Hace unos diez mil años en el mundo había alrededor de cinco millones de personas; 9.000 años después, la cifra andaba sobre los 300 millones. Y apenas empezamos a consumir grandes cantidades de petróleo, la población mundial aumentó 5.000 millones de personas en 80 años.
Es evidente que el aumento de la población, la erradicación de un gran porcentaje de la pobreza mundial, el aumento de la esperanza de vida, la reducción de horas trabajadas y el aumento de la calidad de vida con el consiguiente aumento del consumo de energía per capita, sólo se ha podido lograr quemando enormes cantidades de petróleo.
En el momento presente, la humanidad se encuentra ante una encrucijada y tiene que elegir entre dos caminos que parecen muy diferentes, pero, curiosamente, el resultado final será el mismo en ambos casos.
Veamos las dos posibilidades:
1 – Nos creemos la gracieta de Greta de la emergencia climática. Empezamos a cerrar centrales eléctricas de carbón, por supuesto las nucleares, reducimos mucho las emisiones de CO2, le ponemos una fecha de caducidad a los combustibles fósiles y aumentamos los precios en plan salvaje de los derechos a contaminar.
2 – O, por el contrario, en poco tiempo Greta pasa de moda y nadie hace nada de todo lo propuesto (opción más probable). Aún en el caso de que el tema se mantenga saliendo por la tele, es muy probable que la gente hable mucho y no haga nada. Puede que se convierta en una moda muy parecida a la de adelgazar: todos dicen que cuando pasen las fiestas se van a tomar la dieta en serio, pero las cifras de obesidad van en aumento cada año.
Como he dicho antes, no importa si ocurre la opción 1 o la 2, el resultado es que la población mundial va a colapsar en los próximos 30 o, como máximo, 50 años.
Si se reduce drásticamente el consumo de combustibles fósiles y se reduce con fuerza el CO2, la población mundial caerá en picado. Luego hablaremos de la posibilidad de que las energías renovables puedan sustituir a los combustibles fósiles.
Si la emergencia climática no consigue reducir el consumo de crudo (opción más probable), el resultado será el mismo, pues el crudo se reducirá a sí mismo de todas formas. En Rankia hay dos blogs que nos explican con todo detalle que la producción de crudo va a disminuir mucho con bastante probabilidad.
BLOG GAME OVER
BLOG El pico del petróleo y sus consecuencias
VEAMOS LOS PROBLEMAS DE LAS RENOVABLES
Teniendo claro que tarde o temprano llegará el declive del petróleo, tendremos que analizar si con las renovables se va a poder sostener el modelo de sociedad actual con la población mundial creciendo a un ritmo de 80 millones de consumidores al año.
La energía hidroeléctrica es la mejor energía renovable de todas, pero adolece de un problema irresoluble: en la actualidad casi no se puede aumentar la producción, pues no se pueden poner embalses donde no hay agua en abundancia. Por tanto, no podemos confiar en que este tipo de energía pueda aumentar mucho su producción y nos vaya a solucionar los problemas de escasez.
La energía solar tiene varios problemas que voy a enumerar a continuación:
1 – Es una energía económicamente inviable. Este grave problema ahora se soluciona con subsidios; aumento del precio del recibo de la luz; partidas del presupuesto con cargo a impuestos para hacer viable esta energía; créditos baratos para las instalaciones; intereses negativos para que los que inviertan en huertos solares se conformen con cobrar un rendimiento miserable; créditos incobrables para la industria que los fabrica, cosa que también está ocurriendo con la deuda de las empresas que se dedican al shale oil, que van a producir el mayor impago de deuda desde las subprime.
La gente no relaciona que, para pagar todo lo dicho en el párrafo anterior, hay que consumir energía abundante y barata que cree riqueza con la que pagar las pérdidas que produce la energía renovable. Tampoco se para nadie a pensar cómo y de dónde se sacará la riqueza para pagar esas subvenciones cuando no quede petróleo que quemar.
Lógicamente, la fabricación de los paneles solares y de la maquinaria que fabrica paneles solares se hace quemando petróleo. ¿Se podrán seguir fabricando cuando no haya petróleo? La gente tiene asumido como un dogma de fe que la ciencia adelanta que es una barbaridad, y que pronto inventarán algo que sea capaz de burlar las leyes de la termodinámica. Yo soy más realista, y viendo que en los últimos 50 años no se ha inventado casi nada útil, no tengo muchas esperanzas de que las mentes humanas subvencionadas encuentren la piedra filosofal de la energía.
Los chinos están vendiendo a pérdida (el Estado otorga créditos incobrables a las empresas que los fabrican) para alcanzar una posición dominante en el mercado, pero no hay que confiar en que se mantengan esos precios, pues las ventas a pérdida no suelen durar permanentemente.
2 - No se puede asegurar el suministro permanente de energía renovable (salvo la hidroeléctrica). Para cubrir los cortes de suministro de energía renovable, no hay más remedio que duplicar con combustibles fósiles toda la potencia instalada. ¿Cómo se solucionará este problema cuando los únicos fósiles que queden sean los políticos de siempre y no produzcan energía?
Duplicar las instalaciones dobla la inversión, y cuando se dobla la inversión con los mismos beneficios, la rentabilidad desciende a la mitad.
Volvemos al mismo círculo vicioso: el Estado subvenciona a las empresas eléctricas para que inviertan en instalaciones no rentables. Las subvenciones se pagan con cargo a impuestos. Los impuestos son una parte de los beneficios o sueldos de las personas o empresas. Y esos beneficios se producen quemando mucho petróleo abundante y barato. En el momento que el petróleo no sea ni abundante ni barato, se rompe el círculo y todas las mentiras de los políticos (que hasta ellos se creen) chocan frontalmente con la amarga y cruda realidad.
3 - La seguridad de las baterías es otro problema difícil de solucionar. Cuando se trata de aumentar la densidad de energía de las baterías, aumenta demasiado el peligro de incendio o explosión.
4 - ¿Quién invertirá en huertos solares cuando los intereses vuelvan al 5%? Y si aumenta exponencialmente el coste de la electricidad ¿se podrá generar riqueza fabricando productos con un coste tan alto de la electricidad? Ojo, estoy hablando de riqueza, no de papel moneda.
5 - Los tractores agrícolas y la maquinaria pesada de momento no funcionan con electricidad. ¿Podrán funcionar en el futuro? Después de leer el punto 3, no lo tengo claro.
La mayoría de estos puntos sirven para los molinos de viento.
CONCLUSIONES:
Es poco probable que se pueda mantener el nivel de vida actual; el estado de bienestar, que es otra forma de decir el bienestar del Estado; el incremento de 80 millones anuales de la población mundial, además del incremento de la esperanza de vida. Todo eso sin petróleo es insostenible.
El petróleo ha hecho posible el aumento de 5.000 millones de personas en 80 años. Sin petróleo la población mundial bajará como poco a la mitad de la que hay ahora. La fuerte bajada de la población mundial nos trae una noticia buena y una mala: la mala noticia es que los futuros pensionistas cobrarán lo justo para no pasar hambre, pero sin caprichos. La buena noticia es que la emergencia climática se habrá curado sola. Si sólo hay la mitad de gente consumiendo energía y contaminando, todo vuelve a su cauce de manera natural.
Una vez que admitamos que la población mundial va a ir a la mitad, todavía nos quedan dos opciones para elegir cómo queremos que ocurra la reducción de la población. Podemos elegir que la población se reduzca a buenas o a malas. Como conozco a la especie humana, no en vano me he relacionado con los bípedos desde que nací, mi pronóstico es que no escogerán ninguna de las dos opciones, y la realidad nos conducirá a la opción mala.
La opción mala es no hacer nada, seguir viviendo en un mundo irreal de fantasías oníricas, y cuando la realidad de la escasez de petróleo se imponga y todos exclamen estupefactos ¿quién lo iba a imaginar?, será muy tarde para planificar nada. La población se reducirá con un aumento exponencial de guerras por los recursos, violencia, saqueos, vandalismo, hambre, miseria y deforestación por la tala de madera para cocinar y calentarse.
La opción buena pasa por la planificación. No se trata de ir matando a la gente, sino de incentivar a las personas para que tengan menos de 2 hijos. El problema es que ningún político aceptará ni propondrá nunca rebajar la natalidad, debido a lo siguiente:
Han embarcado a la gente con la estafa piramidal de las pensiones, también llamado esquema Ponzi. Todas las estafas piramidales se basan en la forma de la pirámide: tiene que haber una base grande de la gente que paga y una cúspide pequeña de gente que cobra. Todas las estafas piramidales acaban explotando, pues no se puede ampliar la base exponencialmente en un planeta finito. Aunque consiguieran que ahora la gente tuviera hijos como conejos, lo único que harían sería alargar la explosión de la estafa a la siguiente generación, pero con el triple de estafados.
En estos dos artículos se explica el asunto con mayor detalle:
Lo que nunca quiso preguntar sobre las pensiones porque no quería saber la respuesta
Las diferentes maneras de recaudar el dinero para subir las pensiones
IMPLEMENTACIÓN DE LA PLANIFICACIÓN
Se debería adoptar como medida prioritaria la reducción de la población mundial en al menos un 3% cada año. Reduciendo menos, nos arriesgamos al colapso que desemboca en la opción mala.
Afortunadamente tenemos a la tele que puede cambiar totalmente las ideas atávicas de la población en menos de seis meses. Como ejemplo tenemos el referendum para la entrada en la OTAN.
Pero si la tele no fuera capaz de convencer a todo el mundo, el peor castigo para los desaprensivos que sigan con la arcaica idea de tener hijos es el asunto fiscal. Se podrían organizar los impuestos de la siguiente forma:
Todas las personas que no tengan ningún hijo, y mientras que ello se mantenga, tendrán un 20% de descuento en sus impuestos directos.
Aquellos que tengan un hijo pagarán la tarifa normal.
Los que tengan dos hijos tendrán un recargo de un 20% en sus impuestos directos.
Aparte de los impuestos, hay que implementar otros temas para reforzar el cumplimiento de la planificación mundial, por el bien de la humanidad:
Todos aquellos que tengan dos hijos o más, quedarán inhabilitados para ser funcionarios u ocupar cualquier cargo o trabajo que tenga que facturar a la administración. Los funcionarios activos que tengan el segundo hijo serán despedidos sin indemnización ni derechos adquiridos. En caso de pertenecer al ejército, serán licenciados con deshonor y sin paga. Ese comportamiento es una flagrante traición al modelo de sociedad sostenible que todos deben defender.
Los que tengan dos o más hijos no podrán acceder a ninguna subvención, ayuda social, vivienda social, ni a ningún tipo de servicio por el que no hayan cotizado.
Con las pensiones funcionará como con los impuestos:
Con ningún hijo se cobra un 20% más de pensión.
Con un hijo se cobra la pensión normal.
Con dos o más hijos se cobra un 20% menos de la pensión que corresponda. En caso de no haber cotizado, no se cobrará la pensión no contributiva.
Para evitar la exportación de problemas a nivel internacional, los países que no cumplan los objetivos no podrán recibir ayudas de la ONU, el FMI o el Banco Mundial. Tampoco podrán exportar sus ciudadanos sobrantes y endosarle el problema a otros países que hayan cumplido con la planificación para una reducción de la población responsable, ordenada y no violenta.
La promoción de la natalidad en espacios públicos estará clasificada como delito de odio contra la humanidad.
CONSEJOS PARA SAUVIZAR LA REDUCCIÓN DE LA POBLACIÓN
No sacar el coche del garaje (aunque sea eléctrico) para ir a comprar tabaco. Un paseo es bueno para la salud y ahorra medicamentos, que consumen mucha energía al fabricarlos y contaminan por dentro y por fuera.
Hay que consumir productos de temporada, para evitar su conservación en frigorífico. Y que se cultiven cerca, para evitar el transporte de largas distancias.
Producir comida consume energía y contamina, pero la dieta vegetariana consume mucha menos energía, menos agua, contamina menos, etc. En una misma parcela de tierra cultivable pueden vivir 20 veces más personas que coman directamente los vegetales, frutas y legumbres que produzca la tierra, que si esos productos se usan para alimentar el ganado y luego consumir su carne.
Si toda la población mantuviera una dieta vegetariana, ni siquiera haría falta reducir la población, pero, como he dicho antes, conozco a la especie humana y a esta posibilidad no le doy la más mínima probabilidad de que ocurra.