Claro que el precio es importante, Maxpowell. No voy a negar esa evidencia. Lo que pasa es que ahora ACS controla a Hotchieff y, con ello, ha ampliado e internacionalizado su negocio todavía más; pero eso sí, le da cierta libertad a la alemana, ya que si no tengo mal entendido ACS consolida los resultados de Hotchieff en su balance y no al revés. Por otro lado, que en Australia no le vayan bien las cosas... bueno, no deja de ser un problema "colateral"; a veces se gana y a veces se pierde. De todos modos, aunque no sé que es lo que ha pasado allí, el tema no me sorprende, porque los sindicatos australianos son muy peleones y, con la ayuda del gobierno, le estan haciendo la vida imposible a muchas empresas extranjeras que están invirtiendo allí (y si no, que se lo pregunten a los de Suez Environnement, por ejemplo). El auténtico pelotazo de ACS está en los países de la Península Árabiga; donde se van a jugar, según comentaban en "El Economista", contratos por valor de 85000 millones de dólares. Una auténtica pasada... pero necesaria si los países del área quieren controlar las revueltas populares de hoy y mañana.
Saludos!