España se mantiene por segundo año consecutivo como la sexta economía más "miserable" del mundo, por detrás de Venezuela, Argentina, Sudáfrica, Grecia y Ucrania, y por delante de Serbia, Turquía, Brasil y Kazajistán, según el ranking sobre las "Economías Más Miserables del Mundo", elaborado por la reputada agencia Bloomberg El informe analiza 63 países y mide dos variables, el paro y la inflación. Vendría a señalar las economías más deprimidas, tristes, lamentables... miserables.En el otro lado de la balanza se sitúan Tailandia, Singapur, Suiza, Japón, Taiwán, Korea del Sur, China, Dinamarca, Hong-Kong y Reino Unido.Con una tasa de paro superior al 20%, nuestro país obtiene 21,2 puntos, ligeramente por encima de los 20,9 asignados a Serbia, y a cinco puntos de diferencia de Ucrania. La distancia, sin embargo, con el más miserable de la lista es enorme. Venezuela, con una inflación galopante, bordea los 160 puntos. Sobre el país latinoamericano también pesa el petróleo, ahora cotizando en mínimos y que representa el 95% de las exportaciones de la región. Un reciente informe del Fondo Monetario Internacional (FMI) señala que los precios llegarán al 720% este año, frente al 275% que alcanzaron en 2015. La consecuencia: escasez de alimentos, productos de higiene, medicamentos y demás artículos de primera necesidad, mientras el presidente del país, Nicolás Maduro, no hace sino alentar aún más este nivel de inflación importando bolívares de la Reserva Federal de EEUU y del Banco Central Europeo, según informa The Wall Street Journal.La economía de Argentina también acusa una elevada inflación. El año pasado, los precios cerraron próximos al 27% y, a falta de estadísticas oficiales, el nuevo Gobierno de Mauricio Macri, prevé que este año se sitúen en el entorno del 25%. La oficina de estadística del país, que ha sido muy criticada en la etapa de Cristina Fernández de Kirchner, dejó de publicar los datos a finales de año tras el cambio de Ejecutivo.El resto de las economías que lideran el Top5, lo están, al igual que España, por el elevado desempleo.