En marzo de 2010, escribía en un post acerca de una campaña financiada por las grandes empresas del país, aunque no se acaba de ver claramente, en la que se olvidaba este asunto y se trataba de vender una idea como si fuese una petición del público en general.
La fundación confianza, no funcionó de aquellas y con la campaña generada mediante “estosololoarreglamosentretodos.org” no coló demasiado tiempo. Sin embargo este grupo después se ha reconstituido en el “Consejo Empresarial para la competitividad”, que además tiene hilo directo tanto con el rey, como con los distintos presidentes del gobierno a pesar de ser una organización relativamente nueva. Los miembros del consejo son CésarAlierta. (Telefónica), Isidoro Álvarez ( El Corte Inglés), Isak Andic ( Mango), Emilio Botín (Banco Santander), Antoni Brufau (Repsol), José Manuel Entrecanales. (Acciona), Isidro Fainé (La Caixa), Francisco González (BBVA), Antonio Huertas (MAPFRE), Pablo Isla (Inditex), José Manuel Lara (Grupo Planeta), Florentino Pérez (ACS). Rafael del Pino (Ferrovial), Juan Roig (Mercadona), Ignacio Sánchez Galán (Iberdrola) y el Instituto de la Empresa Familiar Representado por: Simón Pedro Barceló, (Grupo Barceló), Ignacio Osborne (Osborne) y Leopoldo Rodés (Havas Media Group)
Pues la semana pasada todo apunta a que de repente han llegado a una conclusión y después de haber conseguido casi todo lo que se proponían, ahora se han apuntado a lo que no puede ser otra cosa que una campaña para demostrar que todo está muy bien. La acumulación de noticias y declaraciones de las personas de este consejo, acompañadas de las declaraciones del príncipe, (institución desde luego muy cercana a este grupo), no dejan lugar a dudas y desde luego no pueden ser consideradas de forma aislada.
Recordemos que Fainé, comenzó con la sorpresa de que todo está muy bien en base al hecho de que los salarios reales están a niveles de 1999. Luego fue Botín el que por dos veces afirmó que la situación (para los inversores) en España es magnífica ya que llega dinero desde todos lados. Por otra parte, Telefónica ha preparado una noticia distribuida en la que defiende la existencia de avances significativos en la recuperación económica, (basándose en el incremento de las recargas de teléfono, el incremento de datos usados en los móviles y el incremento en los minutos de llamadas). Todo ello, lo aderezamos con el príncipe Felipe, (que algo más comedido), habla de elocuentes datos de mejoría económica.
En definitiva, estamos asistiendo a un momento en el que parece que todo el mundo está empeñado en decir que estamos bien, lo cual estaría bien si no fuese porque los datos elocuentes de que la situación es cada vez más insostenible se acumulan. El dinero llega a España, pero no llega a los españoles, que sólo sufren las desventajas de los sueldos del 99; y mientras resulta que las recargas de contratos prepago de teléfonos son cada vez mayores, estamos asistiendo a los cierres de grandes empresas a las que llega la marea después de destrozar todas las pymes.
Claro que ahora resulta que al que diga que todo está hecho un desastre, será un agorero, además de llevar la contraria a todos estos personajes, (lo cual en el mundo económico es el sinónimo al ostracismo). Y el único problema es el de siempre. Si todo está bien, ¿Por qué se van a cambiar las cosas o el rumbo?. Este punto es clave, ya que si al final no todo está bien, ¿no deberíamos cambiar las cosas?.