Fernández de Sousa, el colmo de la hipocresía.
No sé por qué, pero este personaje me parece un clon de Ruiz Mateos, embaucador, iluminado, paternalista, facineroso y mentiroso.
Vamos por partes:
En primer lugar justifica no haber presentado sus cuentas en tiempo y forma porqué estaba en negociaciones para vender una piscifactoría en Chile y tener problemas de tesorería.
¿Tiene eso algo que ver con la obligada presentación de las cuentas anuales del 2012 cerradas y auditadas?.
Luego desmiente haber utilizado "información privilegiada" al haber vendido sus acciones, al igual que hicieron otros miembros del Consejo, justo antes de presentar el pre-concurso de acreedores.
Tiene la desfachatez de afirmar que lo hizo para ayudar a la empresa.
Se olvida Fernández de Sousa de decir que hizo exactamente lo mismo antes de la última ampliación de capital, lo que le permitió jugosos beneficios con la complacencia y/o connivencia de la CNMV.
Tampoco dice que la "ayuda" que le hizo a la empresa fue solo de un tercio del producto de su última venta y a un 5% de interés.
Justifica el haberse expandido y crecido con "apalancamiento", al igual que la mayoría de empresas de ese País. Y que los problemas surgen al contraerse el crédito. ¡Bravo! ¡Viva el ladrillazo!, matrícula de honor al Consejo de Pescanova, a los Consejos de las Cajas y Bancos acreedores y a la clase política que se enorgullece al potenciar la marca España y la marca Pescanova,
Sigue la entrevista alucinante diciendo que la deuda de 3400 millones no es tal, ya que la "marca" Pescanova en libros tiene un valor de 0 y todos sabemos que vale mucho mas. ¿Qué tiene que ver la deuda contraída con el Fondo de Comercio?.
Afirma que la empresa tiene "valor", que si el I+D, que si las cuotas pesqueras, que si el potencial de marca líder, que.... ¿Si tanto valor tiene su empresa, como llegan a la situación en la que se encuentra?.
Sr. Fernández de Sousa, nos ha vaciado los bolsillos, ahora no nos tome por imbéciles.