No es cuestión de ser de derechas ni de izquierdas. Es más, la politización de la muerte es sencillamente repugante, tanto si la hace el PP como si la hace el PSOE. No es, por tanto, una manifestación contra el Gobierno. Es una manifestación en contra de una determinada política del Gobierno: la modificación del Código Penal que supondría una rebaja de las penas a los asesinos de ETA. Las víctimas y el Estado de Derecho están por encima de ideologías e intereses partidistas. La paz se consigue aplicando la Ley para que los asesinos se sometan al Estado de Derecho. No sometiendo el Estado de Derecho y las Leyes a la voluntad de los asesinos.
Desde aquí quiero expresar mi apoyo a las víctimas del terrorismo y mi rechazo total a cualquier iniciativa política (sea del partido que sea) que ignore a las familias rotas por el terror y rebaje las penas a los terroristas. No son buenos chicos. Son asesinos crueles y sanguinarios y el Estado tiene la obligación de tratarlos como tales.
Por todo esto, yo estaré allí.
Un fuerte abrazo.
JMDV