Mis últimas entradas en Rankia han versado sobre los tipos de la deuda americana al 5%, comentando la opinión tanto de Howard Marks como de Yardeni y en el análisis técnico semanal les hablaba en la entrada en la mejor semana del año, después de los negros octubre.
Mientras preparaba mi intervención en Rankia Markets, los tipos de interés del diez años americano bajaron en un pis pas del 5 al 4,5%, el dólar se depreció y las bolsas se dispararon.
Creo que el techo de los tipos ya lo hemos visto, así que toca revaluar nuestra cartera y ver qué activos se comportan mejor cuando finaliza la subida y si están baratos por valoración.
Veamos como se comportan los activos después de la última subida de tipos.
¿Es hora de reducir el efectivo ante la bajada de tipos que se están produciendo?
Desafortunadamente, el efectivo pierde valor con el tiempo. Con un billete de 50 euros recibido hoy se pueden comprar menos cosas que con el mismo billete recibido hace uno o dos años. Las acciones tienen una larga historia de aumento de precio. Muchas pagan dividendos crecientes además de revalorizarse. Los bonos a mediano y largo plazo pagan tipos de interés más altos que los fondos del mercado monetario cuando la curva de rendimiento no está invertida como ocurrirá cuando la recesión Europea se asiente. Además, los bonos también pueden subir de precio, especialmente cuando los rendimientos caen. Históricamente, tanto las acciones como los bonos han creado más riqueza para los inversores que los fondos del mercado monetario después de que la Reserva Federal dejó de subir los tipos, como nos muestra el gráfico de Black Rock.
Soy poco dado de ir al casino y apostar por el blanco, rojos y negros y sé que el efectivo tiene un papel en los patrimonios para emergencias y gastos inesperados (tres años de gastos corrientes podría ser una buena medida), además de que reduce la volatilidad y los grandes gestores siempre tienen liquidez en sus carteras, pero a largo plazo es claramente perdedor.
A los activos antes mencionados, añadiría acciones de pequeña capitalización, inmobiliario y emergentes, barato barato.
Pero si Vd. cree que la recesión está a la vuelta de la esquina y los tipos de interés bajarán y bajarán, compre empresas endeudadas como las utilities.
Ahora sólo hace falta elegir los fondos y/o las acciones concretas. ¿Colaboramos entre todos si este análisis os ha sido útil?
¿Dónde irá este dinero cuando los fondos monetarios bajen de rentabilidad?
Si es cierto que el ciclo de subidas de tipos de interés ha llegado a su fin, los datos históricos nos indican que podría ser un buen momento para que los inversores vuelvan a incluir la renta variable en sus carteras de inversión. Si atendemos a los periodos anteriores en los que la Reserva Federal dejó de subir los tipos, la rentabilidad media de la renta variable global en los siguientes 300 días fue del 11,8%, frente a la rentabilidad del 4,3% del efectivo. De hecho, la gran cantidad de dinero que podría volver a los mercados de renta variable contribuiría al repunte del mercado.
Veamos la rentabilidad en otros episodios semejantes.
Mientras preparaba mi intervención en Rankia Markets, los tipos de interés del diez años americano bajaron en un pis pas del 5 al 4,5%, el dólar se depreció y las bolsas se dispararon.
Creo que el techo de los tipos ya lo hemos visto, así que toca revaluar nuestra cartera y ver qué activos se comportan mejor cuando finaliza la subida y si están baratos por valoración.
Veamos como se comportan los activos después de la última subida de tipos.
¿Es hora de reducir el efectivo ante la bajada de tipos que se están produciendo?
Desafortunadamente, el efectivo pierde valor con el tiempo. Con un billete de 50 euros recibido hoy se pueden comprar menos cosas que con el mismo billete recibido hace uno o dos años. Las acciones tienen una larga historia de aumento de precio. Muchas pagan dividendos crecientes además de revalorizarse. Los bonos a mediano y largo plazo pagan tipos de interés más altos que los fondos del mercado monetario cuando la curva de rendimiento no está invertida como ocurrirá cuando la recesión Europea se asiente. Además, los bonos también pueden subir de precio, especialmente cuando los rendimientos caen. Históricamente, tanto las acciones como los bonos han creado más riqueza para los inversores que los fondos del mercado monetario después de que la Reserva Federal dejó de subir los tipos, como nos muestra el gráfico de Black Rock.
Soy poco dado de ir al casino y apostar por el blanco, rojos y negros y sé que el efectivo tiene un papel en los patrimonios para emergencias y gastos inesperados (tres años de gastos corrientes podría ser una buena medida), además de que reduce la volatilidad y los grandes gestores siempre tienen liquidez en sus carteras, pero a largo plazo es claramente perdedor.
A los activos antes mencionados, añadiría acciones de pequeña capitalización, inmobiliario y emergentes, barato barato.
Pero si Vd. cree que la recesión está a la vuelta de la esquina y los tipos de interés bajarán y bajarán, compre empresas endeudadas como las utilities.
Ahora sólo hace falta elegir los fondos y/o las acciones concretas. ¿Colaboramos entre todos si este análisis os ha sido útil?
¿Dónde irá este dinero cuando los fondos monetarios bajen de rentabilidad?
Si es cierto que el ciclo de subidas de tipos de interés ha llegado a su fin, los datos históricos nos indican que podría ser un buen momento para que los inversores vuelvan a incluir la renta variable en sus carteras de inversión. Si atendemos a los periodos anteriores en los que la Reserva Federal dejó de subir los tipos, la rentabilidad media de la renta variable global en los siguientes 300 días fue del 11,8%, frente a la rentabilidad del 4,3% del efectivo. De hecho, la gran cantidad de dinero que podría volver a los mercados de renta variable contribuiría al repunte del mercado.
Veamos la rentabilidad en otros episodios semejantes.