A ver, todas las compras que realizas con la tarjeta de crédito son, como su nombre indica, a crédito. Es decir, el banco te da un límite mensual del que no puedes pasarte y el banco está pagando por ti todas tus compras hasta que pasa el mes y en ese caso pueden pasar tres cosas:
1 -> Liquidación total, pagas el importe total de todo lo que has gastado sin intereses.
2 -> Pagas un porcentaje de lo gastado, con intereses, ya que estás financiando el crédito dado.
3 -> Pagas una cantidad fija al mes, con intereses, ya que estás financiando el crédito dado.
Pero en ningún caso podrás gastar más del límite dado, ya que quien está pagando las compras es el banco, no tú y esa es la cantidad máxima que te va a prestar. En caso de que necesites gastar más un mes, tendrás que hacer una recarga a la tarjeta de crédito (recarga gratuita y sin intereses de ningún tipo), y así tendrás saldo positivo y tus compras tirarán de ahí hasta que se agote y luego empezará a cargar del saldo límite que te presta el banco, por lo que ese mes tendrías tu aportación + el total de crédito que te da el banco.
Las tarjetas de crédito siempre han sido así, pero no se cuando se han sacado eso de pago inmediato, que no sé como funciona ya que nunca lo he usado, ni creo que lo usaré. Yo siempre he usado las tarjetas de crédito para todos mis gastos y las de débito únicamente para los cajeros, ya que prefiero pagar con dinero del banco y así tener liquidez de mi dinero. Además de la claridad que me supone tener los gastos de tarjeta separados de los de la cuenta.
Hasta ahora tengo la American Express Gold, Santander Platinum y la tarjeta de crédito de ING, pero ahora que me obligan a tener la Mundo 123, daré de baja la Santander Platinum y seguiré usándolo como hasta ahora.