No conozco el sueldo de Trichet, pero aunque me lo dijeran tampoco me lo iba a creer, como tampoco me creo que la mayoría de nuestros gobernantes "no lleguen" a los 700.000€, entre bienes inmuebles, muebles y por mover...
A mí me encanta bailar, aunque reconozco que no se me da bien, pero bailar los impuestos es algo que no sé hacer, quizá sea porque sigo a pie juntillas lo de "a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César". Pero es que en este caso me parece un impuesto tan injusto, cuando sé que las grandes, de verdad grandes fortunas se van a escaquear del tema. ¡¡¡Pero si hasta Botín se lo lleva fuera!!!
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Respecto al apasionante tema de la fe, comentarte que hay una única Virgen María Madre de Dios y en función de sus apariciones en un sitio u otro, los diferentes calificativos que se le han ido dando a la Virgen históricamente, la cultura, tradición y costumbres populares han ido haciendo que en las distintas ciudades y pueblos se hayan generado distintas advocaciones y se vaya venerando a la Santísima Virgen con los distintos nombres que se le han ido dando, y al igual que los humanos decimos que madre solo hay una, Madre de Dios también solo hay una.
Para nada venerar una imagen de cualquier material (oro, madera, mármol o plástico) de la Virgen María o de Dios es idolatría, porque bajo ningún concepto adoramos o veneramos los creyentes a la imagen en sí, sino a lo que esas imágenes representan, es decir, al rezar ante un crucifijo, hablo con Dios, pero no creo que esos trozos de madera cruzados sean el mismo Dios.
Respecto a la comparativa con el becerro de oro, permíteme comentarte que no tiene nada que ver. Me explico. Cuando los hebreos salieron de la esclavitud en Egipto guiados por Moisés, éste subió al monte Sinaí para hablar a solas con Dios. Pero, al ver que tardaba muchos días, se sintieron abandonados (por su guía espiritual, por su Dios) y el pueblo hebreo le pidió a Aarón que les hiciera "dioses que marchen delante de nosotros" (que no les abandonaran, que fueran materiales).
Aarón accedió a participar en el pecado de soberbia por creerse capacitados de crear un dios y con el oro que llevaban, fundió un ídolo con forma de becerro, no como símbolo divino, sino como dios mismo a quien los hebreos adoraron y ofrecieron sacrificios.
Al bajar Moisés destruye el becerro de oro por el pecado de adoración a un falso dios, sea el dinero (que el oro representa), sea la avaricia, la soberbia...
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Tampoco yo voy a profundizar, porque también podría hablar largo y tendido de mi fe.
También podrías considerar que un trozo de pan ácimo (Biblia), comerse una Hostia sagrada podría ser un acto de absoluta idolatría, si no fuera porque creo firmemente en la transubstanciación y ahí, amigo, juega un papel básico e importantísimo la fe y sin ella, hay actos que más parecen teatro que un acto de amor y profundo respeto a Dios, en el cuál, quieres tanto a tu padre, que quieres que tu cuerpo sea templo de su Sacratísima Sangre y su Santísimo Cuerpo, pero no creo en absoluto que éste sea el foro adecuado para este tema.
Hay creyentes y no creyentes. Hay practicantes y no practicantes.
Pero los creyentes practicantes no somos idólatras.
Un saludo
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.