Comentábamos en nuestro primer capítulo de esta miniserie que de lo más destacable es la aceleración del proceso de digitalización y transformación digital,
Otro aspecto importante que se acelerará y mucho en cuanto remita definitivamente la pandemia y se inicia una saneada senda de crecimiento económico es todo lo relacionado con la sostenibilidad y el compromiso de la empresa con todos sus grupos de interés, con la solidaridad y el medio ambiente. Ya no es una opción, sino también una cuestión de supervivencia, de rentabilidad y aumento de ventas y reputación, y no van a valer malas prácticas tipo greenwashing porque los consumidores y la competencia están cada vez más atento y la caída reputacional puede ser de órdago.
De entre las incógnitas y cuestiones pendientes de resolver destacamos dos:
1. Tensiones microeconómicas. ERTE e ICO han sido balsámicos para amortiguar la crisis, pero se van a terminar los ERTE y también moratorias de los ICO. Son previsibles dificultades financieras de empresas para pagar deudas en el futuro.
2. Tensiones macroeconómicas. Los precios de materias primas y energía suben desaforadamente. Tomando precio mínimo de 2020 respecto al último dato publicado en 2021, el acero corrugado (+78%), cobre (+102%), aluminio (+56%), petróleo (+106%) y mezclas bituminosas (+85%).
Se observan ya problemas de abastecimiento y producción en semiconductores en electrónica y automoción; también en la construcción. Y problemas de solvencia si bancos centrales suben tantos de interés y coste de financiación, afectando a la rentabilidad de la inversión.
Luis Ferruz / Escritor y economista /