Buenos días.
Nuevamente comprobamos que la política es la principal expresión económica de nuestra sociedad, de nuestro proyecto común europeo.
Tras unos años de tregua en los que se ha producido una cierta recuperación (o sea, aparente y frágil) en los que unos cuantos países ha "ordenado" sus cuentas, a menudo con duros ajustes, ahora le toca a Italia. No podía ser de otro modo, si se hubiera juntado el "italian job" con lo de Grecia, Portugal, Irlanda y España... hubiera reventado todo.
Pero si Europa quiere tener una posibilidad de medrar en su actual concepción (que no olvidemos que se acabará mostrando el diseño inicial de unos Estados Unidos de Alemania) y aprovechar una hipotética crisis de otros actores mundiales, debe sanear mucho más sus debilidades. Italia es la principal.
El problema italiano hace tiempo que, de forma recurrente, salta a la palestra. Es de peor pronóstico, y por tanto tratamiento, que el español. No sólo por sus datos económicos sino por sus peculiaridades sociales (los pequeños inversores particulares poseen gran cantidad de deuda nacional), que hacen que un hipotético proceso de reestructuración de su deuda pública mediante un ajuste bail-in (el bail-out se descartó en su día por el BCE y el FMI) pueda desencadenar terribles desórdenes sociales y elevar las ya de por sí notables posiciones anti-euro en su parlamento. Como dato a favor, está el tito Draghi, que en su último tramo como presidente del BCE hara lo que haga falta para que no sea su país de origen el que provoque su descrédito.
Así que, en resumen:
- No creo que estemos ante un crack mundial, todos los que se han dado han venido de USA (cuando y cómo les conviene).
-Esta fase de la enfermedad europea, la veo como una oportunidad de compra. En el peor de los casos, aunque el euro se rompa o se rediseñe las acciones en una empresa seguirán representando una parte alícuota de la misma, independientemente de la moneda en la que estén denominadas.
-Coincido con la estrategia de Mohican de los niveles de entrada, solo añadiría que es posible que hacia mediados de junio veamos una alineación fuertemente alcista al apañarse (al menos temporalmente) muchos puntos ahora desfavorables. Aquí puedo meter la pata hasta el corvejón, lo reconozco. Pero de momento es lo que pienso.