Tengo dos instalaciones contratadas con Securitas Direct, una en un negocio de mi propiedad y otra en mi vivienda personal.
En la madrugada del día 1 de septiembre he tenido un robo en el negocio, y la alarma no saltó. Securitas me confirma que todo funciona bien, que la alarma estaba conectada, pero que no saltó.
Les escribí porque me parecía insuficiente la respuesta. Ante la fata de una respuesta más amplia he hablado con ello. Me indican que la alarma no saltó, porque los ladrones destrozaron la central de alarma. Sin más. Les digo que en ese caso entiendo debería haber dado el sistema una señal de sabotaje, tal y como me habían contado al venderme el sistema de seguridad, y me dicen que las cosas son así, y que es lo que hay, y además con una prepotencia increíble y me dice la señorita que me ha atendido que son la empresa número 1 en seguridad y que tienen más de 1 millón de clientes.
Pues sabed todos lo que yo acabo de saber como consecuencia del robo, que es que vuestra seguridad no está garantizada, que pagáis como yo cada mes, para tener unas placas y una alarma que algunas veces si da guerra, pero que en el caso como el mío no me ha valido absolutamente para nada. Yo me enteré por el robo por una llamada de las fuerzas de seguridad, no por la empresa que en teoría garantizaba esa seguridad. Les he pedido que me ratifiquen por escrito lo que me han dicho por teléfono pero me dicen que no lo harán.
Adicionalmente yo también les compré y pago por una cámaras. Como consecuencia del robo, les he pedido me den las grabaciones de las cámaras (dos cámaras), me dicen que no hay ninguna grabación registrada en la memoria de las cámaras, y que no tienen responsabilidad ninguna, que es responsabilidad del cliente saber si sus cámaras graban o no.
En definitiva, me siento absolutamente desprotegido y también estafado. Para que pagué por los equipos y para que pago cada mes ?. Parece que funciona todo, pero el día que he recibido el robo, la seguridad ha sido cero.
Veremos ahora que acciones legales se pueden tomar, o si también me encontraré con que la letra pequeña del contrato no dice lo mismo que el mundo fantástico del comercial.
En definitiva, desprotegido como demuestra el robo, sentimiento de haber sido estafado, y prepotencia de la Srta. que me atendió al teléfono, que se presentó como mi asesora de seguridad, no sé muy bien que seguridad.