Tranquilos grecia seguira en el euro
"Salida ordenada" de Grecia del euro es la propuesta que acaba de lanzar la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde. "Sería extraordinariamente costoso y presentaría grandes riesgos, pero es parte de las opciones a contemplar", dijo. No obstante, sería catastrófico que los helenos retomen el dracma y salgan de la moneda única. ¿Cuáles serían las consecuencias de que Grecia decidiera abandonar el euro?
No hay ninguna posibilidad legal para que Grecia salga del euro. No existen mecanismos en la Unión Europea que contemplen este extremo. El Tratado de Lisboa, y sus predecesores, solo recoge que un país sí puede abandonar la Unión Europea, pero no la unión monetaria sola y exclusivamente. Es decir, legalmente no puede salir del euro y solo podría abandonar la Unión de manera completa.
Un abandono de Grecia de la moneda común significaría, en primer lugar, que el país tendría que renunciar de manera inmediata a toda financiación comunitaria, tanto a la del fondo de rescate, como a la del Banco Central Europeo. ¿Dónde la encontrarías?
No obstante, no está totalmente descartada la posibilidad de que el Gobierno del país tome la decisión de salir y la Comisión Europea, en una decisión consensuada, lo apruebe. Ya lo han dicho varios altos cargos de la Comisión. ¿Qué consecuencias tendría esta medida?
Los expertos coinciden en señalar que las derivadas serían catastróficas para Grecia. Por varios motivos:
-- Recuperar el dracma, la antigua moneda helena, provocaría una devaluación sin precedentes de esta divisa. El poder paralelo del euro debilitaría al máximo las financias griegas.
-- Volver a construir una economía griega con una moneda totalmente devaluada con respecto a la de sus vecinos europeos sería prácticamente imposible. El país ha apostado por una economía global y debería dar marcha atrás en lo que ha estado haciendo durante los últimos años. Tendrían que retroceder una década y empezar de cero a configurar su sistema financiero.
-- La confianza en el dracma sería escasa, o nula. Habría “pánico bancario”, ha pronosticado Juan Ignacio Crespo, director de Reuters en Europa. La moneda no tendría ninguna solvencia a nivel europeo y, mucho menos, mundial.
-- Algunos economistas hablan de un colapso total del sistema monetario griego. Y, lo que es peor, apenas tendrían posibilidades, sin ayuda exterior, de solucionar esta situación.
-- En caso de producirse el colapso griego, y que sus autoridades decidieran regresar al bloque de los 27, habría serias dificultades para que fuera aceptada: “Grecia tendría que solicitar su readmisión y tendríamos que mantener conversaciones de admisión y evaluar detenidamente si Grecia realmente cumple con los requisitos de adhesión”, recalcó recientemente el Gobierno austriaco.
-- El aislamiento total de Grecia también podría provocar fuertes disputas sociales, que ya han tenido precedentes violentos en el país. Algunas voces, incluso, apuntan a la posibilidad de un golpe militar.
El propio Mariano Rajoy siempre se ha mostrado contrario a la salida de Grecia de la zona euro. El presidente español siempre ha apostado por defender el euro y la sostenibilidad del déficit de todos los países europeos: “El euro necesita ser reforzado. Yo no quiero que Grecia salga del euro. Creo que sería un error mayúsculo, sería una mala noticia”, ha declarado.
El presidente del Gobierno diferencia claramente entre lo que ocurre en España y lo que ocurre en Grecia: “La prima de riesgo ha subido muchísimo y eso significa que es muy difícil financiarse, y es muy difícil hacerlo a un precio razonable. Hay que hacer unas cosas en España y otras en Europa”.
El Nobel de Economía, Paul Krugman, por su parte, ha pronosticado que Grecia saldrá del euro “muy posiblemente el próximo mes”. La salida de la moneda común helénica provocará, según Krugman, “cuantiosas retiradas” de depósitos de los bancos en España e Italia, dinero que irá a parar a Alemania. La revista Der Spiegel también ha titulado: “Akropolis, Adieu!”. Defiende que Grecia “debe salir del euro” y que la única salida que tiene Europa para seguir adelante es que Atenas abandone la moneda única.
En definitiva, pese a que varias voces autorizadas han sugerido la posibilidad de que Grecia abandone el euro, la medida hundiría totalmente el sistema financiero heleno. Y su Gobierno no tendría ninguna manera de poder solucionar la situación ya que las ayudas comunitarias, simplemente, no existirían.
FUENTE EL CONFIDENCIAL