El caso que comentas creo que fue bastante general. Es decir, en muchas sucursales se sugirió a los clientes que comprasen esas acciones y muchos de ellos las compraron. En muchos casos, personas mayores, con gran desconocimiento de los mercados financieros, que simplemente se fiaron de la persona que se lo dijo, ya que le conocian desde hace mucho tiempo, parecia una buena persona, les trataba siempre muy bien, etc etc. Mi duda es hasta que punto los directores de las sucursales o los empleados recomendaron comprar acciones a sabiendas de que iba a pasar lo que al final ha pasado.
¿Eso no podría considerarse una especie de timo? El problema, claro esta, seria demostrar que esas recomendaciones se hicieron "a sabiendas" de lo que despues ha sucedido.
Al menos una conclusion: jamas de los jamases debemos fiarnos de un "banquero". En muchos casos, esto es un juego de suma cero y si los clientes pierden, ellos ganan.