Ostentosa y fastuosa toma de posesión de De la Vega como consejera vitalicia del Consejo de Estado...
Parece ser que la austeridad no ha sido la nota predominante en la toma de posesión de María Teresa Fernández de la Vega como consejera vitalicia del Consejo de Estado. Según reza el artículo fueron tantos los coches oficiales empleados para las distintas personalidades que llegaron a colapsar algunas zonas de Madrid.
Al final voy a creer que yo no soy de este mundo pues yo creí que esta señora había sido defenestrada de la política y enviada al olvido por su mediocre labor y resulta que ahora la suben al Olympo.
Todo fastuosidad y lujo en la política. Para esto si que no falta dinero, todo un ejemplo para los ciudadanos a los que se les pide constantemente esfuerzos económicos para poder aliviar las cuentas públicas