Aquí voy a mojarme.
SAN ya ha tocado 5 euros en, al menos, tres ocasiones, la última incluso los rebasó a la baja saltándose incluso los 4 euros. Como puse en otro post, en aquella ocasión y teniendo en cuenta los precedentes ahí tomé posiciones y seguí hasta los 4,50 euros. (Obviamente empecé con minusvalías).
He aquí que, por aquellos tiempos, los del "nos hundimos" hablaban de que podría irse a 1 euros y muchos se quedaron ahí esperando a ese precio... que nunca tocó. Por mi parte, decir que tampoco esperé al límite de lo que llegó, me salí antes de los 6 euros, pero triplicó de largo su precio de mínimos (insisto, no dupliqué ni tripliqué ni cosas de esas).
Como digo siempre, cada uno conoce lo que sabe, lo que espera, es dueño de su dinero y debe tomar sus posiciones tomando en cuenta tanto los riesgos que asume como los beneficios posibles que espera obtener.
A partir de ahí y teniendo esto en cuenta, cada inversor en bolsa es un mundo, unos esperan precios que nunca llegarán y otros compran y, a la que les va un poco en contra la posición, venden con minusvalías. Dos cualidades que he necesitado para seguir vivo en el mercado es la sangre fría y unos nervios templados, sobre todo cuando no se tiene la experiencia necesaria.
Dicho todo esto, Novatobolsa, toma tu decisión, sin miedo. Sigue tu instinto, dejalo fluir. Conocete y descubre si podrás dormir tranquilo perdiendo dinero. Preguntate sin autoconvencerte si tienes suficientes conocimientos para estar en el mercado, si cuentas con un sistema de inversión adecuado que te permita entrar cuando quieres y salir de igual forma. En definitiva, si quieres tomar la responsabilidad de conducirte en un mercado que tendrás que seguir constantemente porque esto no es un "dispara y olvida".
Finalmente, una frase de una película que se me ha venido a la mente mientras escribía esta respuesta, la decía un actor caracterizado de monje tibetato al otro actor protagonista: "loco, cree que le he ayudado, no sabe dónde se ha metido".
Suerte a todos.
no desaparece lo que muere, desaparece lo que se olvida