La inflación y la guerra de Ucrania son temas en cierto modo independientes.
La inflación ya estaba por las nubes antes de la guerra, que no lleva ni una semana y probablemente vaya para largo... con lo cual los bancos centrales tienen que atenerse a su mandato que es controlar la inflación, y subir los tipos de interés.
Si el Banco Central Europeo no llevara años y años dando largas y perdiendo soberanamente el tiempo a propósito, no se habría quedado sin opciones ahora. O suben tipos de interés o suben un 10% los sueldos.