En esta carta voy a publicar por primera vez mi cartera de inversiones en compañías cotizadas. La fecha de inicio es el 08 octubre de 2018 y, para total transparencia, los resultados se irán comprobando en directo, sin publicar rentabilidad pasada.
Hay que tener en cuenta que esta es la parte financiera de la cartera en la que he seleccionado personalmente los valores en ella. Además, tengo una parte menor en fondos de inversión de clara orientación “value”.
Hay varios motivos por los que me he animado a publicarla:
- Transparencia.
Como la mayoría sabe, alrededor del mundo financiero hay gran cantidad de "charlatanes" que se dedican a engañar sobre sus resultados y capacidades para beneficiarse vendiendo cursos y libros (inútiles en el mejor de los casos) ó cobrando comisiónes de gestión, entre otras opciones.
Quiero, por tanto, que todo el mundo pueda ver en directo y desde el comienzo como va evolucionando los resultados y la composición de la cartera. Muy importante indicar que esta cartera está diseñada para el largo plazo. En mi caso considero largo plazo a partir de 5 años. Sería genial tener un sistema para ganar también en periodos de corto plazo, pero si ni los mejores inversores del mundo lo han conseguido, no seré yo quien lo intente.
- Impulso en la profundización de las compañías y consideración de otros puntos de vista.
Varias veces, como consecuencia de comentar en twitter (@mario_value) u otro medio sobre alguna compañía se ha producido un debate enriquecedor o se me ha proporcionado cierta información o perspectiva diferente que me ha aportado valor. Os animo por tanto a contactarme si queréis debatir sobre alguna de las compañías en cartera o aportar algún dato o visión diferente.
- Proporcionar un contexto a las tesis de inversión y comentarios sobre compañías.
Hasta ahora he publicado alguna tesis de inversión y he comentado sobre varias compañías. Creo que aporta bastante proporcionar un contexto y ver realmente el “skin in the game” que tiene una persona en las tesis de inversión que publica.
- Motivación extra. En retos personales pasados me funcionó anunciarlo de forma pública como motivación extra a la hora de afrontar el trabajo diario necesario.
Mi idea inicial es realizar informes trimestrales y un informe anual a final de cada año comentando lo que considere interesante sobre cambios en la composición de la cartera o evolución de pensamiento. Cada inversor vive un proceso dinámico de aprendizaje y vivencia de experiencias que le hacen evolucionar y así supongo que se irá reflejando en las cartas.
No estoy seguro si seguiré siempre publicando al detalle cada posición y su respectivo peso, pero por ahora ahí están de forma indefinida.
Filosofía de inversión
Se trata de una cartera de renta variable que busca invertir en compañías cotizadas a largo plazo, considerando como tal periodos superiores a cinco años. Esto es debido a que no podemos controlar la aleatoriedad que impera en el corto plazo. Por ejemplo, una cartera perfectamente diseñada en 2007 hubiera sufrido igualmente en la crisis de 2008.
Como dijo Benjamin Graham, precursor de lo que hoy se conoce como “value investing” o inversión en valor:
“In the short run, the market is a voting machine but in the long run it is a weighing machine”. A corto plazo el precio muestra el optimismo o pesimismo general hacia compañías, sectores o países mientras que a largo plazo el precio tiende hacia el valor real de esa compañía según su capacidad de generar beneficios (o mejor dicho, flujo de caja libre) en el futuro.
Por todo ello, tened por seguro que esta cartera sufrirá caídas temporales de diferente duración. Sin embargo serán, paradójicamente, los momentos con mayor potencial de revalorización futura si la selección se ha realizado correctamente.
El objetivo es identificar compañías que pueda entender, que coticen a un precio significativamente inferior a su valor real y esperar pacientemente a que el largo plazo haga que esa diferencia se estreche. A la compra de empresas a un precio significativamente inferior a su valor es lo que Graham denominó margen de seguridad y es crucial para minimizar errores e incertidumbre.
La cartera tiene un sesgo hacia compañías pequeñas o de baja capitalización por ser éstas menos seguidas y analizadas y, por tanto, donde se produce mayor ineficiencia en la asignación de precios. “Price is what you pay, value is what you get” citando a Warren Buffett. Esto no excluye a grandes empresas, ya que desde el principio las hay, pero el sesgo hacia small caps es claro por ser el nicho donde más oportunidades suelen presentarse.
Concibo la volatilidad o fluctuaciones de precios no como un riesgo sino como una oportunidad sin la cual no se podrían obtener rentabilidades extraordinarias. Para mi, riesgo es la pérdida permanente de capital y seré especialmente cauteloso para mantener la cartera lo más alejado posible de él. En este sentido, no me importa sacrificar potencial rentabilidad extraordinario a cambio de dormir tranquilo con una cartera relativamente defensiva en bajadas generalizadas en los precios de las acciones que inevitablemente vendrán, así como se irán.
Siguiendo con la tónica de cautela, la cartera tiene una firme preferencia por las compañías con poca deuda, pues ésta magnifica los problemas cuando llegan (aunque también amplifica los retornos en los buenos momentos). Una vez más, prefiero obviar un potencial extra de rentabilidad para ganar en seguridad en la conservación del capital. Viene al caso recordar las reglas 1 y 2 de Buffett:
Regla nº 1: No perder dinero (de forma permanente)
Regla nº 2: No olvides la regla nº 1.
Por último, hay que tener en cuenta la psicología humana y como las personas funcionamos por incentivos. Por tanto, busco empresas dirigidas por personas con los incentivos adecuados de generación de valor a largo plazo. Nada mejor para ello que seleccionar compañías cuyos gestores sean también accionistas con la mayor parte de su patrimonio en la compañía. Me fijo también en su capacidad de asignar capital convenientemente, tema clave en las compañías que históricamente han tenido mayores retornos, como se muestra en el libro “Outsiders”, el cual recomiendo.
Cartera
Hay que tener en cuenta el efecto fiscal que conlleva que esté estructurada actualmente como una cartera personal y no un fondo de inversión o SICAV y, por lo tanto, deba tributar por plusvalías en la venta (fondos y SICAV lo hacen solo por el 1%). Esto ha llevado y llevará a mantener ciertas acciones en determinados casos en los que no se mantendrían si no se tuviera que tributar por ello.
Esta es la distribución en divisas, áreas geográficas y sectores:
No cubro divisa. No me preocupa a largo plazo el tipo de cambio de las divisas en cuestión, especialmente teniendo en cuenta que cubrirlas tiene coste.
La cartera se compone de 28 valores, aunque el 73% se concentra en el top 10. Aquí la tenéis:
Es importante indicar que nadie debe tratar de copiar ciertas posiciones de forma aislada ya que esta cartera está diseñada como un conjunto en el que hay que tener en cuenta la diversificación entre sectores, países y monedas entre otras cuestiones. Cada inversor debe hacer su propio estudio y análisis y evaluar cómo encajaría en el conjunto de su cartera. Además, debido a los movimientos entre cartas trimestrales, quien lo intente llegaría tarde en los cambios lo cual puede ser crucial.
En la cartera también tiene influencia situaciones personales, como por ejemplo que haya vivido durante 5 años en Reino Unido, lo que me lleva a tener un gran peso ahí por varios motivos:
- Mayor conocimiento que resto de países (excepto España)
- Mercado con gran cantidad de empresas cotizadas del que han huído los inversores debido al pesimismo tras el Brexit pero con gran seguridad jurídica y muy buenos negocios.
- Gran parte de liquidez obtenida la tenía en GBP y he intentado cambiar lo menos posible después de la gran depreciación que sufrió tras el anuncio del Brexit.
Por otro lado, se hace evidente la influencia de Alex Estebaranz en esta cartera. Realicé el curso avanzado y estoy en el club de inversión de su proyecto “el arte de invertir”. Alex ha sido y es una inspiración para mi y me parecía justo dedicarle un párrafo en esta primera carta.
Para finalizar, me gustaría animaros a comentar, debatir o preguntar lo que creáis conveniente. De un debate constructivo todos saldremos ganando.
¡ Hasta la próxima !