Como la política y como casi todo, bueno, todo. Nunca se puede decir de este agua no beberé, mañana haré tal o volveré la próxima semana, porque nuestro futuro siempre es incierto.
Para caos el que estamos teniendo estos días. No hay día que no nos pase algo raro o más raro o rarísimo. Como el pedido de comida a domicilio que no hice y llegó. Panzada de cosas raras que nos tuvimos que meter entre pecho y espalda porque no hubo tiempo ni de decir que no.
Por lo visto, el restaurante tiene los entrantes preparados, es calentar en microondas y salir escopetados con la moto, y como están cerquísima de casa, para cuando le expliqué a Barbudín lo que me había ocurrido al pulsar "Continuar", ya estaba tocando el muchacho en el portero automático del portal.
Alucinando me dejó de la velocidad.
Por lo menos, lo "pedido" estaba bueno. ¡Menos mal! Y por fin, probé la yuca que es un alimento que por no llamarme la atención, jamás lo había comprado/cocinado/ comido. Con miel, aceptable...
Luego falla la batería de un coche, luego el de él. Alegría al cuerpo. Que está el señor más tiempo en el taller que en casa. Ya le he dicho que se compre un "mono" de trabajo, para no desentonar con el ambiente que acostumbra... prácticamente a diario. Hoy la batería, mañana la otra, al otro una revisión, que si habrá que ir pasando la ITV. ¡¡Lo caro que sale un coche de mantenimiento!! Mucho más que la compra, pero muchísimo más...
Y no es por fardar de viejita, pero tengo el convencimiento de que ya se me ha pasado el arroz de conducir. Cada vez me da más pereza, hay agresividad en las carreteras, ni te cuento ya en la ciudad. ¡¡Qué prisa tiene la gente!! ¿¿A dónde van tan corriendo?? Vale, al trabajo y los findes y las vacas, ¿¿también están estresados?? ¡¡Qué agobio!!
El CV se adorna fácil últlimamente, ya has leído las últimas noticias. Másters del Universo, diplomaturas, licenciaturas, la madre que los trajo, ¿ha estudiado algún político algo? Serias dudas me entran.
Y mira que considero que para ser político, y para muchas otras cosas más, no hace falta gastar los codos. Prefiero alguien sin estudios, CON IDEAS... Pero eso tampoco abunda en nuestro Parlamento. Desgraciadamente para España.
La tarta deliciosa.
Pensando cómo agradecer en especie...
Un abrazo goloso
¡¡Sed muy felices!!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.