Espe o el neomaquiavelismo sin careta
Mucho se ha hablado estos días sobre los milagros de la lideressa. La buenecita de Aguirre, una señora muy educada, católica, apostólica y romana, una grande de España, azote de rojos y masones, siempre optimista y muy sonriente, una entusiasta de su gestión, infalible como el mismísimo Dios (sí, en Madrid hay también paro es por culpa de ZP, no por la gestión de los que gobiernan esa comunidad), Esperanza digo, se ha soltado el pelo y, muy a su pesar, ha quedado con su maoliente trasero al aire.
Uno no puede dejar de disfrutar con estos eventos, que tanto perjudican al partido del neoliberalismo furibundo, y que, a falta de una oposición seria y consistente, dejan el patio del PP lleno de caca por doquier.
Jeje, qué palabruzas tan gordas en boca de una señorona tan fina como doña Esperanza. Han hecho daño "al hijoputa"... O en un acto de inauguración, a un compañero de partido, "¿peor cómo has aprobado esta puta mierda?" o conspirando contra Rato... "¿Qué arma tenemos contra él?"... Mamma mía, la camorra es un convento de monjitas al lado de la señora presidenta.
Si este es el talante real de la moza, que Dios, o San Pedro, nos pille confesados como algún día llegara a ocupar la poltrona de la Moncloa. Esperanza, gracias por tus gestos, por fin hemos visto el verdadero rostro del terror.
Saludos