Solaria y el cuento de la lechera. Nunca los sectores regulados
Solaria y el cuento de la lechera. Nunca los sectores regulados fueron de fiar
El factor político suele jugar malas pasadas por los efectos regulatorios. Nunca los sectores regulados fueron de fiar, dicen los analistas más viejos, porque lo que hoy dice, dicta y regula el Gobierno, mañana suele ser lo contrario cuando el Gobierno que gobierna es diferente al primero. Por eso, valores como Solaria, prototipo de la energía solar en el mercado nacional, sufre vaivénes de consideración. Además, en este caso se ha logrado rizar el rizo, porque aun siendo el mismo Gobierno el que manda son diferentes los ministros de la cosa nombrados, de tal modo que lo que dijo Clos no sirve para nada, porque ahora el nuevo ministro dice lo contrario ¡Como para fiarse! Hay en esta compañía manchega, además, un rictus de desconfianza por parte de algunos bancos de inversión respecto a la interpretación del balance, que los sucesivos comunicados de Solaria al Regulador no han logrado borrar. En el mismo proceso, ha aparecido en los últimos días algo así como el cuento de la lechera por los movimientos corporativos en el sector.
Empezamos por la regulación posible. El Ministerio de Industria negó hace unos días que haya decidido retirar el borrador de Real Decreto sobre energía fotovoltaica y eliminar el techo de 1.200 mega vatios (MW) de potencia instalada para esta tecnología. Industria desmintió en un comunicado lo afirmado por la Asociación de la Industria Fotovoltaica (ASIF), que había asegurado que el Ministerio se había avenido a negociar con el sector una nueva norma en la que, al contrario de la propuesta eliminada, no aparezca un techo de 1.200 megavatios (MW).
Sin embargo, Industria explicó que en la reunión mantenida entre el secretario general de Energía, Pedro Marín, y el sector fotovoltaico el pasado 29 de mayo “no se planteó en ningún momento la eliminación del techo de los 1.200 MW”, a efectos de garantizar el cobro o no de la tarifa actual. De hecho, detalló el Ministerio, “el secretario general de Energía se mantuvo inflexible en cuanto al mantenimiento de los plazos establecidos en el Real Decreto remitido en septiembre a la CNE para informe y en la Resolución del 27 de septiembre de 2007, por la que se establecía el plazo máximo del mantenimiento de la retribución fotovoltaica”.
Industria afirma que el plazo límite del 29 de septiembre de 2008 es definitivo y no se otorgará ninguna prórroga al respecto. “Por tanto a las instalaciones que obtengan su inscripción definitiva una vez finalizado el plazo, les será de aplicación la nueva regulación que se establezca”, subrayó. En este sentido, el Ministerio indicó que planteó al sector la necesidad de establecer un mecanismo que permita un crecimiento sostenible de esta tecnología, y que asegure el control del ritmo de implantación de nuevas instalaciones.
En opinión de Industria, el mantenimiento del ritmo actual de crecimiento a los precios actuales “podría poner en riesgo el futuro marco de apoyo a este sector”.
En este sentido, según el Ministerio, “la propia Asociación coincide con el Ministerio en la necesidad de crear un nuevo sistema, de aplicación una vez alcanzados los plazos fijados”.
El cuento de la lechera de las valoraciones
El tarro de las esencias, imaginación a raudales, lo abrió hace unos días el fabricante alemán de componentes para automóviles Bosch al alcanzar un acuerdo con Ventizz para hacerse con el 50,45% del capital de la empresa Ersol Solar Energy, que pagará 546,4 millones de euros. La multinacional alemana pagará 101.000 euros en metálico por cada acción de la compañía, lo que supondrá el pago de un precio un 68% superior al valor de las acciones registrado en los últimos tres meses. Esta operación está pendiente de la aprobación de las autoridades de competencia.
Ersol Solar Energy, que cuenta con una plantilla de 1.000 trabajadores, desarrolla paneles solares y en 2007 registró una facturación de 160 millones de euros, mientras que durante el presente ejercicio la firma prevé alcanzar unas ventas de 300 millones de euros. Bosch resaltó que con esta compra tiene el objetivo de ampliar su presencia en el área de negocio de las energías renovables. “Bosch contribuye significativamente a proteger el medio ambiente y a conservar los recursos”, añadió el presidente del consejo de administración de la multinacional alemana, Franz Fehrenbach.
¿Tarro de las esencias? Sí, porque muchos analistas han buscado comparaciones en los multiplicadores, lo que paga uno por el otro y los trasladan a Solaria, sin más. Ahí puede estar el error, en las odiosas comparaciones, porque Solaria es Solaria y Ersol Solar Energy es Ersol Solar Energy.
