Estudian permitir cobrar comisiones por recibir transferencias
Normativa comunitaria, sí, pero sobre todo darle caña a la banca online... Al loro:
Caruana estudia permitir el cobro por recibir una transferencia
Las entidades financieras han presentado ya al Banco de España una propuesta para cambiar el actual sistema de comisiones en las transferencias. Esta iniciativa abre la posibilidad de cobrar a los clientes que reciben los fondos. La banca espera que el supervisor dé luz verde al proyecto este año y planea incluir después los traspasos a entidades online.
Ana Perona / MADRID (16-01-2006)
El proyecto, que se ha negociado en el seno de la Sociedad Española de Sistema de Pagos, arranca del pasado verano y se enmarca dentro del proceso de convergencia con el mercado europeo. El objetivo de la propuesta que la banca ha presentado al Banco de España es implantar para las transferencias el sistema de comisiones compartido (denominado share), que permite tanto a la entidad emisora como a la receptora decidir si cobra una tarifa por esas operaciones a sus clientes.
Actualmente, en España cuando una persona da la orden a su entidad para que ésta realice un traspaso de fondos desde su cuenta a otro banco o caja, aplica comisión sólo la entidad de origen. Esta última, además, paga la tasa establecida al banco destinatario de la transferencia.
Fuentes próximas a las negociaciones aseguran que el Banco de España ha manifestado su aprobación ante esta propuesta, tras algunos reajustes que se han realizado sobre el borrador inicial.
El supervisor, que podría dar el visto bueno al proyecto durante este año, ha obligado a las entidades a definir con detalle qué tipo de operaciones podrán someterse a este nuevo sistema.
Según se recoge en el texto, se distingue entre dos tipos de transferencias: las automáticas y las que generan algún coste para los bancos. Será en el segundo caso en el que las entidades puedan aplicar comisiones cuando la norma entre en vigor. El importe no está establecido, aunque el Banco de España ha advertido a la banca que no quiere que se perjudique a los consumidores.
'No va a ser masivo, sólo se va a aplicar a determinadas operaciones, como por ejemplo aquellas en las que los datos del titular de la cuenta sean erróneos o el número de cuenta no esté completo', explican fuentes financieras.
Añaden que el principal motivo de estos cambios es el nuevo marco regulatorio europeo, que obliga a dar el mismo tratamiento a las transferencias comunitarias que a las nacionales. Esto supone una pérdida de ingresos para la banca con la legislación actual, ya que en los traspasos dentro de España no se carga comisión a los clientes que reciben en su cuenta el dinero. Pero la reforma no afectará sólo a las operaciones intracomunitarias, que suponen menos del 3% del total, sino a todas las transferencias.
La normativa sobre transferencias podría ampliarse con posterioridad a otros servicios bancarios. La intención de bancos y cajas es que, una vez cuenten con la aprobación del Banco de España en esta materia, se acometa en una segunda fase la reforma también de las domiciliaciones de recibos.
El modelo sería similar al ideado para las transferencias, con una diferenciación entre los recibos básicos, que seguirían siendo gratuitos, y los servicios adicionales. En estos últimos se incluirían, por ejemplo, todas las incidencias que ocasione el pago de un recibo a una entidad, como el saldo insuficiente de un titular para hacer frente al cargo o tener que dejar la cuenta en descubierto.
Pero el mayor impacto sería para la banca online, que actualmente utiliza un mecanismo similar a las domiciliaciones de recibos (conocido como orden de adeudo) para realizar las transferencias de sus clientes. Con este sistema, las entidades por internet consiguen que sus usuarios no tengan que pagar comisiones, lo que funciona como un reclamo añadido para captar fondos.
Precisamente, éste ha sido uno de los campos de batalla de los últimos años entre ING Direct, líder en Esp