Declarar ilegal la creación del Novo Banco, que agrupa los activos saludables del colapsado Banco Espírito Santo (BES), es la meta de la demanda interpuesta por el administrador concursal del Espírito Santo Financial Group (ESFG).
El administrador concursal del ESFG, firma declarada insolvente con sede en Luxemburgo que era el principal accionistas del BES, interpuso dos procesos en el Tribunal Administrativo de Lisboa, informó en un comunicado el bufete de abogados portugués PLMJ.
El administrador Laurence Jacques, de acuerdo con el PLMJ, su representante legal en Portugal, decidió impugnar la escisión del BES decretada el 3 de agosto por el Banco de Portugal (BdP) en un banco “bueno”, Novo Banco, y otro de activos tóxicos, por considerar que “viola la Constitución portuguesa y la ley de la UE”.
La inédita resolución aplicada por el BdP es “ilegalmente dañina para el ESFG como accionista del BES y para sus acreedores”, señaló la nota divulgada en nombre de Jacques, designado en octubre por las autoridades de Luxemburgo como encargado de gestionar la insolvencia del ESFG.
De este modo, el administrador pidió “la nulidad” de la medida de resolución del BdP, así como la extinción del Novo Banco con la meta de que todos los activos del que fue segundo mayor banco en Portugal vuelvan a estar reagrupados.
Asimismo, interpuso otra acción por la que persigue anular la decisión del BdP de suspender el 30 de julio, antes del colapso del BES, los derechos de voto directos e indirectos de la ESFG, uno de los principales ramos del entramado Espírito Santo, investigado por irregularidades de gestión.