Primero y ante todo, darte las gracias por el tono general de tu escrito. Resulta agradable encontrar un interlocutor que no basa sus alegatos en la descalificación, ni tiñe sus escritos de condescendencia.
Toda la discusión sobre este asunto ha girado alrededor de si AUSBANC es o no merecedora de crédito, que es algo accesorio a la conversación pues lo que yo pretendía discutir es lo que decía el informe de AUSBANC, es decir, no he querido limitarme a asesinar al mensajero por el hecho de que no me cae bien o es feo, sino que he pretendido analizar si lo que dice es digno o no de ser considerado. Dices bien, a mi modesto entender, en tu artículo cuando afirmas que no podemos descalificar todas las noticias de un periódico por el hecho de que nos caiga bien o no su línea editorial, se trata justamente de eso. Mi desconfianza no sólo se limita al mundo de la política, es agrava cuando se habla de dinero. Tengo una desconfianza natural, quizá justificada por vivir en un país donde las zorras guardan los gallineros y los bomberos hacen barbacoas en el mes de agosto para ver si hay suerte. Acostumbrado a vivir en este país donde se tiene el mejor “sistema financiero del mundo”, sin que el presidente del BdE abra la boca para decir que le parece la frase, o a ver como los bancos colocan todo el crédito en deuda nacional llevándoselo crudo sin que el máximo responsable diga ni so ni arre, porque es el principal beneficiario de la coima, o como los directores de entidades bancarias roban legalmente a los depositarios, o como los representantes públicos han facilitado el proceso de hundimiento de una gran parte del sistema financiero español agarrándose a la frase de que la caridad empieza por uno mismo. Contemplando pues el ecosistema financiero, el comportamiento de Ausbanc no dista mucho de los que se rumorea que hacen ciertas agencias de calificación. Y a ese respecto no me cabe la menor duda de que si el Ministerio hubiera podido anular la influencia de Standard & Poor’s, Moody’s o Fitch probablemente lo habría hecho.
Coincidimos pues que en el mundo de las finanzas hay mucho chorizo y que Ausbanc podría ser sospechoso de “choricismo”. Créeme si te digo que eso no me reconforta, la especie, como se ve, abunda, y en esa abundancia está el peligro. Nunca sabes cuándo una ramera acusa a otra, por aquello de díselo antes de que te lo digan. En fin, el mundo es ancho y ajeno, y cada vez más. Así pues, como ya dije en otro escrito, admito el carácter de pulpo de este animal de compañía y que sus opiniones han de ser puesta en cuarentena, pero ¿Han de ser examinadas, o las tiramos al cubo de la basura con las valoraciones de las agencias de calificación?.
En ese contexto se encuadran mis links sobre lo que se encuentra en Internet. ¿Hasta qué punto son fiables las opiniones? En Internet, como sabes hay de todo, y uno puede encontrar siempre un link que permita apoyar una frase. Eso es lo que intentaba poner de manifiesto, independientemente de la calidad de unas y otras opiniones y del poderío económico de quienes las sustentan.
Me alegro de que como cliente no hayas tenido ningún problema en EVO, es lógico, nadie puede captar clientes generando problemas, es más, entiendo que deben dar un mejor servicio con la finalidad de convencer y que corra el boca a boca. Eso lo doy por descontado.
Qué decir del tema de los despidos. Que es cierto que se ven venir procesos de ajustes de personal en las entidades bancarias, como dices. Yo no pretendía con mi escrito afirmar que esas reducciones se limiten a NCG y EVO, por supuesto que no, pero supongo que estaremos de acuerdo en que se están produciendo procesos de concentraciones bancarias y al final el panorama quedará bastante reducido en cuanto a número de entidades y sucursales. Justo en ese panorama es donde se inscribe mi escepticismo ante el lanzamiento de una nueva rama comercial de NCG, con la pretensión de vender posteriormente la red bancaria exterior, incrementada con una cartera de nuevos clientes no muy lustrosa, pero si suficiente para que alguien se plantee su captación. Y esto coincidiendo con un proceso de concentración bancaria y de eliminación de sucursales por parte de los grandes, acompañado de reducción de plantillas y sucursales. En un año de abundancia de ajos, alguien ha plantado ajos. ¿No serán muchos ajos?
Creo que el tema de la venta de EVO en el año 2014 es de conocimiento público, y eso que yo no soy más que un amateur escéptico, así que entiendo que los compradores de preferentes que idearon la página de egobanco, como buenas víctimas, lo saben perfectamente. Y por supuesto que la página está destinada a hacer daño. ¿Alguien esperaba las gracias?
Finalmente aclarar que lo que yo dije es que es EVO lo que resulta ser una operación de maquillaje de NCG – Novagalicia, con la clara finalidad de engordar sin aclarar “¿y tu de quién eres?”, y una vez bien engordado, vender la red exterior.
Por cierto, no, yo no soy un experto, ignoro cómo se llega a ser un experto en este mundo de la banca, supongo que hacen falta muchos años, muchos estudios, y mucha experiencia. La mía es una opinión de un usuario normal y corriente como la del 90% de los foreros, no me creo que un experto de verdad se dedique a ilustrarnos en un foro; un usuario que un día paseando por una calle se encontró con un cartel de EVO y se preguntó ¿Y estos de dónde salen? ¿Serán unos amigos de PICHINCHA? Y no, eran Novagalicia, nueva entidad resultado de la fusión de dos cajas gallegas quebradas. ¡Quien lo hubiera dicho!
Un saludo