Hace más o menos un año que no publico nada sobre mi cartera. En aquellas fechas, después de leer algunos comentarios que, aunque no iban dirigidos a mí, criticaban el hecho de que mucha gente publicara sobre la composición y el rendimiento de su cartera, me plantee si valía la pena publicar sobre ella y llegue a la conclusión de que no debía hacerlo.
¿PORQUÉ NO PUBLICAR SOBRE LA CARTERA?
A mí no me aporta absolutamente nada, no vendo nada y no tengo que demostrar nada a nadie, por lo tanto no tiene sentido que la publique.
Desde el punto de vista del lector ¿qué puede aportarle?: ¿La oportunidad de copiar las empresas en que invierto? Ya hay mucha gente que recomienda empresas en todos los medios y puede utilizarse como referencia, por otra parte, si fuera este el caso, solo se podrían copiar las empresas que la componen a toro pasado, pero como decía P. Lynch, no se podría saber ni cuando compro, ni cuando vendo o aumento o disminuyo posiciones. También podría servir para tener la oportunidad de criticarme si no obtengo una rentabilidad decente pero ¿dónde lleva eso?¿qué sentido tiene?, para cotillear y meterse con el prójimo hay otras opciones que cubren mejor esa función, ahí están los políticos, futbolistas, famosillos de la tele y demás gente de buen vivir que dan mucho más juego.
SOBRE LA “INDUSTRIA” Y LOS INVERSORES
Antes publicaba los resultados de la cartera porque quería demostrar que invirtiendo directamente se puede ganar más dinero que entregándolo a la “industria”, pero una vez efectuadas algunas publicaciones el objetivo ya estaría cubierto y además, la mayoría se desacreditan ellos solos.
Es cierto que suelo meterme con la “industria”, pero es por una cuestión defensiva. Como inversor, creo que han destruido y sustituido la lógica de la inversión por su lógica de captación. Se han impuesto una serie de “normas morales” o “dogmas de inversión” por las que siempre se considera como algo bueno la diversificación, la liquidez, el rebalanceo temporal, la des-correlación, el comprar barato; como malo se considera la volatilidad, la deuda, etc.. y además se incluyen varios prejuicios como asimilar el riesgo con la renta variable y la seguridad con la renta fija; que debemos tener determinadas proporciones entre distintos tipos de activos, etc... Estas “verdades” no son absolutas, por mucho que se empeñe la “industria”, aunque pueden ser buenas para algunos inversores particulares, pueden no serlo y deben ser cuestionadas todas ellas.
Para un inversor, la inversión es su negocio, para la “industria” la inversión es su actividad a través de la cual obtienen su negocio basado en las comisiones. La lógica es diferente.
En cualquier caso, creo que es mejor publicar informes de empresas basados en el análisis para que cualquier inversor que invierta directamente en empresas y le interese, los utilice si quiere. Eso es lo que estoy haciendo.
Cuando estudio una empresa mi intención es invertir en ella, si la veo buena invierto y en caso contrario, aprendo entendiendo su negocio e intento transmitirlo mediante informes que sean entendibles por cualquier inversor particular.
SOBRE EL ANÁLISIS DE EMPRESAS
No debemos perder de vista que el análisis no es un fin en sí mismo, solo es un medio para entender la empresa y su negocio y a partir de ahí, invertir con mejor conocimiento de causa. Se puede ser el mejor del mundo analizando empresas, pero si el análisis no sirve para encontrar las mejores empresas y descartar las malas, el análisis no sirve para nada. El mejor análisis es el que nos lleva a la mejor empresa y debe traducirse en mejorar el rendimiento de la inversión. No obstante hay que leer y entender lo que se lee. Si se lee por encima y se interpreta lo que uno quiere entender, difícilmente se podrán obtener resultados coherentes.
Todos los meses publico los “precios objetivo” de todas las empresas que sigo. Están basados en los análisis y/o el seguimiento permanente que realizo cada trimestre de todas las empresas incluidas y en muchos casos, los precios están muy alejados de la cotización, pero hay que leer las notas y hay que leer el informe y preguntar si procede. El precio objetivo solo es un número y el informe, aunque (como decía) está basado en el análisis, solo es mi opinión e interpretación de la realidad de la empresa. Sin embargo, tanto los precios como los informes, no los publico para contentar al lector y confirmarle que está acertado en su inversión, tampoco lo hago para fastidiarle cuando las conclusiones no coinciden con sus intereses. Son los precios que creo que valen las empresas en función de su negocio y de su capacidad para hacerlo crecer. En cualquier caso, siempre estoy abierto a cualquier opinión o apreciación distinta de la mía si aporta algo para mejorar el conocimiento de la empresa. El fin último de todos mis análisis son la inversión real y no hay otra historia. No tengo ningún interés en que dejen en buen o mal lugar a cualquier empresa, ni a cualquier analista o inversor, solo digo lo que veo.
Creo que lo mejor que puedo hacer, tanto por los inversores que invierten directamente como yo lo hago, como por mí mismo para mejorar como inversor, es publicar los precios para tener una visión general y los informes de las empresas para ofrecer una orientación más concreta. Si los inversores no nos apoyamos nosotros mismos, nadie lo hará, la “industria” tiene sus propios intereses.
SOBRE EL ESTILO DE INVERSIÓN
Mi cartera no es ningún secreto, ni pretendo ocultarla para no ser criticado. Me da lo mismo lo que piensen los que quieren cotillear, tanto si acierto como si me equivoco en mis inversiones, es mi problema. No obstante, ahora, para acallar algunos comentarios y sin que sirva de precedente porque no tengo intención de volver a hacerlo, voy a publicar mi cartera actual.
Sigue una lógica de inversión adaptada mi estilo, sin tener en cuenta la ortodoxia de la “industria”. Está muy concentrada, ahora algo más que hace un año y pico cuando la publicaba. Aunque me siento muy cómodo con la cartera concentrada y siempre la he tenido así, no es algo que elijo yo, entran las empresas que creo que deben entrar y si encontrara 100 empresas muy buenas, esa sería mi cartera, pero debo ser muy torpe porque no encuentro tantas empresas buenas y tal vez por ello estoy muy concentrado en pocas empresas. No obstante aun en el caso de tener 100 empresas, no sería una cartera diversificada sino, concentrada en 100 empresas porque cuando compro no tengo en cuenta el que ya tenga otra que esté más o menos correlacionada, o sea del mismo sector o país, una buena empresa es una buena empresa, si me equivoco pago y si acierto cobro. Por otra parte, el peso de cada empresa en el conjunto de la cartera no lo tengo predeterminado, si confío en una empresa meto lo que puedo o lo que tengo, si no confío totalmente no entro, no es cuestión de entrar con menos dinero por si acaso, simplemente no entro. Tampoco dejo dinero en liquidez porque estoy más tranquilo si está invertido en una buena empresa que gane dinero, el dinero en caja no aumenta y si está en empresas que aumentan su valor, aunque la cotización baje, el valor aumenta. Evidentemente, cuando la bolsa baja pensamos que si hubiéramos estado en liquidez no estaríamos perdiendo, pero debemos hacer la misma reflexión cuando la bolsa sube y como nunca se sabe lo que hará la bolsa, si te comes las bajadas, también te comes las subidas. La bolsa a largo plazo siempre sube y en consecuencia, si el dinero está en caja NO recoge estas subidas. Tampoco invierto buscando oportunidades por diferencias de precios y en consecuencia no necesito la liquidez por ese motivo. En principio compro para no vender, pero si una empresa deja de gustarme, no me lo pienso y va fuera. La volatilidad en los precios me es indiferente, y no la veo como una oportunidad a aprovechar porque en mi caso, no es el precio lo que determina la compra. Utilizo el apalancamiento y lo considero algo normal en inversión. No hay que tener miedo a endeudarse para invertir, no es lo mismo que endeudarse para consumir, tampoco es lo mismo invertir en empresas que “invertir” basándose en los precios de la bolsa. ¿Alguien conoce alguna empresa que no asuma deuda para invertir?.
No estoy diciendo que esta es la forma en que hay que invertir, ni siquiera digo que sea la mejor, cada inversor debe encontrar el estilo que mejor se le adapte e ir evolucionando si lo cree conveniente, pero hay vida más allá de la lógica de la “industria”, no hay dogmas en inversión y debemos adaptar nuestro estilo de inversión a nosotros mismos, cuestionando todos los prejuicios de la “industria”. Con cualquier estilo se puede ganar y/o perder dinero.
Por mi parte llevo así unos 30 años y sigo vivo, una rentabilidad mayor o menor puede ser creíble o no, pero cuando se está tanto tiempo en esto, o se gana dinero o se está muerto.
Para reflexionar: La bolsa sube y baja, pero la bolsa no es nada, ni el índice tampoco, invertimos en empresas concretas, aquí no valen las estadísticas, se trata de elegir las mejores y estas empresas no se reflejan en las medias estadísticas, tanto las buenas como las malas circulan por los extremos y no salen en la foto. A finales de 2007 el Ibex tocó máximos en 15.890 (ahora 9.200; -42%) y con dividendos 25.350 (Ahora 26.150; +3%). Aunque hubiéramos comprado en aquellas fechas de gran euforia, mientras los Ibex han evolucionado de la forma indicada, CIE que entonces estaba a 8€, ahora está a 24€ (x3), Amadeus salió a cotizar en Abril de 2010 a 11€/Acc y ahora está a 70€ (x6) y Alphabet que en los altos de finales de 2007 cotizaba a 346$, ahora está 1.100$ (x3).
LA CARTERA:
Tiene dos tipos de empresas y la base está formada por tres de ellas que considero excelentes, por orden de entrada son: Amadeus, Cie Automotive y Alphabet.
Amadeus:
Cuando la compré me parecía algo cara, pero me gustó mucho y entré. Si es buena y bonita, difícilmente será barata. Desde entonces, siempre me parece que está cara y pienso que “este año no subirá”, pero siempre me contradice, cosa que me alegra.
Hubo una vez, alguien que sabía que la llevaba en cartera, al darse cuenta de que el precio al que cotizaba era bastante mayor que mi precio objetivo me preguntó ¿Por qué no vendes Amadeus, si piensas que vale menos que la cotización?. Mi respuesta fue: ¿Por qué voy a despedir al mejor trabajador que tengo? ¡Porque rinde más de lo que yo mismo esperaba!. El pasaje del hombre y el perro sobre el que escribió Kostolany es muy ilustrativo en este caso, el perro iba muy por delante, pero yo invierto en el hombre, no puedo saber lo que hará el perro, pero el hombre camina a buen ritmo, incluso a mejor ritmo del que yo mismo esperaba, dejemos que el perro vaya y venga como le venga en gana, el hombre camina a su marcha y es muy buena.
El precio medio de compra lo tengo en 30,39€/Acc y los fondos comprometidos por acción ascienden a 26,1€/Acc. La llevo unos 5 años en la cartera y por precios obtiene una rentabilidad anualizada del 20% y total del 150%. Mi ROE en el momento de la compra estaba en el 4,7% ahora está en 9-9,5%.
Mi ROE lo calculo de la misma forma que el ROE de la empresa, solo que en vez de utilizar en el denominador el valor contable por acción, utilizo mi precio medio de compra. Es decir BPA dividido entre mi precio medio de compra.
Obtengo el precio medio de compra calculando la media ponderada entre los distintos precios de compra y el número de acciones de cada entrada. Los tiempos de la inversión para calcular el rendimiento, los ajusto también con la media ponderada entre el número de días que tengo determinada cantidad invertida y con ello obtengo el dinero medio invertido en la empresa durante el total de días que dura la inversión (en la caso de Amadeus 1.818 días al 15/6/2019)
En el caso de haber alguna venta (en Amadeus no hay ventas) enfrento el precio de venta con el precio medio de compra. No utilizo el método de Hacienda consistente en enfrentar la primera venta con la primera compra y lo hago así porque de utilizar el método de hacienda, la venta me cambiaría el precio medio de compra y no veo lógico ni razonable que las ventas provoquen cambios en el precio medio de compra. Hacienda hace sus números según sus intereses para cobrar más impuestos, yo hago los de hacienda para la declaración de la renta, pero hago mis números en el control del seguimiento para obtener la información que necesito, en función de mis intereses. El resultado es el mismo, solo cambia la percepción de beneficio realizado o latente, si cambiara el precio de compra por la venta, falsearía todos los cálculos referidos al precio medio de compra.
CIE Automotive:
La llevo algo más de dos años a un precio medio de compra de 21,6€/Acc y unos fondos comprometidos de 17,5€/Acc. Es la única que recuerdo que tuve en cuenta el precio para comprar y metí la pata, cuando la detecté estaba a 18-18,5€/Acc y llevaba meses con ese precio, pero como soy tan listo me esperé a que bajaba, al final pasé del precio y compré a 21,6€/Acc. Mi ROE en el momento de la compra era del 7,7% y ahora está en el entorno del 10%. La rentabilidad anualizada está en el 13% y a origen el 29%.
Las rentabilidades siempre las calculo entre el precio medio de compra y la cotización actual, más los dividendos, menos los gastos. Pero utilizo otras métricas para obtener la información adicional que me interesa: Rentabilidad incluyendo los resultados de las ventas realizadas y sin incluirlas, rentabilidad por cotización, por dividendos, por gastos y por dividendos y gastos.
Los 17,5€/Acc de fondos comprometidos es el importe que he pagado por CIE, más los gastos, menos el dinero que he recibido por dividendos y, en este caso, restando también el regalo de las acciones de Dominion. Ese es el riesgo que tengo por cada acción de CIE y más que ese dinero no puedo perder, pase lo que pase. Aunque no es el caso de CIE porque no he vendido nunca nada, en caso de haber vendido, en los fondos comprometidos no incluyo el resultado por acción de las ventas. Una vez se vende una parte de las acciones, las vendidas dejan de formar parte de la inversión en la empresa en cuestión y ese rendimiento lo llevo a un saco a parte, que no tiene ya mayor interés que contabilizar el rendimiento obtenido por las ventas.
Este importe (17,5€/Acc) es una forma de calcular similar a como contabilizan las empresas sus inversiones, los dividendos que cobran por sus inversiones no influyen en sus resultados (sí influyen en sus flujos) pero se van restando del coste de las respectivas inversiones y cuando se venden, el beneficio aflora por diferencia entre el precio de venta y el precio de compra, más gastos y menos los dividendos cobrados.
Alphabet
Esta es la tercera empresa de base de la cartera y la última incorporada. Con un precio medio de compra de 1.116$/Acc y unos fondos comprometidos de 1.122,7$/Acc, está dando Mi ROE de 4,2% y la rentabilidad en el año es ligeramente negativa -2,6%. Cuando menos tiempo ha transcurrido desde la compra, en estas empresas de gran crecimiento que se paga por ellas varias veces el patrimonio, Mi ROE es bajo y es normal, lo importante es la evolución que debe ser creciente todos los años y significa que el valor, medido por los resultados que obtiene la empresa sobre el precio medio de compra, va creciendo continuamente y eso espero que hará Alphabet, de la misma forma, pero probablemente con más intensidad, que lo están haciendo Amadeus y CIE.
Alphabet está inmersa actualmente en varios líos, en Europa quieren aplicar la tasa Google, a ella y a otras empresas similares, en EE.UU. está siendo investigada por monopolio. No va a pasar nada y si pasa no afectará significativamente a la empresa ni a los accionistas, ahora mismo estamos metidos en una guerra comercial, lo que se está decidiendo es quién será el líder mundial del futuro y el control de los datos a gran escala es y será un factor determinante, el país que controle la información será el líder mundial. Para tener la información hay que controlar los datos y la tecnología para el control de los datos no la tiene el estado, la tienen las empresas y Google es la número uno mundial recogiendo y organizando datos para obtener las respuestas adecuadas. EE.UU. no va a permitir que ningún país perjudique a Google más allá de un lavado de cara, porque comprometería su liderazgo, tampoco lo van a hacer ellos mismos. Alphabet ya está haciendo cambios internos para que la corte de EE.UU. pueda salvar las apariencias sin afectarle su negocio, aunque al final sea dividida en algunas partes. Google es la punta de lanza que permitirá que EE.UU. conserve su liderazgo mundial en el futuro y nunca permitirán que la punta de la lanza quede machacada, ni mucho menos serán ellos mismos quienes lo hagan.
No confio en la “lógica” de los políticos para invertir, si hubiera sido europea no hubiera comprado. En Europa parece que tengamos instinto suicida y cada país tira para sus intereses, pero EE.UU. en esto no creo que me defraude y se dé un tiro en el pié.
Independientemente de estas consideraciones macro, Alphabet como empresa, es excelente, cuando la estudié, antes de calcular el precio ya tenía decidido que debía entrar en la cartera al precio que fuera. Todas sus cifras son propias de un monopolio, es una empresa “cero defectos” que está y estará presente y a la cabeza de todos los cambios que posiblemente se van a producir en el mundo, (vehículos autónomos, 5G, comunicaciones, etc…) la tecnología es de desarrollo propio y cuando ve que alguna empresa tiene una tecnología superior en algún campo que ella misma intenta desarrollar una solución, simplemente la compra, la potencia con su propia tecnología y la paga al contado con su enorme caja que asciende a unos 130.000 M$.
Luego tengo otras tres empresas con otras características. Son empresas de las que espero un gran aumento en la cotización a corto-medio plazo y en estas voy a cambiar el orden hablando primero de la última que entró. Son OHL, Sabadell y Santander.
OHL
Es una empresa que está inmersa en un proceso de reestructuración creible, está comprada a un precio inicial de 0,68€/Acc y al aumentar posiciones, el precio medio de compra actual está en 0,77€/Acc. Lleva en la cartera desde mitad de Noviembre de 2018. Nada que decir, en estas empresas o te lo crees o no te lo crees y yo me lo creo.
En estas empresas suelen aparecer líos del pasado que pueden perjudicar la cotización, pero creo que no van a ser determinantes y OHL saldrá de esta con nota porque ahora su gestión está muy bien encaminada.
Sabadell.
La llevo tres años en cartera, con un precio medio de compra de 1,14€/Acc y unos fondos comprometidos de 1,03€/Acc. Este año he aumentado posiciones por debajo del euro. Alguien me dijo entonces en un comentario “¡no tendrás cojones de comprar ahora!”, pues bien, aunque no los uso para eso, precisamente en aquellos días estaba comprando. Sabadell se ha visto muy perjudicado en 2018 por los resultados extraordinarios que se produjeron en el segundo y tercer trimestre del 2018 y será a partir de los resultados de estos trimestres que se presentarán a finales de Julio y de Octubre de este año, cuando el resultado aumentará a dos dígitos altos en el 2T2019 y a tres dígitos en el 3T 2019.
Mi ROE en la momento de la compra era del 10% y ahora por ordinarios es del 16%.
En mi opinión, en el caso de los bancos, los inversores solo están considerando las dotaciones de capital y no están mirando los resultados ni la capacidad para obtener beneficios con su propio negocio sin considerar los gastos que vienen de antes. No hay que esperar ningún catalizador para que aumenten los beneficios, ya son buenos y mucho mayores de lo que indican los precios de cotización. El beneficio que están obteniendo los bancos en general y el Sabadell en particular es enorme, el BPA ordinario de 2018 fue de 0,14€/Acc y para 2019 espero 0,155€/Acc que significa que cotiza a PER 5-6. Por los resultados que va a obtener en 2019 debería cotizar alrededor de los 2€/Acc. Los gastos por deterioros son gastos ordinarios, pero su volumen no es ordinario y cada año se van reduciendo y se reducirán más porque la morosidad (4,1%) ya está en niveles muy bajos y están bien dotados (53%) y los adjudicados van despareciendo. La economía crece (mucho o poco pero crece) y los tipos negativos no les afectan apenas por mucho que lo digan en la presa, solo hay que mirar las cifras de su cuenta de explotación para comprobarlo. Sin contar los costes por deterioro que vienen de antes, solo con el negocio actual, Sabadell cotiza a PER 2,5-3.
Los bancos han estado muy perjudicados por el regulador. No sé si ha sido intencionado, pero obligarles a doblar el capital en el mismo momento en que se estaban saneando por la crisis, fue una barbaridad. Provocó automáticamente la reducción a la mitad del ROE y disminuyó sus posibilidades para dar crédito en un momento en que la economía lo necesitaba para reactivarse y salir cuanto antes de la crisis. El aumento del capital no era (ni es) necesario y la prueba evidente es que ese capital está ahí, sigue en sus balances sin haber sido utilizado. Los bancos se han saneado con sus resultados y no con el capital regulatorio. El Popular ha sido el único que utilizó ese capital, pero fue por otros problemas adicionales que tenía en exclusiva y que no vienen ahora al caso.
En estos momentos la regulación sigue perjudicando al Sabadell. Está vendiendo negocios (buenos y malos) porque el regulador no tiene otra manía que el aumento de las dotaciones de capital. Se trata de cubrir unas necesidades absurdas que no le hacen falta, ni por su propio negocio, ni por las dotaciones actuales (tiene en el 1T 2019 un CET-1 de 11,7% cuando le exigen para 2019 un 9,6%). Sin embargo estos negocios que están vendiendo ahora, podrían darle mayores beneficios ahora y en el futuro.
Resulta curioso que por una regulación que se impone para que los bancos sean más solventes, el Sabadell siendo más solvente que lo exigido y con un porcentaje de capital que es más del doble del que ha tenido en sus 140 años de historia, con todas las crisis que han pasado durante este siglo y medio, tenga que desprenderse de activos rentables sin los cuales dará menores beneficios y en consecuencia, será menos solvente.
En cualquier caso, con más o con menos capital, Sabadell es un banco rentable y lo seguirá siendo. Sin extraordinarios positivos ni negativos, en 2019 obtendrá un BPA por encima de 0,15€/Acc (más de un 300% sobre el obtenido en 2018 por los extraordinarios) y la cotización debería, como mínimo doblarse si se comporta en consonancia con sus resultados.
Santander
Santander la tengo en cartera desde hace unos 10,5 años y he hecho varias compras y ventas parciales. Actualmente la tengo con un precio medio de compra que se ha beneficiado con los scrips de 3,04€/Acc y unos fondos comprometidos de 0,70€/Acc. Para perder dinero en Santander debería vender a menos de 0,70€/Acc. Mi ROE actual está en un 16-16,5% anual que es muy buen rendimiento. La reducción de los costes de saneamiento puede provocar que doble el resultado, lo que la dejaría en un PER 4-5. Actualmente obtiene un BPA en 2018 de 0,48€/Acc y en 2019 espero 0,49€/Acc que al precio que cotiza ahora mismo se paga PER 8 que no tiene sentido. No hace falta ningún revulsivo que provoque un aumento del resultado, ya obtiene ahora mismo un buen BPA que justifica los 6€/Acc sin que pase nada nuevo. La rentabilidad anualizada en la cartera es del 3,9% similar a la del Ibex con dividendos en ese mismo tiempo y superior a la del Ibex sin dividendos que está prácticamente a cero en este mismo período.
La morosidad del Santander está en el 3,6% y tiene unas dotaciones del 68%. El comportamiento racional de su cotización debería ser de fuerte subida, pero en bolsa la racionalidad es la que es.
LA CANTERA
Bien, esta es mi cartera actual, no obstante lo más interesante de la cartera queda fuera de ella, es la cantera, son empresas que las sigo de forma especial porque tienen un gran potencial de subida por diversas circunstancias, casi todas están incluidas en la web y cuando llegue el momento, que llegará, habrá más cambios en la cartera, pero eso ya no lo publicaré, mi intención es no publicar más artículos sobre el tema porque, como decía, no le encuentro ningún sentido. En la web hay informes basados en el análisis de unas 70 empresas y cada mes voy incluyendo nuevas, allí están todas ellas y las demás, el que quiera utilizarlos puede hacerlo, la web es libre, pero …
Cada inversor debe hacer su propia diligencia y tomar sus propias decisiones de inversión.
P.D. He querido tocar tantos temas que me he enrollado y se me ha olvidado algo importante para el tema del artículo. El rendimiento de la cartera en el año, hasta hoy día 17/6/2019 es del 24,32%.