Queja al servicio de atención del BBVA
Aquí, en esta queja al servicio de atención, se resume la actividad del sábado 5 de diciembre:
El sábado 5 de diciembre en torno a las 9.30 de la mañana me dirigí a la oficina de la calle Senra de Santiago de Compostela con el fin de solucionar el siguiente asunto: reclamar unas comisiones de deuda vencida cobradas por el BBVA improcedentes e imputarlas a la deuda que tengo con ustedes. La comercial me dijo que de eso nada, que esas comisiones estaban bien cobradas y se resistió a cambiar de opinión ante toda lógica y evidencia que yo me ofrecía a demostrar; le insistí y ante su hostilidad pedí una hoja de reclamaciones del Instituto Gallego de Consumo; ella me facilitó unas internas del banco de las que ya tengo constancia que no valen para nada pues ustedes las tiran a la basura. Le insistí en las hojas de la Xunta; tras hacerme esperar bastante tiempo, me dice que vaya a la oficina de Montero Ríos, que no las hay.
Llamé a la policía local para que tomase parte y poder presentar después una denuncia. Nos hicieron esperar, a pesar de haber personal de atención al público libre, con al excusa de estar el responsable ocupado; tras una largo rato llega una mujer de vaquero y gabardina que les entrega un sobre blanco grande donde supongo que estaban las hojas de Reclamaciones traídas de otra oficina; si se da el caso es fácil comprobar este hecho por la numeración de las hojas.
De este hecho daré parte el miércoles en la oficina municipal de consumo para que tomen las correspondientes medidas de mandarles una inspección.
Este correo no excluye que siga reclamando, por supuesto, en Consumo (para su derivación al defensor del cliente y futura remisión al servicio de reclamaciones del banco de España) las comisiones de deuda vencida improcedentes que me han aplicado desde hace años y otras malas prácticas bancarias; está pendiente el realizar, además, una denuncia a la Agencia de protección e datos por compartir los míos con terceros. Por último, indicar que esta situación se arrastra desde hace más de un año y la subdirectora, una tal ¿María José? Se negó a facilitar una solución recurriendo al “mañana, mañana, estoy con lo suyo, don Ignacio… “
Un saludo y feliz día de la Constitución.