Despido más barato
El contrato indefinido ordinario con una indemnización de 45 días por año trabajado y un máximo de 42 mensualidades desaparece. La indemnización será de 33 días por año trabajado y un máximo de 24 meses a partir de ahora para todos los contratos, aunque las compensaciones acumuladas no se anulan de forma retroactiva para los que tengan ahora contratos indefinidos.
De esta forma, a partir de ahora, la indemnización que se va acumulando para los que tengan contratos en vigor será de 33 días por año trabajado. Además, para facilitar el cálculo, la norma establece que el importe indemnizatorio resultante no podrá ser superior a 720 días de salario.
Pero casi más relevante que ese cambio será el de la concreción de las causas por las que las empresas podrán recurrir al despido procedente, que contempla una indemnización de 20 días y que es el menos usado en España. El texto concreta que se podrá aplicar cuando la empresa registre pérdidas -algo que ya se contemplaba- o caída "de los ingresos o ventas" durante tres trimestres consecutivos -esta última parte es la novedosa-.
El Ejecutivo reconoce que se facilita despedir con 20 días de indemnización, ya que no se recurrirá al despido exprés, por el que el empresario abonaba 45 días por una extinción laboral improcedente a cambio de evitar un proceso judicial.
Fátima Báñez ha asegurado que los procesos de despidos procedentes "por supuesto" tendrán control judicial.
No obstante, el Gobierno elimina la autorización administrativa previa para solicitar la reducción de jornada y los expedientes de regulación de empleo, que serán supervisados una vez realizados.
La eliminación de la autorización administrativa en los ERE también conllevará un despido más barato, al evitarse la negociación con los sindicatos en la que se podía llegar a obtener indemnizaciones de hasta 90 días, según afirmaron fuentes de Empleo a Efe.