Hace meses me releí unos posts que escribí sobre Argentina y he pensado en si se podría invertir en Argentina pero de entonces a aquí ha sucedido algo que lo cambia todo, ha sucedido esto, bueno este:
Este es el muy probablemente futuro presidente de Argentina. Ese país que justo antes de la I Guerra Mundial tenía un pib per cápita de los más altos del mundo, que pudo ser tan rico y poderoso como los EEUU pero que fue maldecido por los dioses con ese castigo bíblico que fue Juan Domingo Perón, en alguna ocasión he dicho que la única solución para Argentina sería enviar un Terminator al pasado que matara a la madre de Perón, pero vamos como que no lo veo posible.
Los peronistas son una lacra destructiva que pavimentaron el camino del infierno con buenas intenciones, una de las frases más peligrosas que jamás he escuchado es esta:
“Donde hay una necesidad nace un derecho”
Y es peligrosa porque las necesidades son infinitas pero los recursos son limitados y claro la lúgubre ciencia económica casa mal con esas afirmaciones populistas que prometen todo a los “necesitados” pero que detraen todo eso de los “productores”. El límite de los derechos tiene que estar en el presupuesto equilibrado y no podemos estirar hasta el infinito los impuestos que cobramos a los productores porque los cansamos y al final no hay nada que repartir, si alguien tiene alguna duda solo tiene que mirar la historia económica de Argentina.
Argentina con un modelo liberal consiguió aumentar su población y su PIB y la renta per cápita era muy superior a muchos países europeos, en 1920 el PIB de Argentina era el 80% del de EEUU y ahora es el 2%, en 1895 el PIB per cápita de Argentina era el más alto del mundo, en el siglo XIX Argentina tuvo un marco legal y político proinmigración, pro libre empresa, con un estado mínimo alejado del proceso productivo y se limitó a crear el marco jurídico apropiado dentro de un Estado de derecho, y todo funcionó muy bien, hasta que llegó el ínclito Juan Domingo Perón, que se pulió el modelo liberal y apostó por una mezcla de socialismo, intervencionismo, modelo económico fascista inspirado en Mussolini, y bueno a partir de ahí ya saben, déficit, inflación, expansión monetaria, crisis, emigración, en fin desastre tras desastre hasta la actual situación de casi hiperinflación.
Hayek escribió un libro titulado “Camino de servidumbre” en el que nos explica como las buenas intenciones puede acabar destruyendo una economía y puede que hasta la democracia en sí misma, se interviene la economía, no se deja a la oferta y a la demanda ajustar, se dirige la economía, se crea un sector público inmenso, se incurre en déficit sistemático, poco a poco la economía se degrada, caemos en espirales inflacionistas y el pib no crece como crecen en otros países, al final más de medio país esta subsidiado vive del Estado y su voto está condicionado y no es libre y llegamos a la servidumbre, Argentina lleva 100 años aplicando políticas antimercado basadas en los principios tan bondadosos como cándidos de los peronistas, y ha cerrado el círculo que ese libro avisaba, el Reino Unido estuvo a punto de llegar a algo así en la década de los setenta del siglo pasado pero algo paso en los ochenta, pero esa no es la historia de hoy.
El tema es que Argentina está desesperada, ya ha probado todos los grados de intervencionismo económico posibles desde la izquierda a la derecha todos han aplicado sus retóricas antimercado y pro derechos nacidos de necesidades y nada ha funcionado, cada vez peor, con aberraciones como la de 2001 y su corralito que provocó la exportación de argentinos al mundo.
Aquel corralito nunca fue bien entendido, para muchos fue una cárcel pero en realidad lo que Cavallo el ministro de De la Rúa quería era reestructurar el sistema monetario, tenían un problema de deuda como tuvimos en Europa en 2010, y con ajustes fiscales se podía recuperar la confianza, pero se optó por pesificar y abandonar el equilibrio uno a uno con el dólar y eso trajo los déficits y la inflación desbocada. Tras eso Argentina lo ha probado casi todo y caída en la desesperación parece va a elegir a Javier Milei un economista que propone dolarizar la economía y eliminar el Banco Central y obviamente cuando oigo esas palabras no puedo más que sentir simpatía por la idea, pues es el verdadero problema es el déficit público y la creación de dinero de la nada por el banco central argentino que genera la inflación.
La idea de dolarizar la economía funcionó bien en Panamá y en Ecuador, ¿funcionará en Argentina?, ¿Y cuál será el tipo de cambio en la conversión? El proceso es realmente complejo y no tengo claro como lo llevarán adelante, hablan de hacerlo de modo progresivo, hablan de hacerlo rápidamente, es un cambio estructural enorme.
Pero bueno supongamos que dolariza a un tipo de cambio concreto y consigue controlar la inflación, si el estado tiene déficit ya no podrá emitir moneda nueva el banco central y no tendremos ese impulso inflacionista, pero ¿podrá conseguir dólares para financiar el déficit?
De hecho el plan de Milei habla de ajustes estructurales del gasto público o sea reducción del gasto público, vamos presupuesto equilibrado, ¿le dejarán reducir el gasto público los argentinos? Porque sí, puede que te cargues la inflación pero no puedes tener déficit porque no tienes la posibilidad de emitir dólares.
Toda esta introducción no es para mostrarme a favor o en contra de Javier Milei, siempre les he dicho lo mismo, aquí estamos para ganar dinero, somos precioaceptantes y nuestra patria, nuestra bandera y nuestra religión acaban en nuestra cuenta corriente, se trata de ver si podemos beneficiarnos económicamente de esta Revolución que puede darse en Argentina. En realidad es difícil invertir en Argentina, difícil encontrar ETF abiertos a inversores no profesionales, pero tenemos los ADR argentinos que cotizan en el Nasdaq:
De uno de ellos ya hemos hablado alguna vez en el blog, BMA Banco Macro.
¿Podemos intentar una apuesta convexa a que gana Milei y los mercados se disparan a corto plazo felices por la llegada a la Casa Rosada de un amigo de la libertad y los mercados?
Los más aguerridos tienen aquí una idea de negocio, pero el problema de Argentina no es que tenga un cáncer es que tiene metástasis, el intervencionismo lo ha impregnado todo, ¿podrá el gobierno de Milei (si llega al gobierno) reducir brutalmente el gasto público sin manifestaciones más brutales aun que le obliguen a dimitir o a reducir sus ambiciones?, ¿lo matarán antes de las elecciones o después a lo Kennedy?, veo muy muy complicado que pueda llevar adelante su proyecto, puede haber un momento de euforia si vence las elecciones pero después todos los lobbys que viven del gasto público se enfrentarían violentamente al plan de ajuste del déficit.
La conversación en la película Martin (Hache) entre Federico Luppi y Juan Diego Botto es clave, Argentina es una trampa, cuando te hacen creer que tiene arreglo entonces es cuando te han engañado de verdad, no podemos meterle ni un euro a largo plazo, el plan Milei podría funcionar pero tienen tantos problemas que arriesgar no funciona, como mucho lo dicho algo de euforia tras la noticia si triunfa pero poco más:
(Por cierto también interesante la conversación sobre la patria, lo digo por todos aquellos que se emocionan con la nación o la nacionalidad)
Disclaimer
Ya saben que no puedo aconsejar legalmente, comprar esos ADR argentinos del Nasdaq, ustedes verán, dios me libre aconsejar porque ni puedo ni quiero, pero bueno si quieren hacer una apuesta convexa, pues adelante, pero no veo nada fácil que puedan arreglar ese país trampa. Pero bueno iremos viendo la evolución electoral del país.