Informe anual de NBI:
https://www.bmegrowth.es/docs/documentos/OtraInfRelevante/2022/03/05062_OtraInfRelev_20220322.pdf?hijjKQDestaco la carta de Roberto Martinez
Presentamos a continuación las cuentas consolidadas 2021 del grupo NBI. A pesar de las adversas circunstancias ha sido un buen ejercicio, con crecimientos respecto al año anterior cercanos al 77%, tanto en ingresos como en EBITDA. La demanda ha continuado la recuperación iniciada a finales de 2020 y se han implementado importantes medidas de ajuste en personal y mejoras en productividad que nos han permitido recuperar los niveles de facturación pre-covid en todas las unidades de negocio. Ello a pesar del incremento descontrolado de los precios de las materias primas, energía y transporte. El ratio de endeudamiento ha mejorado considerablemente, hasta situarse en 2,9 veces EBITDA. Estas favorables expectativas para afrontar el ejercicio 2022 se han visto ahora truncadas por la
guerra recientemente iniciada en Ucrania.
Este año cerraremos el plan estratégico 50/22 y se lanzará el nuevo plan director.
Los principales hitos que han marcado el ejercicio 2021 son los siguientes:
• La demanda ha mantenido la recuperación iniciada a finales de 2020 en todas las
unidades de negocio.
• Implementación de importantes medidas de ajuste y de mejora de eficiencia para hacer
frente a la crisis derivada del Covid-19.
• Avance en integración de las tres sociedades adquiridas el año anterior: Galindo (unidad
de mecanizado, en Vizcaya), FKL (rodamientos, India, en la actualidad NBI India) y
Turnatorie Iberica (aluminio, Rumania, actualmente NBI industrial Oradea).
• Ralentización en los procesos de homologación de los rodamientos fabricados en
Oquendo. Retraso en el desarrollo de la cadena de suministro de componentes para la
planta.
• Notable refuerzo del núcleo accionarial tras la incorporación de la familia Domínguez
(Grupo Mayoral) en abril y recientemente de la familia Galíndez (fundadores de
Solarpack) y de Onchena (familia Ybarra Careaga).
• Positiva evolución bursátil.
NBI alcanzó unos ingresos de 44,0 millones de euros, un 76,5% superiores a los de 2020. Este
incremento se debe en gran medida a la aportación de NBI industrial Oradea. A perímetro
constante, los ingresos hubieran supuesto un crecimiento del 23,0%. Durante el pasado ejercicio
se ha mantenido la recuperación de la demanda, excepto en el sector auto, en el que se ha
ralentizado de forma importante durante el último cuatrimestre. Dicha contracción se debe a
la aceleración del cambio en la tecnología de los motores impulsada por las autoridades,
además de los problemas de suministro de chips que están sufriendo los fabricantes OEM. La
planta de Rumania es la única con un peso significativo en el sector auto. El EBITDA obtenido
ascendió a 6,8 millones de euros, lo que supone un aumento del 77,4% sobre el año anterior. El
margen EBITDA (%) se situó en un 15,5%. Los ajustes aplicados en todas las empresas, junto a
las mejoras de eficiencia implementadas y la recuperación de las condiciones de mercado han
influido positivamente. Por el contrario, este margen se ha visto penalizado fuertemente por
el aumento descontrolado de los precios de las materias primas, costes salariales, transporte y
energía (en Rumania los costes de gas y electricidad han crecido un +250% y +300%,
respectivamente). El BDI (beneficio después de impuestos) se elevó hasta 391,5 miles de euros,
un 70,5% superior al generado un año antes. El ratio DFN/EBITDA a cierre de ejercicio se situó
en 2,9 veces, mejorando sustancialmente el ratio del año anterior gracias a la aportación de
las nuevas sociedades incorporadas al Grupo.
Como hemos explicado anteriormente, los resultados obtenidos son consecuencia de la
recuperación de la demanda tras la fuerte contracción sufrida por el mercado industrial durante
varios meses tras la aparición del Covid-19, así como de las medidas dirigidas a mejorar la
eficiencia. Sin embargo, durante los dos últimos trimestres, el margen EBITDA se ha visto
penalizado por el incremento totalmente descontrolado e impredecible en los costes
productivos y la dificultad de repercutir dichos aumentos a los clientes. De este modo, en 2022
alcanzaremos el objetivo de facturación recogido en el plan 50/22, mientras que la obtención
de un 20% de margen EBITDA se deberá posponer un año.
Las positivas expectativas con las que habíamos empezado 2022 se han visto interrumpidas por
la guerra iniciada en Ucrania. Las incertidumbres se multiplican en lo relativo al encarecimiento
de materias primas y costes de energía, problemas de suministro y dificultad de entregas. Esto
hace de nuevo muy difícil realizar estimaciones fiables a medio plazo. Continuaremos
presentando previsiones trimestrales mientras vaya avanzando el presente ejercicio. La
capacidad de adaptación ya probada del modelo de negocio de NBI será fundamental para hacer
frente a estos nuevos retos que se presentan y continuar con nuestro plan de crecimiento una
vez culminado el actual Plan 50/22.
La actividad comercial ha continuado muy penalizada en 2021 debido a la dificultad para viajar.
Se ha mantenido contacto regular con los clientes, pero principalmente de modo telemático.
Recientemente hemos podido retomar las visitas presenciales, lo que nos permitirá aumentar
la facturación en las distintas unidades del Grupo, con especial interés en el mercado de India
y países limítrofes. Para ello constituimos el pasado ejercicio nuestra filial NBI India.
A lo largo de 2021 hemos avanzado en la integración de las tres compañías adquiridas el año
anterior, a pesar de las dificultades por la situación de cada una de ellas. Industrias
Metalúrgicas Galindo, por el empeoramiento del sector aeronáutico. NBI India, por la dificultad
para viajar al país y poder desarrollar la planta con el fin de ampliar la gama de rodamientos
fabricada internamente y poder operar en un mercado grande y con un crecimiento elevado.
Por último, NBI industrial Oradea, la adquisición más importante acometida por NBI, dedicada
a la fundición e inyección de aluminio y que, como ya hemos explicado anteriormente, ha
sufrido un incremento del 37% en sus costes medios ponderados (sin incluir materia prima).
Durante 2021 la aportación de la planta de Oquendo ha sido mínima. Por una parte, la parada
de la actividad y los menores recursos disponibles (ajustes de plantilla, teletrabajo,
restricciones para viajar…) han provocado en nuestros clientes una falta de capacidad técnica
que les ha impedido avanzar en los procesos de homologación de los productos NBI. La falta de
ventas les ha forzado a incumplir los contratos de suministro con sus actuales proveedores, por
lo que no tenían ninguna urgencia en buscar proveedores alternativos. Por otro lado, aunque la
cadena de suministro de componentes para la planta estaba avanzada, durante el último año
su desarrollo se ha visto ralentizado notablemente por la imposibilidad de viajar a China e India.
Recientemente se ha redefinido el nuevo plan de inversiones para la planta de India (con casi
dos años de retraso) con el fin de desarrollar el plan de fabricación que nos permita abordar
con garantías el mercado local.
Uno de los hitos más importantes en los últimos meses ha sido la entrada de relevantes
accionistas en el capital de NBI. En abril se incorporó la familia Domínguez, propietarios del
Grupo Mayoral. Y recientemente (enero 2022) las familias Galíndez (Solarpack) e Ybarra
Careaga. De este modo hemos reforzado notablemente nuestro núcleo accionarial, lo que nos
permitirá afrontar el plan de crecimiento en el que se encuentra inmerso el Grupo.
Contamos asimismo con proveedores financieros que mantienen intacta su confianza en el
proyecto NBI. En 2022 culminará el vigente plan estratégico y en los próximos meses se
presentará un nuevo plan director con horizonte temporal de 4/5 años y en el que estamos
trabajando en la actualidad. En 2021 el precio de la acción se revalorizó un 33,9%, con un valor
de cierre de 6,00€/acción. Por su parte, los bancos mantienen su apoyo a NBI, acompañándonos
con su financiación en los distintos proyectos que estamos acometiendo.
Las actuales incertidumbres políticas y económicas hacen muy difícil realizar previsiones a
medio plazo, por lo que continuaremos publicando nuestras estimaciones en cada informe
trimestral. Las principales líneas de actuación consistirán en conseguir nuevas homologaciones
para la planta de Oquendo, lanzar plan de capex para India, duplicar la capacidad de NBI
industrial Oradea, definición del nuevo plan industrial de Galindo, así como el impulso de la
actividad comercial en rodamientos para aprovechar la capacidad de producción de las plantas
de Oquendo e India. Lanzaremos un nuevo plan de fidelización para nuestros principales
ejecutivos, así como un programa de desarrollo directivo para preparar a los futuros gestores
del Grupo. Durante 2022 se publicará el nuevo plan director.
En NBI continuaremos, pero sin urgencia, abiertos a analizar oportunidades de crecimiento
inorgánico que puedan presentarse. Siempre siguiendo los criterios fijados de aportación de
valor al Grupo y con precios que presenten múltiplos razonables.
De acuerdo con nuestro compromiso de total transparencia con nuestros accionistas, en 2022
mantendremos nuestra política de presentar, como venimos realizando desde nuestra salida al
BME Growth, los resultados trimestrales a finales del mes siguiente al cierre del trimestre. De
este modo, presentamos nuestras estimaciones para el primer trimestre 2022 como Información
Privilegiada el pasado día 28 de febrero.
Para finalizar, reiteramos de nuevo el compromiso y la determinación de todas las personas
que formamos parte del equipo de NBI para seguir cumpliendo los objetivos que nos
marquemos.
Un cordial saludo,