Donald Trump es todo un fenómeno. No sólo ha cambiado la forma cautelosa de construir imagen política a punta de ser complaciente frente a fuerzas de lobby, sino que se ha ganado una audiencia a punta de generar controversia. ¿Cómo es que esto lleva a que hoy Trump choque con los financieros y sus colegas republicanos?
Algo cambió
Hace 50 años el modelo de economía de EUA era así:
- EUA era el centro industrial del mundo.
- El consumidor americano tenía dinero porque tenía empleo.
- El dinero del consumidor americano se usaba para comprar a las empresas americanas.
- Los ricos pagaban hasta el 90% en impuestos y eso permitía a EUA tener infraestructura de primer mundo, y aún así los ricos vivían como ricos.
- La ley Glass-Steagall evitaba que los bancos apostaran los ahorros de los ciudadanos en operaciones riesgosas.
Las cosas cambiaron y hoy son así:
- El centro industrial se movió a China.
- El ciudadano americano ve los empleos irse, los salarios ya no suben sino que bajan.
- Las empresas que venden a consumidores americanos ya no ganan tanto. Las que se desolcalizan sí ganan mucho.
- Desde tiempos de Reagan los ricos pagan cerca de un 28% y el resto se paga con deuda que los ciudadanos americanos pagarán. EUA es el país más endeudado en toda la historia humana
- Se abolió la ley Glass Steagall y ahora los bancos pueden apostar dinero de los americanos en operaciones de alto riesgo.
Pero hay una cosa adicional que cambió:
- Los porcentajes de aportes del 1% del 1% más rico de EUA ha aumentado unas 4 veces, según nos cuenta Steve Hilton. Es que el ciudadano promedio está participando menos en las decisiones nacionales, no sólo con dinero, sino con su voz y sus necesidades.
VIDEO: Politics is broken and tech can fix it | Steve Hilton, CEO Crowdpac
Los financieros no quieren que nada cambie, pues se sienten cómodos así. Los deslocalizados tampoco. Y viene Donald Trump a decir algunas cosas que contradicen esto.
Trump, candidato in pectore de los republicanos, ha clamado contra los nuevos tratados de libre comercio y los perjuicios que la globalización ha causado a los trabajadores americanos, un discurso rompedor entre los conservadores en el que ha coincidido con el izquierdista Bernie Sanders. (...) Al mismo tiempo, el organismo con sede en Washington urge a combatir la pobreza en el país más rico del mundo y reclama una subida del salario mínimo federal, ya que la situación de exclusión no solo afecta a desempleados, sino a muchas personas con trabajos pero sueldos miserables. "La necesidad de abordar la pobreza es urgente", dice el Fondo. Uno de cada siete estadounidenses vive en situación de pobreza, uno de cada cinco si se trata de niños. Y tener un trabajo ya no es garantía de anda, ya que alrededor de 40% de los pobres trabajan. Así que en organismo reclama un trato fiscal más favorable y una subida del salario mínimo federal. - El FMI alerta contra el proteccionismo que agita Donald Trump
Por supuesto, esto pone sobre la mesa el debate de si los empleos deben tener dueño. El concepto de propiedad en el mundo anglosajón es tan extraño, que incluso extienden la propiedad a las ideas con batallas sobre copyright y trademarks. ¿Debe o no extenderse a los empleos?
Cuando miras lo que ha causado esa fuga de empleos, lo que miras es que por años la Reserva Federal imprimió dinero (en papel o digital), toneladas de dinero, al punto de que hoy hay suficientes dólares para una hiperinflación planetaria. El modelo que había en la guerra fría era producir dinero, exportarlo a países pobres, donde se absorbía la inflación empobrecedora del tercer mundo, y el dinero era captado por empresas americanas que se traían de vuelta el dinero y lo enterraban en el cofre de tesoro del mundo financiero. El dólar se mantuvo caro a punta de exportar inflación, y como los Chicago Boys sostenían que la curva de Phillips no se cumple, entonces descartaron que la movida trajera desempleo a los EUA.
Los neokeynesianos descubren que si se cumple, pero sus efectos son acumulativos. Pero con la ideología microeconómica predominante en los EUA, nadie se dio cuenta, hasta que fue demasiado tarde.
Tentación
Al encarecer el dólar las empresas pagan más, tanto en salarios como otros gastos de operación, y los países empobrecidos que absorbieron inflación, tienen trabajadores más baratos y menores costes. la brecha es tan tentadora que invita a las empresas a irse. Pero, ¿es posible mover empleos de un país con ciudadanos americanos educados y reemplazarles con ciudadanos pobres de otros países? Si, pero se necesita hacer varias cosas:
- Dar estructura al empleo para simplificar y estandarizar tareas.
- Construir entrenamiento para transmitir la estructura al trabajador pobre.
- Colocar jefaturas americanas en países deslocalizados para garantizar que la estructura se mantenga en la operación en el país deslocalizado mientras dure la transición.
- Llevar a cabo proyectos de deslocalización que durarían 5 años en recuperar la inversión de la deslocalización.
Dicho de otra forma, los empleos se han ido de los EUA por la política monetaria que Ron Paul llamó "hegemonía del dólar". Lo embargos comerciales, otrora signo de poder económico, en realidad eran bandazos empobrecedores que acumulaban el efecto neokeynesiano.
Y aunque la globalización empieza en los 1970, fue a partir del año 2000 que la brecha se volvió tan irresistible, que aún sin crisis hipotecaria el desempleo se habría venido abajo. La crisis de 2008 sólo vino a acelerar el proceso. La deslocalización es una corrección neokeynesiana que restaura la curva de Phillips. Había reventado la burbuja de la hegemonía del dólar. Y los empresarios cayeron en la tentación.
Recuperación
¿Por qué no se recupera EUA? Porque la recuperación implicaría hacer más rentable la economía real que el cofre de tesoro del mundo financiero, y eso empujaría la salida de los dólares de ese cofre, empujando algo similar a lo que le ocurrió al imperio español bajo la regencia de Felipe II. Inflación descontrolada y un siglo de crisis. Es que la Reserva Federal imprimió mucho dinero, y creyó que enterrarlo en el sistema financiero era una manera de librarse de los problemas que tuvo Felipe II. Claro, a felipe II se le perdona porque no había ciencias económicas. En 2008 lo que había era sectas económicas (economía neoclásica con doctrina de cisne negro y modelos esotéricos con adefesios estadísticos con "overfitting") y predicadores económicos (expertos), y por eso nadie vio venir la crisis, y por eso Yale y harvard que enseñaban economía al mundo tuvieron pérdidas.
Y como los adinerados modernos en EUA son exactamente los que están bien con el sistema actual, y no tienen ganas de que cambie, es lógico que se asusten de que venga un Donald Trump nacionalista con comentarios que amenazan su zona de comfort.
El esbirro FMI
La sociedad anglosajona siempre ha tenido estructuras de poder con jerarquías ocultas, que evitan apuntar responsabilidades directas a los autores intelectuales. Y por eso no ves que los que se opongan sean los banqueros americanos o la reserva Federal, sino que usan al esbirro del FMI para transmitir el mensaje, el mismo FMI que recetaba austeridad empobrecedora y bajada de salarios y gasto social a España, Argentina, Grecia, Somalia y venezuela, para "combatir la crisis de deuda", y ahora frente a la crisis de deuda de EUA receta lo contrario, subida de salarios mínimos (intervencionismo estatal hacia los trabajadores, una medida otrora considerada socialista en EUA).
Está claro que o el FMI tiene trato diferenciado hacia EUA (receta siempre lo contrario de lo que receta a otros países), o no saben nada de economía.
Controversia
Entonces viene Trump a hablar de querer reversar los movimientos de 15 años de globalización, y vemos un choque de posturas. Sin pelos en la lengua, sin medias tintas, imagen de "hombre fuerte", parece ser lo que agrada al ciudadano americano que no se preocupa tanto del trasfondo operativo o político de sus posturas que se oponen a un establishment que financia campañas políticas.
Que haga lo que dice es otra cosa, pero parece cautivar a una audiencia. No es que haya que estar de acuerdo con lo que dice Trump, pero hay que reconocerle que navega de manera astuta en el mundo de la política. Y eso cambia los paradigmas de la política de los EUA.
¿Quién ganará las elecciones? Dicen que cada pueblo tiene los gobernantes que se merece.