Gana el "No" a la independencia en Escocia
Paras Anand, Director de Renta Variable Europea en Fidelity Worldwide Investment, realiza una reflexión sobre el resultado del referéndum en Escocia y su impacto en los mercados.
El primer punto a reconocer es que aunque el voto de ayer tenía un foco local, en realidad es mejor considerarlo como un alto en el camino en el que la dirección del viaje había sido establecida hace mucho tiempo. De alguna forma, el éxito final de la campaña unionista se puede acreditar a un replanteamiento del voto contrario a la independencia como un voto por el autogobierno, lo que subraya el hecho de que, con la emoción aparcada, los dos lados de la discusión habían estado siempre mucho más cerca de lo que hubieran querido admitir.
Hemos argumentado que la evaluación del impacto potencial del voto escocés en los mercados requiere dos cosas: la primera es entender el punto anterior y el segundo es mirar al referéndum en el contexto de la situación política del Reino Unido en términos más generales. En este contexto, podría ocurrir que el estado de ánimo que rodea el resultado de la votación sea de corta duración cuando el foco se vuelva rápidamente hacia los detalles y consecuencias de la 'devo max' (plena autonomía fiscal).
Además, dado que a medida que se aproximaba el referéndum el resultado era imposible de adivinar, esta perspectiva se trasladará a las próximas elecciones generales y, en el caso de que prevalezca un gobierno conservador, el referéndum sobre la adhesión a la UE. Por lo tanto, podríamos esperar un largo período de debilidad de la libra, sobre todo en relación con el dólar.
Pensamos que esta situación sería una buena noticia para el sector corporativo del Reino Unido dada la gran proporción de los ingresos y beneficios provenientes del extranjero, y por lo tanto beneficiaría al mercado en general. Por otra parte, mientras este ambiente de inestabilidad política sea dominante, es difícil ver cómo el Reino Unido podría experimentar algo más que un modesto incremento de los tipos de interés a corto plazo en los próximos años, lo que debería, en cualquier caso, ser beneficioso para la economía doméstica en su conjunto.