hace el otro, un ecosistema, es que tarde o temprano el efecto se devuelve, hay un efecto rebote. Ya Zapatero empieza a sentir el efecto rebote en lo político y jurídico (Zapatero y Salgado denunciados por falsedad y daños a la economía). A nivel ideológico el efecto rebote se sentirá en España en algunas décadas. Recordemos que Argentina y Bolivia en los 1990 sufrieron toda la ola privatizadora y los ciudadanos argentinos y bolivianos sufrieron como los ciudadanos españoles, y eso les vuelca hoy hacia una ideología nacionalizadora, porque vieron que la ideología privatizadora no mejoró la economía del país, sino que la empeoró. ¿Por qué empeoró? Porque al privatizar lo que es rentable, lo que le queda al gobierno es lo que produce déficit, se reduce los ingresos fiscales y se aumenta el déficit y la deuda, que era lo que se pretendía solucionar. A nadie se le ocurriría en medio de una crisis de deuda, renunciar a aquello que brinda ingresos.
Los españoles podrían beneficiarse al aprender de la experiencia de Bolivia (Macroeconomía de la Privatización en Bolivia) y Argentina (Las Privatizaciones en la Argentina). Ese sufrimiento durante los 1990 hizo que los argentinos, con su marcada irreverencia, sintieran que no iban a sufrir, sino a gozar la renacionalización de YPF.
El ministro del Interior, Florencio Randazzo, afirmó este mediodía que "las consecuencias" de expropiar YPF a la petrolera española Repsol no se van a sufrir, sino que "se van a gozar" y van a ser "absolutamente favorables para el desarrollo" nacional.
Fuente: UE: "Las consecuencias no se van a sufrir, se van a gozar"
Evidentemente entre España y Argentina hay una disputa ideológica que se ha querido convertir en un problema de pleitos nacionalistas. Lo cierto es que los ideólogos causantes de la crisis en Argentina y Bolivia hoy cosechan los frutos de sus actos: La conciencia colectiva de que nacionalizar es mejor.
Evidentemente la nacionalización no agrada a los ricos, porque les quita la tajada de pastel de que gozaban. Es que no entendieron que el capitalismo se beneficia de una reducción de la pobreza. No entendieron que el capitalismo se beneficia de una amplia clase media, como la que existió por años en los EUA. Y en España imagino que a futuro, los jóvenes españoles que hoy sufren, serán los impulsores de las futuras renacionalizaciones españolas. Sólo es cosa de esperar a que crezcan y tarde o temprano esos jóvenes que sufrieron, tomarán el control de España.
Después de ver todo esto, ¿todavía podemos pensar que un gobierno funciona como una empresa o una familia?