La construcción de la España que queremos estará llena de obstáculos, principalmente de aquellos que no quieren que las cosas cambien, porque se benefician con los problemas actuales. He hablado sobre ser activista, y sobre cómo empezar, pero empezar no es suficiente, porque llegará un momento donde te enfrentarás a los demonios del statu quo.
Filantropía insuficiente
En mis posts anteriores he hablado a los españoles sobre oportunidades para España, que por supuesto exigen abandonar la vida de ermitaño que dice "que otros lo hagan", para participar un poco más en las decisiones comunitarias, autonómicas o nacionales, en forma de activista que busca generar bienestar humano, o lo que en España se ha popularizado como "bien común".
He hablado de la sociedad de roles que encierran la mente de la persona no pensante, sin pensamiento crítico, en una jaula de estereotipos e ideas predigeridas por otros, y la convierte en fundamentalista, un robot al servicio de terceros. He hablado de cómo iniciar tu labor con la filantropía. Pero la filantropía de promover valores familiares en México, de hacer entender en Guatemala que la importancia de sacar gente de la pobreza porque un pobre menos es un cliente más, o en España ayudar a los desvalidos, no es suficiente.
Tarde o temprano tendrás que enfrentarte al statu quo, que tendrá divergencia de objetivos, no porque realmente deba ser divergente, sino porque quieren aferrarse al "business as usual", o porque son fundamentalistas (están llenos de las "zonas de no pensar" y de ideologías).
En el camino hay demonios y "satanases" que se interpondrán en el camino.
Arameo y la deformación de las palabras
Cuando buscamos la raíz etimológica en el arameo para la palabra demonio o diablo obtenemos un sinónimo de "calumniar, falsear, mentir". Satanás o Satán deriva del latín Satāna, y éste a su vez del arameo הַשָּׂטָן, ha-shatán, "adversario, enemigo, acusador". Aunque luego se le menciona como un espía errante de Dios sobre la Tierra, el sentido primario, de la raíz שטן (štn, "impedir, hostigar, oponerse"), sería simplemente el de "enemigo". Por supuesto no es el mismo concepto actual de enemigo, sino que hay que entenderlo como lo entendían en tiempos bíblicos.
Cada vez que reviso la etimología de las palabras, sus significados originales, me doy cuenta de que los que hablaban arameo estaban pensando en la construcción de un país, y no en formar corporaciones que venden activos invisibles a incautos, a cambio de dinero (que esos serían los demonios y satanases). Hay cierta pureza en ese idioma, que no fue corrompido por el discurso orweliano moderno de los medios de comunicación y la pereza mental. El discurso orweliano es la forma actual de demonio, de mentira.
En arameo la palabra para pecado es khata. La palabra pecado, del latín peccātum, significa tropiezo, fallo; y del arameo khata, o del hebreo jattá'th, significa errar el blanco, no alcanzar la meta, fallar en el objetivo. Como vemos, es un significado que realmente no es tan religioso como creíamos. Cuando construimos un país, o enviamos una expedición al Nuevo Mundo, tenemos un objetivo, y si tenemos tropiezos, fallos, erramos el blanco, tenemos un pecado (en arameo).
Sorteando los demonios
El primer demonio de todos es el fundamentalismo. Contrario a la idea de que todo fundamentalismo es religioso, George Soros apunta que hay tres tipos de fundamentalismo: religioso, político y de mercado (financiero). Y por razones humorísticas yo agregaría el fundamentalismo futbolístico.
Los medios de comunicación mainstream nos quisieron deformar el diccionario, diciendo que pecado es la transgresión voluntaria de un precepto, de normas o preceptos religiosos. Y como los religiosos son gente con mentalidad cuadrada, por lo tanto, el pecado no es pecado. No existe el error. La ausencia de reglas es el paraiso del psicópata.
Es una forma mediática de control, deformar el diccionario para que no entiendas lo que otros sí entendían en el pasado. Por ejemplo, si hoy una autoridad a la que respetas dijera "todos somos humanos" y piensas que merecemos derechos humanos, y cambiamos el significado de "humano" por "cerdo", el resultado es "todos somos cerdos" y te preguntas si en realidad mereces los derechos de los cerdos, ser tratado como cerdo, y que te cocinen en el fuego como cerdo. Una demonización de las palabras.
Veamos algunos ejemplos de deformaciones mediáticas:
- 2010. La crisis de los cerdos PIIGS ¿humanos? La inteligencia griega EYP denuncia ataques especulativos por parte de entes financieros anglosajones. Los medios anglosajones predican pánico, "crisis de deuda" y la necesidad de "rescate" (que en realidad es prestar dinero al que ya está muy endeudado). Los medios hablaban de "inminente" salida de Grecia del Euro y fin de la moneda Euro. Algo tan inminente que nunca ocurrió. ¡¡¡Ahi viene el lobo, ahí viene el lobo!!! Como en Grecia hablan otro idioma, nos mintieron (¿De verdad se benefició el ciudadano griego con el gasto del gobierno griego?). Al final la idea es que los cerdos han comido mucho y ahora es momento de cocinarles para el banquete.
- 2012. El fin del mundo del calendario Maya. El calendario chino es lunar, el nuestro es solar. El calendario Maya era un calendario agrícola, mezcla de solar y lunar y el fin de "siglo" Maya era el 2012. Es como esperar tragedia en año nuevo. National Geographic fue el principal promotor de esa charlatanería.
- Nostradamus. Si bien otros medios han intentado hacer esfuerzos ocasionales para popularizar a Nostradamus, ninguno lo hizo con tanta intensidad como History Channel que nos vende DVDs con esa charlatanería. Nostradamus era un drogadicto que escribe versos de borracho. Si te sobra el dinero y no te importa leer el escrito de un borracho, puedes comprarte el libro con los versos originales. Observarás que los "expertos" casi nunca citan los cuartetos en los que aparece la supuesta profecía. Si no quieres desperdiciar el dinero, tal vez quieras ver mi interpretación de los cuartetos, en mis posts Humor: Las profecías de bolsa de Nostradamus y tambien 2012: ¿El fin del mundo o el inicio de nuestra libertad para vivir?.
Como es de esperarse, de los mentirosos no puedes esperar valores morales. No se rigen por tu código, pero eso no quiere decir que debas unirte a su legión, por varias razones:
- El que dice la verdad no necesita memoria.
- El que nada debe, nada teme
- Podrán hablar mal de ti hoy, podrán hacerte daño. Pero el tiempo todo lo aclara, y que te hagan daño no significa que te han derrotado.
- Cuando las palabras y los hechos no calzan, le crees a los hechos.
No te preocupes tanto por los mentirosos. La mentira no sobrevive para siempre. Los demonios fracasan.
La palabra breve
El fundamentalista es un perezoso mental, quiere su diccionario cada vez más reducido, y bajo la excusa de la irrelevancia, no gusta de los textos largos. Trata de entrar a un foro anglosajón o alemán y escribir una retahila. Les molestará, porque los textos largos sólo sirven para hacer "nagging" (regaño) o "rant" (palabras delirantes).
En español, escribir abundantemente y adornado con elegancia, es señal de que te preocupas por tu interlocutor al dedicar mucho tiempo a escribir. Es como si cosieras a mano un traje de seda lleno de decorados artísticos. Y mientras más sofisticado y culto el lenguaje, mejor. Esa forma de escribir requiere pensar más, tanto para el que escribe como para el que lee. Y al ignorante y analfabeto que eligió ser así (y no porque no tuvo oportunidad de cultivarse) le molesta que escribas así, porque le obligas a pensar. En ese sentido los que hablamos idiomas latinos tenemos una ventaja, pues de alguna manera tenemos la posibilidad de ser menos adoctrinables. Y con gente pícara, aprendemos a no ser tan ingenuos, lo cual dificulta aún más el adoctrinamiento.
En la sociedad anglosajona funciona como una colmena colectivizada a la que llaman "sistema", y que ellos llaman "machine". Miras su ciencia ficción y todo es acerca de ser "asimilados por la máquina" (la persona sirve al sistema y no al revés) o "la máquina que se vuelve contra su amo" (el sistema contra las personas). Son colectivizados por la obsesión de la brevedad en el Tweet, en el "straight to the point", en el "briefing", "dashboard" y "summary". Su colectivización tiene ventajas, como que permite construir un hormiguero, pero tiene el problema de aprisionar a la gente.
En la cultura hispana, así no funciona. Venezuela y Argentina, los hijos de España, vieron a sus niños volverse escuálidos esqueléticos con las reformas del FMI que suele ser considerado un "hitman" financiero de los EUA, y a diferencia de Somalia, no se dejaron asimilar. Argentina pasa de los 1990 miseriables, a ser un país adonde muchos quieren ir. Venezuela reacciona y lanza el chavismo que significa un dolor de cabeza para los EUA. Es decir, el hitman cometió un craso error.
No es tan fácil endemoniar al hispano que tiene esa picardía cultural para no dejarse seducir tan fácilmente con mentiras, pues tarde o temprano se dan cuenta. No será inmune, pero es más duro de roer. No pierdas esa habilidad de escribir complicado y leer textos complicados, porque te ejercita la capacidad de pensar, de detectar las palabras de los demonios, los amos de la mentira.
Sorteando a Satanás
Dijimos que Satanás se refiere al que te impide, y si es parte del statu quo de poder, y le vas a cambiar reglas del juego, seguro que puede ser alguien con malevolencia, y hará cosas no muy buenas.
Dictadura y represión
Los fundamentalistas han creado el fundamentalismo en la forma de "zonas de no pensar" donde usan la violencia para forzar a que no pienses. Les molestará profundamente que cuestiones a sus profetas, usarán la violencia contra tí. Y por eso es que los dictadores temen más a la pluma que a la espada. Usarán la violencia para callarte.
¿Cómo te libras de la represión? Cuando atacarte a tí no hace que las ideas sigan rodando como bola de nieve, dejas de ser blanco atractivo para los amigos de la represión.
El hispano es pícaro, y aunque se hace el tonto, no lo es. El que se pasa de listo, trata de callarle, y entonces en lugar de tratar de abrir la boca y "ser vocal", también puedes callar. Y ese silencio es más peligroso que la verbalidad. Significa que estás acechando al dictador represivo, porque todo el mundo tiene un momento en que ya no tiene tanto poder, y entonces ¡¡ZAS!! Es un acto pasivo-agresivo.
Quizás en México crean que con la amenaza de violencia van a acabar con los que piensan. Quizás en España piensen que con ley mordaza acaban con los que piensan. Se equivocan. Al hacerles callar, les hacen pensar aún más. El silencio castiga al dictador, y le hace sufrir, porque deja de saber adonde está parado. En todo caso, ¿cual es la gana de andar siempre queriendo "expresar algo" y "hablar por hablar"? El silencio de de sabios, y el silencio es la palabra más difícil de pronunciar. Úsa las palabras sabiamente, y el silencio también.
Las dictaduras no duran para siempre. Y al concluir, generalmente el país se vuelca al lado opuesto. Tras la dictadura ultraderechista de Pinochet, vino el socialismo de Bachelet. Tras la miseria de Menem, el kirchernismo. Tras la miseria del FMI, Hugo Chávez. Tras la miseria de los chinos con Chiang Kai Shek, la revolución china. Tras los pastelitos que prescribió María Antonieta a los pobres, la revolución francesa. Tras la dictadura de Leopoldo Galtieri, la cacería política perpetrada por parte de sus antiguos aliados.
Represión judicial
Hay otros que se ofenderán y tratarán de acudir a la vía judicial. Allí es donde tu uso de las palabras es importante. Realmente puedes decir lo que te venga en gana, pero debes decirlo con estilo. Podrá parecer que carece de contundencia de palabras, pero en realidad no es así. Decir "eres un estúpido que sólo puede meter la pata" suena más golpeado y ofensivo que "has cometido un craso error". La primera forma no requiere mucha cultura ni vocabulario. La segunda es mejor, pero dice lo mismo.
Aunque acusar personas pareciera la manera de acabar con los problemas, imponiendo disuasivos y castigos ejemplarizante, y hablar de procesos parece servir para evadir responsabilidades personales, en realidad no es así. Un fraude sucede cuando hay fallas en el proceso que permiten el fraude. Cerrar puertas impide la entrada de los que querían entrar. Es cierto que castigar a los responsables puede disuadir de alguna manera en el corto plazo, pero si hay una puerta abierta, no será la primera ni la última vez que ocurra lo indeseado, en el largo plazo. Cuando se ataca un proceso se cubre más terreno que cuando se va detrás de la rencilla personal.
Esto lo saben los ricos. Y por eso es que a ellos no les molesta que hables mal de ellos, a como a un rey no le molestaba que el juglar de pueblo satirizara al rey. Pero sí se enojan mucho cuando les cambias las reglas.
Trata de cambiar reglas y prohibir los derivados, o trata de prohibir el shadow banking, trata de cobrarles más impuestos, y verás a los ricos saltar y financiar golpes de estado para poner dictadores, o empujar ataques terroristas, porque la violencia es el arma de los ricos.
La ley es la regla que rige el poder judicial. En lugar de ofenderles en lo personal, mejor quítales las reglas que producen miseria, que atentan contra el bienestar humano. Si quieren volverse Satanás, entonces será como si tuvieras a una dictadura detrás. O mejor aún, convence a los pocos buenos de que un pobre menos es un cliente más, y trata de que te ayuden. Si no te van a ayudar, ni modo, busca otro camino. El activismo es cosa de prueba y error.
No hay fechas ni plazos ni límites de intentos en la búsqueda del bienestar humano. En tiempos bíblicos no había mucho de lo que hoy tienes. Era una utopía en el pasado y puedes lentamente ir construyendo utopías.
Convertirse en la bestia
Cuando expulsas demonios, diablos o "satanases" pueden abandonar al poseido y poseerte a tí. Dicho de otra manera, al pelear contra una bestia puedes creerte que los medios del oponente son legítimos por el simple hecho de que los usaron. Pero en el camino eso puede convertirte en otra bestia igual a la que combatías.
Cabe añadir que la idea de "Satanás" como "enemigo" es un pco neurótico, porque en realidad las enemistades suelen ser efímeras, un satanás efímero. Japón y EUA eran enemigos mortales, y ahora son amigos a pesar de que uno le efectuó el único ataque nuclear de la historia humana al otro. La enemistad duró mientras duró el conflicto de objetivos incompatibles.
En realidad lo que interesa no es andar controlando a nadie, ni enfrascarse en juegos de poder. Lo que interesa es que tienes un objetivo, un país que deseas, y puedes pecar o puedes acertar. Los esfuerzos por jugar juegos secundarios neuróticos sólo te distraen del objetivo.
El país que queremos tendría que mantenerse en tu mente, para que no te distraigas de camino. También tendrías que modificar tu idea de lo que quieres, si eso va a mejorar el bienestar humano. Pero eso requiere pensamiento crítico.
Al final el apocalipsis podría no ser el fin del mundo, y la guerra santa no ser tan guerra de dispara pistolas, sino una lucha interna contra la bestia espiritual que cada persona lleva adentro. Es una batalla para convertir malos en buenos, en lugar de exterminar a los malos, o convertir a los buenos en malos.
España es hoy un país de escombros sociales, un espectro de lo que fue. México también lo es. Pero en ese vacío lo que hay es un terreno limpio para construir.