Si habéis decidido cancelar el producto que tengáis contratado tenéis que dirigiros a la sucursal/persona que os sirva de enlace y solicitar de forma educada pero muy firme vuestra decisión. Como mínimo os tendrán que explicar el porqué no proceden a la cancelación que solicitáis (supongo que no habrá nada en el contrato que habéis firmado que lo impida).
Si no os hacen caso y/o la explicación que os dan no es satisfactoria os sugiero que pongáis una reclamación al Servicio de Atención al Cliente (u otro nombre similar) de La Caixa y aseguraros de que os quedáis con una copia. Eso deja ya un rastro escrito de los hechos (os niegan la cancelación que solicitáis) y la fecha de la situación .
Casi seguro que ante la simple amenaza de que vais a poner una reclamación a Atención al Cliente, cederán (por el rastro que deja el escrito).
Si no cedieran, debéis de seguir insistiendo (pedid ver al Director de la sucursal) y volved a poner más reclamaciones escritas. También podéis ir a pedir asesoramiento a la Oficina de Consumo de vuestro Ayuntamiento (es otro rastro que dejaríais, especialmente si formalizáis alguna reclamación por escrito en esa oficina).
No creo que la cosa pase de aquí pero ya lo cuento todo. Si pasa un mes sin que os conteste el Servicio de Atención al Cliente de la Caixa o la respuesta que os da no os satisface, el siguiente paso sería poner una reclamación en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La resolución de la Comisión Nacional del Mercado de Valores tarda varios meses y NO es de obligado cumplimiento para ninguna entidad bancaria. Sin embargo, al banco no le agrada que su supervisor sepa de sus malas prácticas.
Si se llegara hasta aquí y no se hubiera resuelto el problema, con una resolución favorable de la CNMV es el momento de plantearse la posibilidad de ir a denunciar al juzgado con elevadas posibilidades de ganarles el juicio.
Saludos
Posdata:
1) Aunque os hayan enseñado a llamarles “gestores” en realidad son simplemente los “comerciales” que tiene el banco para vender sus productos. Es igual que el comercial que os atiende en un concesionario de coches o en cualquier otra tienda. Este equívoco interesado les sirve para que depositéis en ellos una confianza que no se corresponde con la realidad de la situación (ellos están ahí para defender los intereses del banco)
2) El gran problema de fondo es que han conseguido que firméis un contrato sin entender lo que firmabais, sin conocer los riesgos e ignorando los costes. Por ello, haceros a la idea de que, muy probablemente, todo habrá sido legal salvo, supongo, la oposición actual a cancelaros el contrato. Desgraciadamente casi todos hemos aprendido así a espabilar y a empezar a aprender por nuestra cuenta un poco sobre inversiones. Tened cuidado en adelante. Os mando muchos ánimos.