Los bancos centrales lo desvirtuan todo, a veces temporalmente y otras de manera casi permanente aparentemente. La era post pandemia también ha activado el carpe diem extremo, ninguno queremos dejar para mañana lo que podamos hacer hoy, de ahí que no haya bajadas de consumo y que aún con tipos de interés altos no decaiga y se enfríe la economía.
A ver si es verdad que el oráculo de los bancos centrales han conseguido el santo grial de influir en la economía sin romper algo. Parece que de momento una alta inflación y unos tipos de interés altos lo soportamos los consumidores y empresas, no afectando a caídas de consumo ni a menores ganancias. Digo parece porque no todas las empresas siguen creciendo a doble dígito y por debajo no todos los ciudadanos pueden seguir consumiendo como si no hubiera un mañana.
De momento, subida vertical en un mercado alcista que parece no tener un final. Todo 'amañado' con permiso de los bancos centrales haciendo que la economía no caiga por su peso enfriándose lo necesario.
Habrá que ver si de verdad en este nuevo paradigma se consigue controlar la inflación y no caer en estanflación, porque de recesiones ya ni hablamos, nos dicen que son de otra época.