Nos vamos a quejar siempre, porque quejarse es gratis y nunca estaremos contentos. Es cierto que lo que hace apenas 12 meses se veía como un interés penoso y ridículo, ahora es un dulce recuerdo.
Antes cualquier entidad ofrecía un 3% o incluso más en sus depósitos, ahora exceptuando las entidades extranjeras, los intereses no superan el 1,4% sin vinculación. Y lo peor es que aún no hemos tocado fondo y los tipos van a seguir cayendo, pero ¿hasta dónde?.
La respuesta sólo la tienen los propios bancos. Lo que parece claro es que el próximo mes se esperan rentabilidades a la baja y a partir de diciembre o principios de 2015 será cuando podamos empezar a ver la luz al final de tunel.
Un saludo.