Re: Adicae
Mal empezamos,si calificamos de "perotada" los comentarios de otro usuario sin que los tuyos propios hayan sido objeto calificación,crítica o menosprecio por parte de éste.Lo que no quiere decir que no pudieran existir razones mas que sobradas para ello. Pero,bueno; como el asunto en cuestión no trata de un "y tú mas", pelillos a la mar. También decirte que te equivocas. "V.de victoria" y yo,no somos la misma persona,y te garantizo que no me van a dar ningún premio por afirmar lo contrario.
Dices que me defino tibiamente no reconociendo la estafa. ¿ A caso insinúas que de manera obligada lo debería de hacer para darte a tí la razón y enfrentarme a aquellos que piensan de manera distinta a la tuya?. Si lo que realmente deseamos todos es la unión de los afectados, es literalmente imposible,salvo que se trate de alguien que sea un cínico,dar y quitar la razón y opinar de una u otra manera según cual sea la condición y manera de pensar de nuestro interlocutor con tal de lograr un consenso al precio que sea.
Si ha existido o no estafa será algo que,con el tiempo y una caña,todos descubriremos por mediación de sentencia judicial que condenará,o absolverá a los hoy imputados. También nos podemos pasar otros 8 años discutiendo entre nosotros ( así nos ha ido ) si éstos son galgos o podencos.
Por tanto,personalmente creo que debemos de tratar de encontrar la unión deseada entre todos los afectados a través del consenso. Por ejemplo : ¿Estamos todos de acuerdo en que las sentencias de la Audiencia Provincial de Madrid y del Tribunal Supremo dicen lo que dicen?. Aquí si que no hay cáscaras,ni trampas ni cartón. Por lo tanto,caso de estar todos de acuerdo en éste punto, tratemos de ser un poco inteligentes y usemos ambas sentencias para reclamar una responsabilidad patrimonial contra el Estado,y dejemos que sea el tiempo quien determine la culpabilidad o inocencia de los imputados. Mientras ésto sucede,cada cual es libre de pensar lo que estime conveniente respetando siempre opiniones distintas a la suya.
Insisto. Estas dos sentencias nos lo han puesto a huevo. Hagamos uso de ellas en nuestro propio beneficio.