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Así me hice trader...

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#1

Así me hice trader...

El conocimiento del individuo, el de la masa, y del individuo al que pretenden involucrar dentro de una masa...

Los estudios de sociólogos y psicólogos distinguen claramente las características que tiene los individuos de forma independiente, y cómo éstas se ven transformadas en el momento que pasa a formar parte de una masa.

Las características de racionalidad, pensamiento crítico o inteligencia son mutadas al sentimiento de la multitud: impulsividad, excitabilidad o ausencia de espíritu crítico. En un resumen “en bruto”, las teorías de las masas sostienen que cuando los individuos pasamos a formar parte de la masa adoptamos rasgos ancestrales (rasgos comunes a todos los humanos, por formar parte de nuestro subconsciente colectivo, y por tanto, no estar sujetas nuestras acciones al mayor o menor grado de riqueza, clase social, aprendizaje o educación) Resumiendo, el individuo es racional y ha adoptado un aprendizaje y experiencia “X” a lo largo de su vida, pero la masa se comporta de forma homogénea, y actúa en base a los rasgos del subconsciente (herencia ancestral)

Sabemos lo contraproducente que es hacer un seguimiento exhaustivo a las noticias y titulares que los medios de comunicación económicos van generando minuto tras minuto, puesto que generan en nosotros impulsos, sensaciones, o sesgos a la hora de interpretarlas. De hecho, los malos resultados que presente un día una compañía pueden hacer que sus acciones suban como la espuma (la prensa de final del día dirá que “estaban descontados”), o bien que sus acciones bajen en picado (la prensa del final del día dirá que “se sabía que iban a ser malos, pero los analistas esperaban una mejora”, por ejemplo…)

La primera conclusión que extraigo es que una noticia no impulsa un precio, sino que lo hacen las velas anteriores y/o posteriores. Y si no repasad los impulsos de un precio tras una noticia para, a las horas siguientes o día siguiente, comenzar una fuerte tendencia justamente opuesta. Esto parece de perogrullo, pero me refiero a que la noticia no es la causa del movimiento, sino las expectativas previas a ser emitida o la generación de opinión posterior. Me explico: ¿los datos han resultado ser malos pero esperados?, ¿han resultados ser buenos, pero menos de lo normal? ¿Han resultado muy malos pero se espera cambio de tendencia? Una noticia es únicamente un medio para justificar un comportamiento, pero no una causa, puesto que la causa depende de las expectativas previas y la opinión generada a posteriori en la mente de los inversores.

En segundo lugar, y aun aparentemente de una temática diversa, me doy cuenta de cómo los traders independientes o pequeños inversores somos empujados por poderes mayores a formar parte de una masa, de forma que nos comportemos como ella, y por tanto, seamos sugestionables y manipulables. De esa forma nos convertimos en una masa esclava de los estímulos externos que recibimos.

Titulares como “la bolsa está muy barata”, o, “¿Corrección antes de un nuevo impulso?” son titulares con una clara intención. Sugestionar y predisponer a un gran número de individuos, de forma que agolpados bajo un pensamiento homogéneo, se forme una masa que pueda ser conducida y manipulada (una especie de gran “hedge found” a disposición de los grandes intereses económicos)

Porque los traders independientes o pequeños inversores no queremos ni tenemos interés en formar parte de ninguna masa. Hay masas que se forman de forma natural y otras lo hacen espoleadas por algún objetivo común, pero a los traders independientes y pequeños inversores se nos empuja y persuade a ser masa. Nosotros no queremos serlo, pero se nos aplican estímulos externos para que no agolpemos en una masa.

El único ámbito en el que los traders independientes o pequeños inversores podríamos tener un verdadero interés en aunarnos, y técnicamente no sería nada parecido a ninguna masa, sería para ayudarnos los unos a los otros a ser disciplinados en la realización de nuestras propias reglas de trading, en procurarnos el apoyo anímico que esta profesión requiere, y en la motivación para ir dando pasos pacientemente. De este modo combatiríamos la soledad del trader independiente, y nos veríamos ayudados psicológicamente en malas rachas.

#2

Recursos para la autoformación. Parte I. Comenzar la carrera de fondo.

Recursos para la autoformación. Parte I. Comenzar la carrera de fondo.

Hoy en día todo el que quiere edita libros o escribe blogs sobre el trading (yo mismo estoy escribiendo mi propio blog, orientado hacia la parte más importante y complicada) Del mismo modo, hay quien llega más allá e imparte cursos de formación que presuponen enseñar a operar cualquier activo.

Más allá de la mayor o menor validez que puedan tener, lo que más echo en falta es la conveniencia y orientación a la hora de establecer una carrera profesional que sea creíble, guiada, con método, y con seguimiento de la evolución y los resultados.

El problema que mayormente he detectado, y que algunas conversaciones me han confirmado es la poca formación creíble que existe que establezca un itinerario razonable en el tiempo. Hay cientos de cursos “de un solo día de duración”. Hay decenas de cursos “de 2-6 semanas de duración”. Y existen contados cursos planteados a más largo plazo de duración, como si de una carrera profesional se tratase.

Mientras descubro alguno que me seduzca o realmente me parezca apropiado y creíble (y aseguro a quien lea el post que estoy al tanto de casi todas las webs y blogs relacionados con la bolsa) voy a exponer lo que a mi juicio serían los primeros recursos que habría que aprender en el camino hacia la búsqueda de la profesionalidad.

Me salto la 1ª etapa de cualquier aspirante a trader, que supone el encuentro con el mercado, las malas rachas, las sorprendentes y elevadas rentabilidades esporádicas a veces, los descalabros, el conocimiento de los productos, la incomprensión a veces del movimiento del precio, el montón de horas perdidas dibujando análisis técnico, etc. Esta etapa es la que yo denomino “etapa de quemado”. A partir de esta imagino que ya sólo continúan intentándolo entre el 20% y 30%. En esta 1ª etapa alguien debería sentarnos frente a él y decirnos claramente “la ignorancia es atrevida”. Pero me salto esta etapa. No reflexiono para los que están dentro de esta.

Yo voy a referirme a la 2ª etapa en la que uno, al verse un apasionado del trading, al sentirse capaz, ilusionado, pero realista a la vez, se dice a sí mismo que quiere ser profesional independiente de esto. Pienso que alguien que quiera dedicar su vida a esto debe de estar dispuesto a hacer el sacrificio de invertir 2 años de su vida en un proceso formativo, sin aspirar a ganar dinero, y sin apenas operar. Debe tener el coraje de dejar de hacer cosas más divertidas como dibujar trazos, combinar osciladores o estar dentro del mercado, e invertir su tiempo en una verdadera formación progresiva.

Si un atleta ha de llevar a cabo un portentoso entrenamiento físico de muchos meses, antes de ir a probar a competir, un trader debe de llevar a cabo una inmersión total en los procesos psicológicos apropiados para el trading. Al igual que un atleta trabaja su físico durante muchas horas, lo cuida y corrige errores técnicos, un trader ha de moldear su mente para que coja músculo, resistencia y rapidez.

Reorientar la mente hacia el funcionamiento del trading es más costoso en el tiempo de lo que parece. Para el grueso de las personas se trata de un proceso que dura años, unos lo logran y otros no, pero es posible alcanzarlo para la mayoría que se lo propusiese con verdadera motivación.

En esta 2ª etapa, a mi modo de ver, la más relevante de todas, habría que planificarse una formación de unos 8-12 meses absorbiendo información y reflexionando, para solamente operar a modo de prueba esporádicamente. Dividiría este proceso formativo en 2 bloques:

1) Reflexión, comprensión y asunción de conceptos tales como los siguientes:

  • ¿Por qué cuando compro el precio se da la vuelta y me salta el stop?
  • ¿Por qué tras saltar mi stop el precio se gira en la dirección que yo preveía pero conmigo fuera del mercado?
  • ¿Por qué necesito estar constantemente dentro del mercado para sentirme bien?
  • ¿Por qué necesito suficiente capital para operar, y además un colchón suficiente para vivir mientras genero buenos resultados?

Se tratan de conceptos aparentemente simples, conocidos por casi todos, pero que no suelen saberse superar en su conjunto.

2) Recursos formativos para reorientar la mente al trading y conocimientos técnicos básicos. Yo recomendaría claramente leer 2 veces cada uno de estos libros y seguir semanalmente este blog.

  • Libro: La psicología de las masas (Gustave Le Bon): Esto es como entrar dentro del “Matrix” del mercado.
  • Libro: Trading en la zona (Mark Douglas): Ayuda a iniciar la reorientación de la mente hacia el entorno del trading.
  • Blog: Bolsa y dinero (Javier Pena): un trader que pasó de ser peluquero a ganarse normalmente la vida con el trading, de forma consistente, tras años de entrenamiento y autoconocimiento.

Se trata de comenzar a comprender realmente la elevada dificultad de reorientar la mente hacia el entorno del trading, y los que s ehan preparado y sufrido algunos traders reales.

#3

Sensación de fracaso: Cuando crees hacer todo lo necesario y sin embargo los resultados son consistentemente nega

Sensación de fracaso: Cuando crees hacer todo lo necesario y sin embargo los resultados son consistentemente nega

Con 19 años compré mis primeras acciones y tras aproximadamente 1 año de tenerlas recuerdo que perdí dinero. Sin embargo, me gustó el mercado y puse interés con él, pero nunca supe ganar dinero. Después de eso, cada varios años volvía a interesarme por la bolsa sin tampoco lograr ganar dinero. Y no me refiero a acertar buenos movimientos, que los cogía, sino a ganar dinero consistentemente, ya que todo lo demás es puro hobbie.

Sin embargo, hace 2 años comencé de nuevo dispuesto a tomármelo en serio,
ya que las veces anteriores habían supuesto para mi un mero pasatiempo, para ver si ganaba algo de dinero, pero me salía el juego bastante costoso. Ahora era diferente. Quería profesionalizarme. Formarme, tener un plan de trabajo, planteamientos serios, y aspirar a poder vivir de aquello que no había dejado de gustarme y me había ido acompañando durante toda mi vida.

Por algún motivo concreto ha habido 2 cuestiones que he tenido claras desde que comencé a querer profesionalizar mi trading, (intradía, swing trading, etc.) La 1ª de ellas es que en la psicología residía la clave del éxito en el trading. Todo lo demás se aprende con el tiempo y logra aprenderlo todo el mundo, al menos para poder ser un trader “decente”. La 2ª de ellas fue mi “normalización mental” en el proceso de colocar un stop, justo al segundo siguiente de abrir una posición. Pero no un stop mental, sino un stop dado de alta en la plataforma. Algo que mi mente consideraba normal y hacía siempre, por lo visto para otros era menos asimilable.

Como cualquier aspirante, quieres correr todo lo posible, así que comencé a operar a la vez que negociaba con importes que tenían poco en cuenta la gestión monetaria y el riesgo. Mi Psicología la iría formando sobre la marcha, pensé.

Con un saldo de 3.000€ logré ganar 7.000€ en 5 meses. Creí que esta vez sería la definitiva. Que ya había encontrado mi punto. Sin embargo, en los 11 meses siguiente perdí esos 7.000€. Goteando, poco a poco, pérdida tras pérdida, stop tras stop, mi cuenta no paraba de bajar, casi todas las semanas, todos los meses.

Hice 2 parones por en medio. Una especie de “reseteados” mentales que son muy positivos para oxigenar la mente, analizar qué es lo que puede estar haciéndose mal, y dejarse claro a uno mismo que no es un adicto al trading, sino que le dedicas muchas horas porque quieres vivir de él. Nada de esto surtió efecto, pero sí que logré intuir que en cada reseteado yo moldeaba mi mente al trading. Quizás era cuestión de tiempo, por lo que lo fundamental era no fundirme el saldo de mi cuenta de trading por el camino.

Comencé a reducir el volumen de mis trades (tanto lotes como cfd´s sobre acciones) y a darme tiempo. En ese momento fue cuando comencé a leer libros de psicología, artículos en internet, a formar mis propias apreciaciones de cómo trabajar la mente, y en definitiva, a concentrar casi todas las horas dedicadas al trading a trabajar el aspecto psicológico.

Uno de mis principales problemas era el de la “sobreoperación”. Lograba evitarlo unos días, pero el día menos pensado, al terminar mi sesión de trading, me daba cuenta de que de nuevo había caído en ello. Sobreoperaba en exceso, pero ese no era el problema. El problema era que yo delimitaba unas sencillas normas para cumplir, y unos límites para no rebasar, y no los cumplía casi nunca. ¿cómo era posible eso? Era frustrante.

En ese momento entendí lo que supone decirse a uno mismo durante muchas veces: “voy a dejar de furmar” y no poder cumplirlo. O para los alcohólicos decir: “hoy no voy a beber” y no poder evitarlo (un famoso libro de trading toca este tema en concreto) ¿Podéis imaginar mayor frustración que no ser capaz de cumplir las normas que uno mismo escribe libremente?

Tras el segundo reseteado esperaba que me fuese mejor, pero de nuevo travesía por el desierto. Era como si yo supiese mucho más del mercado, y sin embargo este seguía dándose la vuelta para romper mis stops. Lo que sucedía es que al operar con poco importe las pérdidas eran reducidas, lo que me daba tiempo.
¿Cuántos días llegué a pensar que nunca sería capaz de lograr ganar dinero de forma consistente? Pérdidas y más pérdidas, eso sí, cada una de ellas de pequeño importe, pero debido a mi sobreoperación, abultadas en su conjunto. Para combatir esta sensación de frustración me repetía a mí mismo que esto no era más que otro oficio, y que yo iba a ser capaz de ganarme la vida con él, antes o después. Es más, era lo que yo deseaba para mi vida.

Supongo que como habrán experimentado muchos, llega un día en el que las cosas te salen bien. Llegas al día siguiente, y de nuevo te salen bien, y de esa forma van pasando las semanas y de repente eres consciente de que ganas más que pierdes. Con la reflexión semanal que es necesaria, de repente llega un día en el que te das cuenta de que no sobreoperas. Sí, bueno, hay algún día en el que sin atender a una señal clara del todo a veces abres una posición, pero si te das cuenta rápido la cierras, aunque pierdas unos pips. Después aprendes a que es e incluso mejor cerrar completamente la plataforma, y lo haces.

La fuerte frustración que puede llegar a experimentarse, durante muchos días de trading, te hacen fuerte si eres capaz con ello de evaluar cómo piensa tu mente, cómo es tu comportamiento según el día bueno o malo que hayas tenido, si tu cabeza está despejada o embotada, etc. Si todos esos días de frustración los pesasen y los pusiesen sobre nuestra cabeza nos derrumbaríamos por completo. Sin embargo, si esos días de frustración sirven para reorientar nuestra mente hacia las leyes que rigen el trading, entonces son días ganados.

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