La portavoz del Grupo Municipal del PP del Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, ensalzó este jueves la labor de los constituyentes de 1978 que expresaron "como nadie en la Historia de España" el "nunca más" al odio y enfrentamiento que se ha vivido en nuestro país desde la Guerra de la Independencia. Esa reflexión la realizó al dirigirse a los ediles de Ahora Madrid que han protagonizado desde que accedieron al Consistorio madrileño "manifestaciones impresentables y reprobables".
La líder del PP municipal se refería a unos tuits escritos por miembros del Grupo Municipal de Ahora Madrid "absolutamente intolerables e intolerantes" así como a la actuación de la concejala portavoz, imputada por un delito contra los sentimientos religiosos.
Aguirre se refirió a ese "conjunto ingente de manifestaciones" de algunos dirigentes de Ahora Madrid "que pueden ser consideradas como banalización del Holocausto, xenófobas, desprecio a las víctimas de la violencia machista o terrorismo". Durante el Pleno Extraordinario celebrado en el Ayuntamiento sobre Tolerancia y en Contra de la Incitación al Odio y a la Violencia, Aguirre se mostró dispuesta, eso sí, a aceptar esas excusas "sin son públicas, radicales y sinceras".
Publicidad
Y este Pleno podría ser el lugar apropiado para que las presentaran a todos los madrileños, que son, en definitiva, los ofendidos y despreciados con esas actuaciones", sentenció. Y añadió: "Independientemente de lo que resuelva la Justicia, esas responsabilidades políticas deberían llevar consigo la devolución del acta de concejal de todos ellos".
Compromiso para erradicar el odio
A su juicio, mucho más importante que tratar estos hechos concretos es que del Pleno "salga un compromiso absoluto de erradicar el odio y la violencia verbal y física de la vida política en Madrid".
Tras repasar brevemente lo que ha sido la Historia de España en los dos últimos siglos, "en la que el odio político ha tenido demasiado protagonismo", Aguirre recordó a los dirigentes de Podemos una declaración del Comité Central del Partido Comunista de España de 1956 en el que se renunciaba al odio, al rencor y al ánimo de revancha. "Y eso -subrayó- que todavía estaban cercanos la muerte y el terror de aquella Guerra Civil tremenda".
En este contexto, apuntó que ese afán de concordia se hizo aún mayor en los años de la Transición. "Algunos jóvenes creen que la Constitución se hizo bajo la amenaza de los llamados poderes fácticos que obligaban a no cruzar determinadas líneas y que ahora hay que hacer una nueva transición para traspasar esas líneas. Están profundamente equivocados. La única línea roja que tuvieron presente los diputados de 1978 fue el odio porque conocían muy bien la historia de España, de la II República, de la Guerra Civil y del franquismo, y sabían muy bien a dónde había conducido a los españoles el odio", afirmó.
Reconciliación
En su opinión, los padres de la Constitución no quisieron un texto donde media España se impusiera a la otra media. "Ellos quisieron una Constitución en la que todos pudieran encontrarse a gusto, una Constitución de la concordia, de la reconciliación".
Aguirre celebró que muchos de los concejales de Ahora Madrid que acaban de llegar a la política lo hagan llenos de ilusión y con ganas de acabar con todo lo que está mal, "pero no pueden creerse que son los primeros y los únicos que tienen esa ilusión".
"Tienen que saber y aceptar -añadió- que todos los demás que estamos aquí estamos llenos de ilusión y con ganas de acabar con todo lo que está podrido. Y tienen que comprometerse a erradicar de forma tajante y definitiva la violencia y el odio a sus adversarios de sus acciones, de sus palabras y, también, de sus pensamientos".