Ayer colocaba un post en el que exponía claramente la desvergüenza imperante en todos los medios económicos y sobre todo en los bancos centrales, (supuestos servidores públicos), que nos está llevando al desastre sin remisión.
El argumento es fácil; en teoría el Banco Central Europeo, tiene como objetivo fundamental, principal y cuasi único, (según lo que afirman una y otra vez), el control de la inflación. En la situación actual la inflación está disparada por los precios de los commodities. El 5 de mayo de 2011; en la rueda de prensa, Trichet transmitia, o por lo menos todo el mundo entendía, la sensación de que el Banco Central Europeo SUAVIZABA su lucha contra la inflación; lo que a su vez provocó un descalabro en los mercados de commodities. O sea que curiosamente, cuando relajaba su lucha; ¡conseguía sus objetivos!.
Tras un primer momento comenzaron los informes más o menos surrealistas de lo que había pasado, con el artículo de Cotizalia, que ya enlacé ayer; otros fueron más simpáticos como el de Expansión que en un golpe de timón espectacular relaciona la caída de las commodities con la decisión del BCE; Afirmando que el BCE ha podido relajar la presión sobre los tipos de interés, ¡Gracias al descalabro de las commodities que le quitan presión a su lucha contra la inflación!. Curioso “vende humos”, que olvida de contar como la supuesta causa, (bajada a peso del petróleo), ocurre ¡DESPUES! del supuesto efecto; (reunión del BCE).
El economista, nos cuenta unas historias de los cambios normativos, de Soros y no sé que más, pero el colmo de la desfachatez se lo lleva Cinco Días, que nos cuenta que: “Por mucho que la distribución estadística de los movimientos de mercado no sea la distribución normal, tampoco parece esto cosa de Trichet” aunque en su edición de papel haya titulado con el expresivo “Trichet posterga la subida de tipos, desprecia el euro y tumba el crudo”. No acaba de explicar porque no parece esto cosa de Trichet, y por cierto, también nos cuenta que la bajada del Petróleo y el resto de commodities es mala; (lo que no aclara entonces es que hacemos luchando contra esto).
Luego nos contarán que lo que hace falta es conocimientos financieros en la sociedad, pero lo que queda más o menos claro es que lo que necesitamos es una prensa que no esté tan vendida a los intereses de los de siempre, hasta el punto de distorsionar la realidad hasta un punto absolutamente demencial.
Pero el colmo del absurdo es la actuación del Banco Central Europeo; Lamentablemente esto tampoco es una sorpresa, porque ya ayer comentaba que algo se les ocurrirá. Y lo primero es deshacer lo andado. En todos los medios aparecen unas declaraciones del consejero Nowoltny que nos cuenta que sale a aclarar algunas cosas porque el mercado ha sobrereaccionado. La primera duda que nos surge es entender si, al final ha sido el BCE el que ha provocado el efecto o no. Porque está claro que ahora mismo hay cierta descoordinación entre todo el mundo negando la intervención del BCE y el BCE afirmando que sale a aclarar los temas por que se le ha malinterpretado.
Pero es que lo más triste es que las palabras de Nowoltny no tienen el mínimo sentido, ya que si cree que las declaraciones del BCE provocaron una caída en el petróleo y en las materias primas, ¡y lo que buscan es luchar contra la inflación derivada del petróleo y las materias primas!; ¿Qué hace aclarando algo?.
La increíble conclusión o resumen no es otra que el BCE diga que relaja su lucha contra la inflación, consiga el objetivo, (contra su discurso), y en consecuencia, salga a decir que ¡no relaja su lucha contra la inflación!; porque es necesario decir esto para aclarar una sobrereacción de los mercados, (lo cual implicaba una victoria en su supuesta lucha). Por no hablar del pequeño detalle de que si ayer relajaron el discurso, (que no me vengan que Trichet se olvidó de soltar las palabrejas “código” que tampoco me vale que no sabe, porque están en todos los períodicos), fue por alguna razón en particular, que debía ser lo suficiente grave como para tomar la decisión que tomaron. ¿Ante una caída del 10% del petróleo, (recuerdo es lo que busca teóricamente), se ha olvidado de las otras razones?. (Según estoy acabando este post comienzan a salir pistas de que algo está pasando, parece que con Grecia).
Pero lo que no tiene sentido alguno es que ni la prensa, ni los Bancos Centrales, puedan operar con una impunidad tan absoluta, que nos lleve a que ni tan siquiera en la teoría los ciudadanos podamos exigir ningún tipo de responsabilidades, ni tan siquiera cuando las manipulaciones, los engaños y las mentiras sean tan evidentes como en el caso que nos ocupa. No es baladí, porque a pesar de que desde los bancos centrales, no se para de echar la culpa a los gobiernos, o a los ciudadanos que tienen la tonta manía de pretender comer todos los días gracias a su trabajo; la triste realidad es que en esta situación estamos entre otras cosas porque los bancos centrales se han dedicado a fomentar las burbujas que tanto critican, (y no han cambiado), y por supuesto tienen la llave de cualquier salida.
Desde luego, tenemos que desterrar inmediatamente el dogma de la independencia de los bancos centrales, (que en realidad no tienen tal independencia, sino que dependen de los intereses de las entidades financieras), y por supuesto meter en cintura a estos personajes.
Por supuesto, el hecho de recuperar el control de estas instituciones, (así como de instaurar la máxima responsabilidad a aquellos que con sus decisiones destrozan países enteros), no sirve de nada, si no viene acompañado de medidas que impliquen el restablecimiento de la democracia en los distintos gobiernos, porque debo recordar que los sucesivos gobiernos no paran de tomar medidas en el mismo sentido que estos absurdos; en contra absolutamente de todos los ciudadanos a los que dicen representar.
De hecho esta misma semana he estado liado con un post acerca de una más de las manipulaciones de nuestro gobierno, tratando de apoyar el precio del petróleo, (la serie sobre la manipulación acerca de los límites de velocidad.
Estamos ante una situación en la que los gobiernos nos están mintiendo u ocultando información, en la que los bancos centrales se dedican a hacer todas las trampas posibles, empezando por crear burbujas (como he puesto en el post de ayer, como se comprueba hoy y como aparece en la recopilación a la que hacía referencia ayer), y manipulándolos mercados, (antológica fue la operación de 2 de diciembre de 2010) y la opinión de tal forma que ya nadie se escandaliza porque tomen medidas como prohibir la competencia bancaria, (en los santos huevos de la defensa del libre mercado).
Si los gobiernos y bancos centrales, se dedican sistemáticamente a favorecer a aquellos trileros que no paran de enviar mensajes que ya ni se disimulan y si al final resulta que los únicos que los creen son los periodistas en las ruedas de prensa, a los que cuesta y mucho imaginarlos cuestionándose ni las mentiras más llamativas que se nos pueda ocurrir, ¿Qué nos queda?.
Pues nos queda intentar luchar para cambiar esto, mediante campañas como la que propuse de la lotería de las gasolinas; (sigo animando a todo el mundo a seguir en esto y avanzar), la campaña de “no les votes”, (que me parece muy acertada), o una que descubrí estos días que me parece muy interesante ya que propone manifestaciones para el 15 de mayo para empezar, bajo la exigencia de “democracia real ya” ; (Sólo discutiría el nombre porque yo particularmente quitaría el adjetivo “real”, porque o existe democracia o no existe, y no hay varios tipos de democracia, (lo que existen son varias formas de organizar una democracia).
Y al final de todo esto resulta que este sistema que formalmente ha dejado de ser una democracia y ya es desde todos los ámbitos que miremos un sistema de despotismo ilustrado; con la salvedad de que aún no han entendido que con todos los golpes que se están dando a la clase media, tanto en la formación de las burbujas como en su implosión, como en las medidas que se dan para volver a intentar mantenerlas, están olvidando una pequeña tontería;
Al final de todo no se puede salvar al sistema financiero cargándose a la economía; lo que me lleva a concluir que ¡es la economía estúpido!.
