Quien se quede con el otro 50% puede pedir judicialmente una extinción de dominio compartido. En pocas palabras: pueden exigir que se venda la vivienda y que con lo que se saque, se salde la deuda.
Lo bueno del asunto es que tú misma también puedes presentarte y pujar por ese 50% de propiedad, que quizá consigas por un precio menor al 50% de la deuda.
En números: si el piso se compró por 200.000 EUR y quedan 180.000 EUR de hipoteca, la financiera pedirá que se subaste el otro 50% de la propiedad, con un precio de salida de 90.000 EUR (el 50% de la deuda). Como comprar una propiedad compartida es un marrón, muy proablemente sólo te presentes tú, y te puedas adjudicar el 50% de la propiedad por 70.000 EUR.
Mi consejo: negocia (y pon por escrito) con quien se quede el otro 50%, siempre aconsejada por un abogado especialista en temas de vivienda. Lo ideal es conseguir el otro 50% de la propiedad por un precio inferior, y sin llegar a subasta pública, que lleva gastos (lo cual elevará el precio que querrá la financiera).
PD: Mi pésame.